Capítulo 34

29 4 0
                                    

Espero a ver la respuesta de mi madre o algún gesto expresivo,pero su cara esta como un papel en blanco.

Miro a mi padre a ver si hace o dice algo y por mi gran asombro veo como una lágrima se derrama por su sonrosada mejilla.

Me tenso al ver que nadie dice nada y permanecen en silencio sin hacer ningún movimiento brusco.

Estoy a punto de hablar cuando alguien me adelanta y estropea el silencio que estábamos presenciando.

-Todo esto es muy tierno y eso,pero,podríamos comer ya?Tengo hambre-dice Belinda y no puedo evitar soltar una carcajada que a ella se une la de Rubén y pronto la de casi todas las personas presentes.

Mi madre en cambio tiene la vista fija en el suelo y por su expresión,se que está pensando algo.

-Vayamos a comer-habla mi padre haciendo que todos nos movamos hacia las mesas donde se encuentra la comida.

Me muero de ganas de saber que está pensando mi madre,pero haciendo que quede con las dudas no dice nada,se mantiene callada.Si no fuera por los ojos abiertos podría decir que está durmiendo.

-Bien-responde al fin mi madre con voz ronca.
-Que está bien?-Pregunto yo sin entender muy bien el significado.
-Todo...Está bien, tú eliges-dice rindiéndose ante mi.

Creo que este será uno de esos días que no olvide jamás a pesar del tiempo.Tengo la mirada fija en mi madre cuando una lágrima se escapa de sus ojos verdes que me miran rendidos.

Esto a sido como una pelea y yo...la e ganado.

Me siento feliz pero también un poco culpable por el rostro que muestra mi madre.

Belinda está en el otro lado de la mesa, cuando Caramelo se enrosca con la correa haciendo que está se caiga y Belinda resbale hasta meter toda su cara en el pastel de boda.

Yo no puedo evitar sonreír asique lo hago sin disimulo,Belinda como era de esperar,se percata y viene corriendo hacia mi.

Con una mano llena de pastel y su cara pringosa se echa encima mía a propósito haciendo que caigamos las dos al suelo.

Me levanto y me dirijo corriendo al agua.Se que no sabe nadar asique aprovecho con la esperanza de que no se acerque a mi,pero si lo hace.

Princesa sin ModalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora