En una casa algo vieja en un barrio poco más que gris un niño aprendía de lo que veía.
-¿Qué es eso?- Señalo a los frascos y jeringas sobre la mesa.
-Es para ti y tu amigo- Aseguro el doctor.
-Pero yo no estoy enfermo- Vio de cerca un frasco con un liquito morado.
-No, pero con esto jamás lo estarás- Tomo a Springtrap del hombro para dirigirlo a una silla.
-Ahora súbete la manga y deja que te inyecte- Ordeno el hombre, el niño obedeció; no le agradaba para nada tener catarro en invierno así que le pareció una gran idea.
Una vez terminada la tarea, sintió que el medicamente le quemaba la piel, pero solo fue momentáneo.
-Ahora ve por tu amigo, debe seguir durmiendo en tu habitación-
-Si- Y salió corriendo.
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-No me agrada- Mangle tomaba a Foxy de la manga para evitar que fuera con él. Ya iban algunos meses en los que los dos amigos se dejaban inyectar con ese doctor; ella siempre lo rechazaba.
-No seas aguafiestas Mangle, gracias a esas cosas ya no tiemblo ni tartamudeo- El niño estaba feliz con aquel cambio.
-Ya te había dicho que ese hombre no es malo…- Springtrap defendió-… se preocupa por nosotros-
-Yo no confió en él, el otro día quiso darme una pastilla, la puse en mi boca pero después la escupí-
-No debiste hacerlo- Dijo su hermano.
-¡Nadie me va a obligar!-
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Nieve caía a montones, el invierno había comenzado, su cumpleaños estaba cerca, pronto ya sería un niño de 11 años; como cada tarde él salía en busca de sus amigos, pero aquel día algo cambio-¿Cómo te llamas?- Springtrap había sorprendido a una niña dentro de la casita en el parque, era muy bonita y le llamaba la atención.
-Ah… yo-
Se sentó junto a ella- Mi nombre es Springtrap-
La niña solo comenzó a reír suavemente- Perdón, pero suena chistoso- Trataba de cubrir su risa con sus manitas-
Aunque no le gustaba que se rieran de él, aquella niña no parecía mala-Te perdono si me dices tu nombre-
-Me llamo ___-
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-Tengo hambre- Dijo frente a su plato vacío.
-Espera un poco, la carne pronto terminara de descongelar- Aquel hombre revolvía el agua hirviendo de la olla, dentro… pedazos de carne cruda se deshacían del hielo. Una vez listo el platillo, puso la comida frente al muchacho.
-¿Esto qué es?- Miro la extraña y forma de la masa roja que goteaba un extraño liquido rojo.
-Es carne cruda… pruébala, te gustara-
El primer bocado le costó mucha fuerza en su mandíbula, pero con cada pieza parecía que la carne se hacía más blanda.
-¿Te ha gustado?- Aquel hombre solo lo miraba apoyado en el mesón de la cocina.
-Es difícil de comer, pero… si-
El hombre sonrió, luego se dirigió a su habitación donde su equipo de medico lo esperaba; minutos después el Doctor veía su reloj para cerciorarse que tenía tiempo, antes de irse dijo: -Mañana invita a tus amigos, seguro les gustara tanto como a ti-
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Lentamente se alejó de la oscuridad de su mente, esos recuerdos aparecían debes en cuando para recordarle lo que había perdido; no iba a negar que le dolía pero ya estaba acostumbrado. Lo que en serio lo atormentaba era salir de una oscuridad para darse cuenta de la oscuridad real de su habitación; abrumador de esquina a esquina, apenas si podía verse a sí mismo.
No tenía idea de la hora que era, había perdido la noción del tiempo hace mucho; su única referencia era Mangle, o lo era hasta que llego esa enfermera… sentía que el horario había cambiado, y eso solo o confundía más.
“Esa enfermera” No la soportaba, la primera vez que la vio no la reconoció pero cuando supo quién era… no quería ni verla; solo era un recuerdo, un lejano recuerdo… le costó entender que ella no recordaba nada. Quizás era mejor, después de todo el estar cerca de él solo traía desgracia; Mangle, Foxy, ____, hasta el mismo sufrían las consecuencias; y todo porque fue demasiado ingenuo.
Springtrap ya había aceptado su destino, la esperanza había muerto el día que Mangle le dijo que saldría de ahí cuando estuviera curado, el mismo sabía que eso no sería posible… se había sentido traicionado, no lo negaba; Mangle mato lo último que quedo de él al condenarlo, y con ello el inocente sentimiento que tenía hacia ella, ese que aún le daba la esperanza de que ella lo sacaría de ahí; pero de eso ya hace mucho.
¿Algún día terminaría su sufrimiento? No… estaba pagando por su propia idiotez. En soledad solía contemplar las mismas posibilidades, ¿Morir? No podía, aun le importaba que sucediera con aquellos que lo acompañaron, además… “él” aun lo necesitaba vivo.
¿Escapar? Ya lo había intentado, pero estar tanto tiempo en la oscuridad había hecho estragos en sus ojos; al no saber si era de día o de noche no podía planear nada.
