IV

6.2K 194 17
                                    

La cafetería quedaba casi al otro lado el colegio, asi que mientras nos dirigíamos allá le hice un pequeño recorrido a Nicolas para que conociera la escuela. Ibamos hablando y riendo. Nicolas era un chico muy atento y divertido, bastante relajado y, a decir verdad, muy guapo. Cada vez que volteaba a verlo me fijaba en sus ojos marrones, su cabello castaño claro y su piel morena. Su sonrisa era tan linda y tierna que me hacia erizarme.
Seguía sintiendo esa sensación extraña de hace un rato, pero no presté atención.

Finalmente llegamos a la cafetería.
–Gracias, _______–dijo con una gran sonrisa
–Cuando gustes.
Le sonreí y le hice un gesto de despedida.
Me dirigí a la mesa donde estaban mis amigos. Jared, Carolina, Diego, habían llegado Carlos, Yamiliz, Hillary, Alexandra y Raúl. Saludé a cada uno y me senté junto a Carolina.
–Te guardé un sandwich, ¡sin tomate!–me hizo un guiño. Sonreí. Carolina sabía que odiaba el tomate, pero amaba el ketchup *lo sé, soy rara*.
–¡No saben cuanto los extrañé!–exclamó Yamiliz posando su mirada en cada uno. Todos sonreímos.
Jared miró a Hillary quién le respondió con una sonrisa y, de pronto, se besaron tiernamente. Carolina miró a Diego como diciendo "bésame" y él, entendiendo todo, le acarició el brazo y la besó. Yamiliz y Carlos copiaron todo, al igual que Alexandra y Raul.

Sí, era la única en mi grupo de amigos que no tenía pareja. Ese momento fue uno de los más incómodos de mi vida.
Llevo 4 años sin novio, no cuento los demás porque no tenía ni edad para esas cosas, pero, desde que entré a secundaria soy una solitaria sin causa. Y, a decir verdad, no me importaba. Si llega, llega... Si no, más comida para mí.

El día se pasó volando, las clases no fueron tan pesadas teniendo en cuenta de que vamos empezando. Todo sigue igual. Todo sigue aburrido.
Al llegar a casa, no había nadie. Fuí a la cocina por un poco de agua y noté una nota color rosa pegada al refrigerador:
"_______, fuí donde tu tía Sonya. Llegaré algo tarde.
Hay una pizza en el refri.

Te amo, mamá. "

Bien, casa sola. Hora de netflix y pizza. *vida de soltera*.
De pronto, sonó el telefono. Era mi papá.
–Hola pá.
–Hola, hermosa. ¿cómo te fue hoy?
–Muy bien, ¿cómo estás?
–Bien, hija. ¿Quieres hablar con tu hermana?
–Dile que me llame por skype, debo contarle algo
–Jajaja, bien hija. Hablamos pronto
–Adiós pá, te amo.
–Yo más hermosa.
Colgué. Mis padres se divorciaron cuando tenía 8 años, más o menos. Tengo una hermana melliza. Susan. Ella vive con mi papá. Mi padre y yo no somos muy unidos, pero él siempre está al pendiente de mí. Mis padres no son de esos que se odian, se llevan muy bien, de hecho, ahora que están separados. Es mejor así.
En cuanto a Susan, somos las mejores amigas. Ella es mi cofidente. Aún sin vivir juntas, intentamos hablar todos los días y contarnos todo. Somos demasiado unidas.

~Skype~
–¡Hola tú!
–¡Hola tuu!
–¿Cómo te fue en tu primer día?–le pregunté
–¡Super! Vieras que conocí a tres chicos nuevos hoy, muy guapos. Mis profesores son geniales y mis compañeros son muy divertidos.

Susan era muy popular. Era muy bonita, pero su popularidad no se basaba en eso. Ella era muy sociable, de esas chicas que dan el primer paso, siempre tienen algo que decir. Para ella era muy fácil hacer amigos.
–Genial, Susan.–dije con una gran sonrisa
–He hablado mucho, ¡cuentame tú!
–Pues, todo igual de aburrido. En mi clase está Jared, asi que no estoy tan sola–solté una pequeña risa–Aun que, si hubo algo nuevo.
A Susan le brillaron los ojos.
–Hay un chico nuevo en mi clase. Su nombre es Nicolas y... Si esta muy lindo.
–Uuuh, ¿hablaste con él?
–Sí, le hice un pequeño recorrido por la escuela y me acompañó a la cafetería.
–¡Huele a romance!
–Jajajaja, estás loca. Jamás se fijaría en mí.
–El amor llega donde menos te lo esperas–dijo en tono coqueto. Volteé los ojos. Nos despedimos y guardé mi laptop.

"Y, de pronto, llegaste tú..."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora