87

45 11 3
                                    

Fuiste contándome la historia de las calles por las que íbamos pasando.

Había tanto, tanto que ver.

Tanto, tanto que decir.

Y para ti sólo había tanto, tanto dolor.

Aguantabas las lagrimas como una campeona en muchas ocasiones.

Incluso cuando te decía que no estabas obligada a contarme nada.

Querías hacerlo.

Querías que lo supiera.

Y quería escucharte, por supuesto.

Pero me dolía.

Me dolía verte sufrir.

Y como siempre, lo único que hacías era restarle importancia al asunto.

Inevitablemente, cerrabas tu coraza frente a mi.

¿Qué seguía asustándote tanto?

The unexpected disaster of Athenea Lander (TaSH #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora