Me cambiaste /U.N.A/TERMINADA/SEGUNDA TEMPORADA/

Capítulo 12 (Continuacion).- Capítulo extra

Antes de leer este capítulo extra, corran a leer el 12 para que recuerden que está pasando 😉

ALERTA DE LEMON
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Solté un gemido, el hombre se separó de mi, alejando su cuerpo del mío. Me quejé.

-G-Gomen-dije sincera

-Debes comportarte, sigue las reglas-una sonrisa maliciosa se le dibujó en el rostro, pego,su boca a la mía, mordí su labio con fuerza, el río por lo bajo, sabía de sobra que me estaba haciendo sufrir.

-K-k-Kakashi-susurré, puso su mano en mi cintura presionándola un gesto que me hizo sentir sexy por algún motivo.

-Shhhh-exclamó calmado-Deja tus manos ahí-asentí y acate la indicación dejando mis manos sobre mi cabeza, pasó sus dedos por mi silueta, la piel se me erizó, mordí mi labio a sabiendas que ese gesto lo ponía. Me revolví debajo de él, necesitaba que me tocara más profundamente. Su mano recorrió mi abdomen hasta llegar a mi intimidad, presionó mi entrada una vez más, mi labio estaba rojo, mis dientes lo presionaban para tratar de acallar mis gemidos. Me penetro una vez más, y otra y otra, el sudor comenzó a cubrir mi cuerpo y la presión se acumuló en mi abdomen, gemí, aunque traté de reprimirlo me fue imposible-Rompiste las reglas otra vez-se separó de mi, me sentí algo molesta, fruncí el ceño.

-K-Kakashi p-por f-favor-le pedí. Él me miraba curioso-S-si sigo así, h-haré que sangre mi labio-exclamé con la respiración agitada, se relamió los labios y se acercó a los míos. Su olor me embriago de placer.

-No te preocupes por eso, yo haré que sangre por ti-atrapó mi labio inferior entre sus dientes y lo mordió, sin la suficiente fuerza para lastimarme, pude notar su erección por encima de la toalla-Lamentablemente rompiste las reglas-Me miró sonriente, sin pensar claramente pase mi mano por encima del bulto de la toalla, sentí como todo su cuerpo se tensaba-No hagas trampa-jadeo, sus palabras contradecían a su cuerpo, que me pedía que lo tocara aún más, volví a hacer ese movimiento, de su boca salió un gruñido.

-K-Kakashi-gemí cuando tomó uno de mis pechos con su boca. Le desenrolle la toalla con las piernas, esta calló al suelo.

-Tramposa-dijo cuando se separó de mi. Se posicionó sobre mi, entre mis piernas. Me embistió con fuerza sin previo aviso, mis caderas golpeaban con fuerza contra las suyas, el deseo en sus ojos estaba siempre presente.

-S-se m-más g-gentil-dije mientras mordía mi labio con fuerza, si lo hacía así me iba a correr muy rápido. Me embistió aún más fuerte, sus movimientos se hicieron más rápidos, su nombre escapaba de mis labios como un gemido, que él intentaba acallar con su boca. Cerré los ojos al sentir crecer la presión en mi abdomen.

-Abre los ojos-exclamó excitado, así lo hice, nuestras miradas se encontraron. El placer me embargó inundando mis sentidos, haciendo que mi cuerpo se tensará, el jounin salió antes de correrse dentro de mi, mi respiración estaba agitada. Sentí como el colchón se hundió a mi lado y una fina tela cubría mi cuerpo, cuando fui capaz de abrir los ojos, el peliplata estaba acostado a mi lado mirándome.

-Eres una tramposa-dijo al cabo de unos segundos, con su mano acariciaba mi brazo. Ambos sonreímos. Estábamos cubiertos de una brillante capa de sudor, las gotas densidad corrían por el pecho del jounin.

-Tu eres un mal perdedor-lo acuse, su mirada se dulcificó.

-Amaría pasar el resto de mi vida contigo-exclamó, mis ojos se abrieron como platos. Mi corazón latía desbocado y mi respiración continuo agitada.

-P-pero t-tu no estás interesado en el m-Ma-Ma-mat-el rojo subió por mis mejillas, el rió por lo bajo.

-¿Matrimonio?-preguntó con una ceja levantada, asentí-No me gusta por que consideró que es innecesario que TODOS lo sepan, solo deben considerarlo importante las dos personas involucradas directamente-dijo, su mirada me recorrió. Su mandíbula se tensó.

-¿Eso qué quiere decir?-Pregunté dudosa, el jounin sonrió

-Quiere decir que quiero que seas mía por siempre-su tono de voz había pasado a ser dulce-¿Qué dices?-aunque él nunca lo admitiera, me estaba proponiendo (En su extraña manera de hacerlo) que fuera su esposa, mis manos cubrieron mi boca y las lágrimas escaparon de mis ojos. Eran lágrimas de felicidad.

-K-Kakashi-el sonrió, mientras limpiaba algunas de mis lagrimas, su dulce gesto me conmovió aún más.

-¿Quieres ser mía para siempre?-repitió, recogió un mechón de mi cabello rojizo y lo acomodo tras de mi oreja.

-S-si-Dije entre sollozos, él me abrazo con fuerza, mientras dejaba un beso en mi frente, me pego a su pecho desnudo.

-Te amo nena-susurró.

-Te amo Kakashi-