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Capítulo veintitrés.

// Lilly’s POV//

La última semana ha sido demasiado pesada. Es viernes y el lunes salimos a México. En la escuela nos dan una semana para celebrar Navidad y Año Nuevo. Bien, al menos Navidad no será celebrada éste año, el lunes es 25 de diciembre y con todo éste apuro no podremos celebrar nada. 

Con todo éste apuro del viaje he tomado píldoras cómo loca, al menos funcionan -porque las tomo de a dos- y logro sentirme menos ansiosa, aunque, estoy bastante segura de que cuando suba al avión perderán su efecto.

He estado haciendo maletas porque mamá siempre manda a hacer las cosas por anticipado. Meto mitad de la ropa que compré con mamá hace días y luego meto ropa de mi gusto, bueno, la que compré de mi mamá era un poco de mi gusto pero no totalmente.

- Mañana en mi habitación a las 7pm, sé puntual. – Escucho a Justin a mis espaldas y luego escucho la puerta cerrarse.

Espero que no me haga tener sexo con él en México, eso sólo causaría que me tirara al mar.

Después de empacar y ver televisión un buen rato voy a la cocina y me hago un sándwich de mantequilla de maní. Cuando termino de comer me pongo un pijama y me voy a dormir.

Me levanto con el mismo sentimiento horrible que tengo desde hace unos días, pasado mañana estaré viajando a otro país y eso me aterra. Voy al baño, tomo dos píldoras y me las trago, después de eso tomo agua. Luego hago mis necesidades. 

Bajo a la cocina para ver que desayunaré pero me encuentro con el almuerzo, no es extraño ya qué suelo levantarme tarde. 

- ¿Qué hay de desayuno? – Dice Justin con voz ronca llegando a la cocina uno 10 minutos después. 

- Son las 1:37am pero si quieres llamarlo desayuno está bien para mí. Y oye, ponte una camisa, hay gente entrando y saliendo de la casa todo el tiempo. – Dice Mindy. Justin se sienta a mi lado.

- Oh vamos, yo sé que te gusta verme así. – Dice él. Hago una mueca y miro a mi plato, no hace para nada fácil que me acueste con él. – ¿Qué? Ella ya sabe. – Mindy puso el almuerzo de Justin frente a él mientras lo miraba mal y antes de salir de la cocina le pegó en la cabeza. – Todo sería más fácil si todas fueran cómo tú. – Dice y me mira. – Oh, mira eso. ¡Es el sostén que te compré! – Dejo de comer, alejo el plato de mí despacio y con una mueca me levantó para subir a mi habitación –totalmente avergonzada-. Ni siquiera yo entendía porque usaba esa ropa interior, creo que eran las pastillas.

Cuando estoy arriba entro al baño y al salir de allí me cambio. Mientras espero que sean las 7pm coloreo dibujos a los que les faltaba color. Comienzo a pensar en qué lo que podría gustarme de México sería dibujar y pintar la playa, pero, estoy segura de que no prestaré atención al paisaje porque estaré muy ansiosa por volver.

Al terminar de colorear enciendo el televisor y sintonizo Disney Channel, están dando Es Tan Raven así que faltan más de treinta minutos para ir al cuarto de Justin. Voy a su habitación en cuanto acaba el segundo episodio de Es Tan Raven.

La puerta se abre unos quince minutos después, Justin entra a la habitación y cierra la puerta tras él. Se arrodilla frente a mí y cierro los ojos, cada día recuerdo más que no puedo verlo a la cara.

- No sé qué más puedo decir Lilly, sólo, intenta relajarte y hagamos esto bien. Sí no es así creo que nos voy a matar a am… – Repentinamente ato las manos alrededor de su cuello y lo beso, debo hacer esto bien y si no es así voy a suicidarme. Bien, píldoras, no me fallen. 

