Scarlette...
*Flash-back*
Ese olor me es familiar, lo sé. Abro la puerta y ese olor se hace más presente. Un olor a dulce, a pasta y levemente a nueces o almendras. Entro a la casa y recorro el pasillo siguiendo con mi nariz el aroma.
Olfateo
Olfateo
Estoy segura que conozco el olor. Me quedo unos segundos parada en la sala de estar, haciendo memoria de ese olor. Y de repente el recuerdo viene a mi memoria.
¡PASTELITOS DE MAMA!
Corro con frenesí a la cocina y en mi camino aviento mi mochila al sillón de la sala.
-Hola hija, mira lo que acabo de hacer- dice mama mientras me enseña una bandeja llena de pastelitos decorados de diferente manera y hay muchos con nutella. Intento tomar uno pero mama me reprende- No Scarlette, hay que esperar a tu padre y a tu hermano.
-Pero ya tengo hambre-hago pucheros.
-Mejor dime como te fue hoy en la escuela-dice mientras me hace sentarme en la barra de la cocina-¿Que aprendes cuando estas en tercer año?
Y sin que diga más comienzo a contarle todo, como va mi tercer año de escuela, mis nuevos amigos y mis compañeros, lo estupenda que es mi maestra y todo lo que me gusta de mi escuela. Mama me escucha atentamente y pregunta acerca de todo lo que le cuento. Estoy tan feliz. Mama casi nunca me pregunta y es raro las veces que al llegar a cada esa aquí.
Después de un rato en el que mama me presta toda su atención, llega papa y Yusseff, y traen con ellos una pizza. Papa me carga y me besuquea, y yo me rio porque me hace cosquillas con su nariz. Ya cansados de tanto saludarnos nos sentamos todos a la mesa a comer una riquísima pizza de tres quesos y pastelitos de postre.
Una tarde llena de risas, anécdotas y amor. Por un momento me llego a sentir la niña con más suerte en el mundo, con una familia unida y llena de amor, pero claro, solo es un momento y tan solo un recuerdo....
*Fin del Flash-back*
Escucho murmullos.
Muchos murmullos, pasos rápidos, gritos y más gritos. Intento abrí mis ojos pero no puedo, siento mis parpados realmente pesados y desganados. No puedo más. No intento ni levantar mi cabeza porque sé que simplemente no voy a poder. Abro mis ojos y lo único que veo son sombras en penumbras, más murmullos y lo único que siento son nauseas. Mi estómago se revuelve por completo y solo me apetece vomitar pero no tengo ni fuerzas para hacer arqueadas. No quiero seguir luchando inútilmente contra algo que es imposible de ganar y nuevamente decido cerrar mis ojos.
Zack....
-¿Qué les pareció eso chicas?-camino a las gradas y acepto encantado una botella de agua que me ofrece Michelle.
-Juegas estupendo-dice Jocelyn.
-Somos tus admiradoras- suelta Gaby.
-Las más bellezas admiradores-digo y todas sueltan risita por lo bajo.
Me siento junto a ellas en las gradas y nos sumergimos en una plática de diversos temas. Clases, fiestas, tareas, partidos de basquetbol, mi asombrosa belleza, lo normal. Así paso mis tardes a veces, nada interesante pero siempre acompañado de lindas amigas, uno como hombre suele necesitar atención femenina.
En un momento de la conversación pierdo el hilo de mis pensamientos y recuerdo a Scarlette. Necesito ver la. Ella no solo es una amiga, es una hermana por la cual siempre me voy a preocupar. Estoy tan sumergido en mis pensamientos que no me doy cuenta del alboroto que empieza a armarse sobre la cancha.
-¿Qué pasa ahora?-Pregunta Gaby.
-Déjenme averiguar.
Me levanto y comienzo a trotar al círculo que se ha formado en medio de la cancha. Apenas acércame escucho gritos de unas chicas:
-¡Llamen a la ambulancia!
-¡Ayuden que nosotras no podemos con ella!-dice otra.
-¿Qué está pasando?-Le pregunto a un chico.
-Creo que encontraron a una chica
-¿Qué tiene?
El chico a mi lado no responde y solo se encoge de hombros. Alrededor empieza a ver más movimiento. Chicos haciendo llamadas: unos llamando a seguridad, otros a los de docentes y otros a las ambulancias. Veo un grupo de chicas tratando de tranquilizar a una y no dudo en ir a averiguar qué es lo que pasa.
-Disculpa, ¿Te encuentras bien?-Le pregunto a la que se encuentra en estado de histeria-¿Sabes que ha pasado?
-Es... una... chica-El hipo de su llanto le impide hablar bien-Esta inconsciente... parecía estar muerta-rompe en llanto de nuevo y decido acercarme a ella un poco más.
-Fueron a buscar la-dice otra-Dos chicos fueron a traerla porque Rosa y Mari no podían con ella.
-¿A dónde fueron?
-Por ahí-apunta hacia el camino que viene de las jardineras traseras de los salones, que es como un atajo.
-Iré a ayudar, no se preocupen y llamen a la ambulancia- todas asienten y me dirijo hacia el camino con rumbo a las jardineras.
Pero cuando estoy a punto de entrar al camino veo que se vienen sobre mí un par de sombras. Me quito del camino y veo salir a los dos chicos cargando a una chica de pelo castaño. Al ver la un nudo se me forma en el estómago. Me quedo pasmado.
-¿Dónde está la ambulancia?-Pregunta uno de los chicos que la trae cargada.
-No tardaran en llegar-contesta otro.
-No va a aguantar más.
Se hace de nuevo el circulo pero ahora alrededor de la recién llegada. Salgo de mi shock y empiezo a empujar como loco a todos abriéndome paso para llegar a ella.
-¡Muévanse carajo!-empiezan abrirse ante mi hasta que quedo frente a ella.
Caigo de rodillas, incluso en ese estado la llego a reconocer.
-Dios...-tomo su rostro entre mis manos-¿Qué te paso?
Una Scarlette inconsciente es lo que tengo.
La sangre me hierve.
-Cuidare de ti...-no intento esconder mis lágrimas, dejo que me recorran las mejillas- Vamos, saldrás de esta y de peores.
Sin más tiempo que perder la cargo y corro con ella. De aquí a que llegue la ambulancia puede ser muy tarde.
Kary E'Z.
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