Aquella noche que volvió a ver a la chica, alguien le abrió las puertas… era una prueba, después de la inyección siempre lo probaba de alguna manera; pero la advertencia fue clara “Sal del hospital y te dispararan” Considero la propuesta, sonaba tentadora… pero justo en el momento clave, justo cuando estaba por rendirse a sus deseos suicidas ella apareció.
¿Cambio algo? No, o eso se decía a si mismo… aunque no era tonto para no saber que la chica ocupo su mente desde que la reconoció. Primero fue ¿No sabe quién soy? ¿No me recuerda?; y después ¿Bajara esta noche? ¿Mangle la acompañara?
Su curiosidad despertó poco a poco, dentro de sí, el conflicto entre “No la quiero cerca” y “¿Por qué sigue viniendo?” le consumía su tiempo como nunca creyó posible, las cuestiones anteriores cruzaban muy levemente. Pero muy en el fondo había una cuestión que no llegaba a pensar del todo, ya que cuando se le venía a la cabeza la borraba de inmediato, su olor. Su olor… era exquisito, dulce y atrayente… por una vez en su vida agradeció poder sentir los aromas con facilidad; ese problema solo alimentaba más su curiosidad.
Ella no llegaba a entender que él no la quería cerca, pero ya era tal la costumbre de verla que cuando sintió el olor de Onnie encima de ella no pudo evitar alterarse, ni él mismo se creía haber reaccionado así, ¿Era suya? Pues… ¿Por qué no? Él la vio primero.
La puerta fue abierta lentamente, era ella… la rutina se repetía, entraba, lo buscaba, se inclinaba y dejaba la caja… en ese momento es cuando ese olor lo atraía ¿Qué si tenía hambre? Su instinto decía que sí, le decía que ella sería el platillo más delicioso que jamás hubiera probado, que no la dejara ir. Pero algo siempre lo detenía.
“Si ella supiera” Pero no sería él quien se lo diría, al final… ¿Qué tanto tiempo se quedaría? Tal vez algún día sobrepasaría esa sensación que lo limitaba y terminaría comiéndosela; ya iba más de un año sin obedecer a su “peculiar” dieta. ¿Porque? Simple, Mangle era quien las atraía. Aunque ahora… ¿Era ___ un bocado más? ¿Qué planeaba Mangle exactamente?
-¿No te aburres?-
¿Qué? ¿Dijo algo? Tardo en procesarlo pero la muchacha se atrevía a hablar con él de nuevo. Y para colmo con una pregunta tan estúpida.
-No es como si tuviera opción- Ser cortante no funcionaba con ella, Springtrap lo sabía, por algo seguía volviendo una y otra vez.
-Sé que es tonto, pero… me imaginaba que tanto tiempo solo te haría daño-
¿Daño? “¿Hacerme daño? ¡Que estupideces dice!”
-No te preocupes por cosas como esa; no tiene caso- Claro que no… él no se sentía lo suficientemente “humano” como para inspirar sentimientos como la preocupación.
-Mmmm…- “¿Por qué siempre me buscas en la oscuridad? Para hablar conmigo no necesitas verme”
-No te creas demasiado solo porque te dije que me pertenecías, solo eres un objeto al que me he acostumbrado-
-Eso lo sé-
El eco de su voz quedo flotando entre ambos; ella quería seguir avanzando, él… esperaba a que cerrara la puerta de una vez.
-¿No te iras?-
-Antes vivías arriba ¿No es así?-
-¡¿Quién diablos te dijo eso?!- Springtrap se paró jalando con él todas las cadenas.
___ sintió ganas de salir corriendo pero quería saber más, y quien mejor que Springtrap para resolver sus dudas.
-No importa, solo… quiero saber si es verdad-
El joven camino alrededor con algo de ansiedad; “¿Cómo lo supo?” Era extraño que alguien se interesara por su pasado ¿Qué era eso en su cabeza? ¿Nostalgia?
-Sí, es verdad- Por un momento el muchacho sintió algo nuevo; algo que no encajaba con la negatividad de sus emociones perpetuas.
-¿Aun lo recuerdas?- Su voz suave acompañaba e incrementaban su ansiedad.
-Poco…- Por fin se detuvo de dar tanta vuelta-… al menos tenía una cama-
___ tenía una media sonrisa de lado, una vez más había comprobado lo que Mangle repetía debes en cuando; “Sigue siendo humano” Se dio la vuelta pero antes de salir:
-Si te comes toda la comida en la caja con la medicina incluida; la siguiente vez te traeré algo de arriba- Con esa promesa Springtrap vio la puerta sellarse por milésima vez frente a él.
“¿Algo de arriba?” Eso era tan nuevo para él que no supo cómo reaccionar; la última vez que le ofrecieron un trato parecido no sabía ni siquiera leer o escribir. El fugaz recuerdo de su madre hizo que retrocediera asustado; creyó haber perdido para siempre esos recuerdos, ahora… como luces parpadeantes que lo atormentaban la dulce voz de aquella mujer taladraba en su mente.
“Si te portas bien, le diré a tu padre que te traiga lo que quieras”
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ANIMAL (____XSpringtrap)
Fiksi PenggemarComo siempre, una chica tratara de cumplir con su trabajo como enfermera... pero... mas allá de lo que se ve usualmente, todo tiene un origen y una causa.