Él mete su lengua en mi cavidad bucal y comienza a masajearme los senos por encima de la blusa. De un momento a otro me tiene acorralada bajo su cuerpo, mientras me deposita en la cama. Ninguno de los dos dice nada en el momento, es normal, él y yo somos de pocas palabras, además, estoy muy mareada y abstraída como para decir algo coherente. Aparte de que me siento del asco. Justin se quita la chaqueta y los zapatos de ambos. Me desabotona los dos primeros botones de la camisa y los demás me los quita de un tirón, tira la blusa al suelo. Me siento extraña, debo aprovecharlo. Alzo sus brazos y le quito la camisa, vi de nuevo ése marcado abdomen que tanto odiaba pero que en éste momento me hace tener tirones en la zona más delicada. Vuelvo a besarlo y muerde uno de mis labios, suelto un jadeo. Me desabotona el jean y lo quita de mi cuerpo, yo hago lo mismo con el suyo. Se coloca sobre mí y sigue concentrado en besar mis labios y cuello, yo enrollo las piernas en su cintura y acaricio los músculos de sus brazos –me enseñó que eso le gustaba–. 

Empieza a dar pequeñas mordidas a mi cuello y deslizo las manos a través de su abdomen. Me quita el sostén y aprieto los labios. Vamos _____________, tú puedes. Se sienta en la cama y me sienta a horcajadas sobre él, masajea mis senos y tengo un placer repentino, cierro los ojos y siento su aliento en mis pezones, se me eriza la piel. Chupa uno de mis pechos y arqueo mi cuerpo, masajea el otro intensamente y succiono mi labio inferior. Chupa el otro y suelto un gemido cerca de su oreja –también les gusta eso–. Tengo la respiración agitada. Me vuelve a acostar en la cama y quita mis bragas. Estaba totalmente desnuda, la cosa era que no me sentía incómoda, lo estaba disfrutando, las píldoras son mágicas. Me atrevo a tumbar a Justin en la cama y quitarle el bóxer, cierro los ojos para no ver su erección, ni por todas las drogas del mundo voy a ver un pene. 

Trago saliva sonoramente y me siento sobre él, comienzo a frotarme contra él y oigo sus gemidos junto con los míos, beso su cuello y bajo hasta su pecho y abdomen, llego hasta la parte baja de su abdomen y me mira expectante.

Agarro su paquete entre mis manos y comienzo a acariciarlo de forma torpe. Sin embargo Justin jadeaba como loco, comienzo a sobarlo de arriba hacia abajo cómo él me ha enseñado y gime. Sigo acariciándolo y apretándolo hasta que Justin me para.

- Basta, me correré. –dijo como orden y me detuve.

Me toma de la cintura y me acuesta en la cama. Me abre las piernas y se mete entre ellas. Me besa, metiendo la lengua en mi boca y me masajea los senos. Besa mi cintura y baja a mi feminidad, besa uno de mis labios vaginales y jadeo mientras me arqueo hacia su boca, mete dos de sus dedos en mí y veo las estrellas. Gimo alocadamente cuando los mete y los saca repetidas veces. Sostiene mis muslos con ambas manos. Empieza a meter y sacar su lengua de mi feminidad y prácticamente grito. Me chupó, lamió y besó hasta que estuve a punto de correrme. Cuando se detuvo me encontré un tanto decepcionada. Sube hasta mi boca y me besa, luego siento su paquete cerca de mis caderas, vuelvo a arquearme hacia él y gimo, se mete por completo y gruñe mientras apoya las manos en mi cintura, se mueve lenta y rápidamente, haciéndome gemir sin control. Estaba muy cerca del orgasmo, Justin lleva un rato moviéndose profundamente en mí y no aguantare mucho más. Abro los ojos como platos y me corro gimiendo su nombre, de pronto Justin gime y se corre en mí. 

- No estuvo excelente… – Dice mientras recupera su aliento. – pero estuvo muy bien. Felicitaciones, puedes irte. – Dice mientras se levanta de la cama.

Las píldoras no previenen la vergüenza así que me levanto y me pongo la ropa lo más rápido posible. Luego me voy a mi habitación. 

StrangeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora