City of Shadows [Jace Wayland y tu]

Capítulo 20

Aquel hombre apoyó las manos en el suelo y se levantó intentando controlar su equilibrio.

-¿Papá? -preguntó Jace.

-Hijo.

Ambos se abrazaron en cuánto tuvieron la oportunidad. La intensidad del momento era tan grande que llegué a pensar que no se dejarian ir.

-Hijo, estás herido -dijo cuando se separaron- ¿Como me has encontrado?

-Estás muerto -negó Jace- Valentine te mató. Valentine está aquí.

-No Jace, soy yo -apoyó la mano en las mejillas de su hijo y le miró a los ojos entonces me miró- Soy Michael Wayland, el padre de Jace. Sé lo que te ha dicho Jace, pero he estado aquí 10 años.

-¿Y Danielle Lockwood? -pregunté por mi madre.

-Se la llevó con él. ¿Y tú eres?

-Soy Laura, su hija.

En ese momento, Jace perdió el equilibrio, pero por suerte Michael evitó que se cayese al suelo.

-Es veneno de demonio -expliqué- Él decía que estaba bien.

-Debemos encontrar a tu padre, no al mío.

-Su estela -murmuró Michael- ¿Donde está?

Se puso a buscar por su chaqueta hasta que sacó la carta donde estaba La Copa, yo la cogí y le dije donde estaba su estela.

-La runa es débil -informó- Valentine tiene un portal abierto. Vamos.

Yo recogí la espada serafín y ayudé a Michael a cargar a Jace.

-Jace, quédate conmigo -hablaba su padre- ¿Recuerdas nuestra primera pelea con demonios? Estábamos lejos del Instituto, en Kinshasa, tenías sólo 8 años pero eras tan valiente. ¿Recuerdas lo que dijiste?

-Estoy listo para morir -murmuró Jace.

-Y yo te dije 'A veces vivir es tan valiente como morir'.

-Es verdad, eres tú -a duras penas, Jace consiguió sonreír.

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NARRADOR EXTERNO

Isabelle estaba sentada en el sofá, limitándose a observar los vaivenes de su hermano mayor de un lado a otro de la habitación.

-Sólo sé que debemos sacarte de aquí. ¿A quién conocemos en Idris?

-Déjame pasar por esto, sin perder mi respeto por mí misma.

-Quizás pueda hacer que Lydia retrase el juicio.

Isabelle se levantó del sofá, se colocó de espaldas a su hermano y cruzó los brazos. Alec no paraba de dar opciones, pero para ella todas eran inservibles.

-¿Por qué? ¿Para poder quedarme aquí jugando al solitario mientras buscan otra forma con la que culparme? Para La Clave solo soy un chivo expiatorio, quieren La Copa.

-Entonces déjame conseguir tiempo para encontrarla.

Ella volvió a sentarse. Esta vez, Alec se agachó y le tocó el brazo.

-Izzy, soy tu hermano mayor, déjame ayudarte una vez.

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NARRA LAURA

No sabíamos dónde ir y teníamos poco tiempo. Así que en cuánto cruzamos el portal me vino una idea a la cabeza. El Jade Wolf. Sin comentarle el sitio a Michael, él aceptó sin pensarlo. Entramos pidiendo ayuda y nos encontramos a Chris y a Scott allí dentro. Estaban solos y vinieron en segundos hacía nosotros.