Absorbente #2

19. Los recuerdos de Doug.

-¿Qué tienes en mente?-Preguntó mi tío Clark, cauteloso, me encogí de hombros.

-Necesito que traigan una silla de madera, una manta, papel metálico y a Connor.-Mis tíos asintieron y salieron de la habitación, sentí mi celular vibrar en mi bolsillo así que lo saqué y sonreí al ver el identificador de llamadas.

*-Hola, muñeca.

-Gavin, qué sorpresa.-Él rio al otro lado de la línea, sonreí aún más.

-¿Tienes algo que hacer esta noche?

-Lamentablemente sí, por cierto, ¿de casualidad Connor está contigo?

-Sí, justo en estos momentos le gano en una partida de X-Box, ¿por qué?

-Necesito que venga, es urgente.

-Llegaremos a tu departamento en diez.-Me gritó Connor al otro lado de la línea.

-Gracias, chicos.

-No es nada, muñeca.*

Suspiré con una sonrisa en los labios y miré a mis otros amigos, los cuales me miraban con el ceño fruncido.

-No me miren así, tú serás padre de tres hermosas niñas, tú tienes una molesta novia y tú eres mi mejor amigo no gay, así que no pueden mirarme de esa manera.-Enumeré señalándolos, los tres bufaron molestos.

(...)

-Haremos lo mismo que con mi otro tío, pero con menos intensidad, ¿okey?

-Sí.-Dijo Connor, volvió a quitarse la ropa quedando solo en bóxer y me atrajo hacia si rodeando mi cintura con ambas manos.

-No lo disfrutes mucho.-Dije con burla comenzando a absorber su energía.

-No prometo nada.-Dejó un beso en mi cuello y exploté en imágenes de recuerdos de mi tío Austin.

Comencé a descender hasta que llegué al núcleo de las imágenes, una parte de ella se encontraba obscura, tomé las pequeñas hebras de las imágenes obscurecidas y comencé a tirar ellas con delicadeza hacia arriba.

Una imagen me distrajo, pero no impidió que las hebras ascendieran, me acerqué al recuerdo en el que aparecía mi madre con el vientre apenas crecido y, accidentalmente, lo absorbí.

-Austin, algo está mal con el embarazo.-Dijo ella con preocupación hacia mí, la miré preocupado.

-¿Por qué lo dices?

-Desde hace un mes imágenes de un embarazo doble me invaden, en estas imágenes hay dos bebés, un niño y una niña.

-Eres primeriza, te apuesto a que solo son nervios.

-Pero hay...algo más.

-¿Qué es?

-Tuve una pequeña premonición del parto y...solo nace una bebé de ojos grises, todos ven solo a la bebé pero al mirarla yo veo a un bebé también.

-¿Qué quieres decir?

-Es como si el bebé varón dormitara en el cuerpo de la beba, es como si...ella lo absorbiera.-La miré con los ojos muy abiertos, ella frunció el ceño y sacudió la cabeza.-Debes tener razón, soy primeriza, seguro son los nervios.-Me sonrió, yo le devolví la sonrisa, pero la mía, a diferencia de la suya, era falsa.

Salí dando un alarido de la cabeza de mi tío y me desplomé hacia atrás, todo a mi alrededor era una mancha de colores y todos esos colores eran absorbidos por mí ya que mis poros "habilidosos" se encontraban abiertos.

-¡Zeus!-Escuché el grito de Doug antes de que una mancha más obscura se situara frente a mí.

-Doug, no...-Murmuré demasiado tarde, él me tomó por el brazo y ambos fuimos absorbidos por sus recuerdos.

-¡Yo la amo papá!-Gritó el Douglas del recuerdo, tanto Doug como yo nos miramos confundidos, luego de un segundo recordé.

-Estamos en tus recuerdos.-Mascullé hacia él, él asintió y volvimos a prestar atención.

Nos encontrábamos en la parte trasera de una camioneta donde un Douglas un poco más joven discutía con un hombre mayor idéntico a él, supongo que es su padre.

-¡Tú no puedes amar a esa zorra!-Gritó su padre de vuelta, abrí la boca sorprendida cuando Douglas le dio un puñetazo haciendo que el padre se distraiga y ambos choquen contra un auto pequeño.

La imagen del accidente desapareció cuando Douglas joven quedó inconsciente y fuimos transportados a otro recuerdo unos cuantos días más tarde, cuando él despertó.

-¡Douglas!-Exclamó Mayra con un bebé en brazos levantándose de su asiento al fondo de la habitación.-Despertaste.

-¿Qué ocurrió?-Preguntó y luego miró al bebé con el ceño fruncido.- ¿Y quién es él?

La expresión y color del rostro de Mayra quedó en blanco ante las palabras de su hermano menor, un médico contestó por ella al entrar en la habitación.

-Es un sobrino mío, le pedí a su hermana que lo cuidara mientras iba a revisar unas cosas, dígame señor McGuire, ¿cómo se siente?

-Me duelen las costillas, ¿por qué? ¿Qué ocurrió?

-Tuvo un accidente, no es nada de qué preocuparse.

El recuerdo comenzó a desvanecerse y volvimos a entrar en otro, donde un Douglas de la actualidad conducía una motocicleta.

-No recuerdo nada de esto.-Murmuró Doug en mi dirección, fruncí el ceño y presté más atención al recuerdo.

Observamos en silencio cómo el Douglas del recuerdo aumentaba la velocidad con lágrimas en los ojos, secó con la manga de su chaqueta estos y al bajar el brazo tuvo que frenar repentinamente antes de atropellar a la chica con un libro frente a él, abrí mucho los ojos al reconocerme, mi yo del recuerdo levantó la mirada del libro y miró a Douglas, molesta.

-Ten cuidado, ¿quieres?

-Deberías aprender a andar más cuidado, dulzura.

-No me llames así.-Gruñí y me fui, en cambio el Doug del recuerdo sonrió de lado y me miró alejarme.

-¡Espero volver a...!-No terminó la frase ya que una camioneta lo embistió haciendo que él salga disparado y su cabeza golpee con fuerza sobre el pavimento.

Volvimos a ser arrastrados a otro recuerdo, un  mes después del accidente.

-Necesito que tomes esto con calma, Douglas.-Dijo Adryan con seriedad, Douglas asintió.-Hace dos años tuviste un accidente y perdiste el último año de tu memoria, el doctor Stanford nos advirtió que si volvías a lesionarte la cabeza con gravedad podía volver a ocurrir lo mismo, dime Douglas, ¿qué es lo último que recuerdas?

-A mamá irse con otro hombre de luna de miel.

-Eso fue hace cuatro años, pequeño.-Lo miró con tristeza.-Lamento decirte, hermanito, que has perdido la memoria de los últimos cuatro años de tu vida.

Y en ese mismo instante el Douglas del presente, mi Douglas, comenzó a gritar mientras sangre salía de sus ojos, cerré con fuerza los míos y usé toda mi fuerza en devolvernos al presente.

Salí disparada hacia atrás, llevándome a Douglas conmigo, y mi cabeza se estrelló con fuerza contra la pared, tragué saliva en seco  y cerré los ojos con fuerza, asimilando el dolor punzante en todo mi cuerpo.

-¿Doug?-Pregunté con la boca seca.

-¿Sí?

-¿Has estado bajo el control mental de Raquel?

-¡Sí! Desde hace tres meses y medio, más o menos.-Sentí su mirada en mí.-Hey, ¿estás bien? Tu cabeza sangra.

-Lo sé, pero estoy extremadamente cansada, así que dejaré mi tío Austin se encargue de la herida.-Dije antes de cerrar los ojos y caer inconsciente.