El Visitante

Capítulo 13: La historia de Essi

Essi comenzó a contar su historia así como sus orígenes.

-Nací en Anthea, mi planeta de origen. Nunca fue felíz allí. Mi familia nunca me apoyó en nada... me repudiaban. Ellos sabían que tenía un don, un gran poder que yo no quería utilizar porque me aterraba. Tenía el poder de arrebatar la energía del mundo, era como si pudiera exprimir su poder y usarlo en mi beneficio. Un día, mi padre me pidió que utilizará mi poder... bueno, más bien me obligó. Yo me negué, pero me golpeó una y otra vez... ¡a su propia hija! Hasta que lo hice. Mi padre pensaba que, después de matar al resto de habitantes, solo quedaríamos nosotros, es decir, mi familia y así podríamos ser dueños de todo. Yo le dije que no funcionaría pero él no me escuchó... era ambicioso y tuvo lo que se merecía. Tras la destrucción total de Anthea, me mudé a Marte.

-Entiendo lo que hiciste en Anthea, al fin y al cabo no fue culpa tuya... pero, ¿por qué destruiste Marte? -pregunté confundida. Lo cierto es que pensaba que Essi había sido un peón, ya que la pobre había sido utilizada por su propia familia.

-Lo que yo no sabía era que si destruía un planeta ya no podía parar. Es mi modo de vida, por eso necesito alimentarme de su energía y de su agua. En ese momento sentí la necesidad de hacerlo, ya que de lo contrario moriría, ¿no lo entendéis? La supervivencia es lo único que importa, es lo único que mueve a las personas, su instinto asesino.

-Essi, eso no es así... no todas las personas son malas -dije. Sentía pena por ella, había tenido una mala infancia y eso, sin duda, te marca para siempre.

-Lo sé. Me di cuenta al ir a Marte y conocer a Ziggy. Me enamoré perdidamente de él y entonces vivimos felices. Sin embargo, me ocurrió lo mismo. Yo no soy como él. Él es bueno pero yo necesito sobrevivir. Así que provoqué la sequía y convencí a Ziggy para que se marchará a la tierra en busca de agua, mientras yo proseguía con mi tarea.

-Espera. ¿sabías que no había solución para acabar con la sequía de Marte y aún así me dejaste marchar? -preguntó este confundido.

-Lo hice porque te quería y porque no quería que murieras -afirmó esta entre lágrimas -Pero ya no sé que hacer. No tengo esperanza, no tengo a nadie en el mundo... ¡así que acabaré con todo! 

Entonces, un terrible terremoto sacudió toda la tierra. Yo me sentí desfallecer, caí al suelo y Ziggy corrió hacía mí para socorrerme.

-¡Aura! ¡¿Estás bien?! -me preguntó mientras se agachaba. -Solucionaré esto como sea. Quiero que sepas que te quiero y que lo que hago lo hago por ti, ¿vale? -me dijo mientas me miraba suplicante para después besarme. Cuando rompimos el beso se levantó a duras penas y tropezó, ya que el suelo se movía vertiginosamente.

-¡Ziggy, no! ¡No te vayas, te matará! -grité intentando levantarme para correr hacia él e impedir alguna locura por su parte.

-¡Essi! ¡Espera! ¡Quiero que me escuches! -le gritó este. Essi lo miró y Ziggy susurró un "por favor...". Entonces todo paró, el temblor se detuvo y Zig se acercó a esta -Te quiero a ti Essi y solo a ti. Siento todo lo que ha ocurrido y sé que no merezco tu perdón... pero quiero luchar por ti.

-¡Si tanto me quieres! ¡¿por qué te fuiste con esa?! -dijo Essi furiosa.

-Porque no te tenía... si hubieras estado conmigo nunca lo habría hecho. - Las palabras de Ziggy calaron hondo en ella. Essi comenzó a sentirse mal y tenía en el rostro una mirada triste y culpable. Culpable por haber dicho a su novio que se fuera, cuando aún vivían en Marte.

-Oh Ziggy... siento todo esto, pero... no puedo confiar en ti... 

Entonces Ziggy agarró a Essi empujándola hacía él, la miró a los ojos y la besó apasionadamente. Esta respondió al beso y le abrazó. Mientras, mi mundo se vino abajo. Acababa de hacer lo mismo conmigo y ¿ahora me hacía esto? No sabía si Ziggy lo hacía hecho con el objetivo de parar Essi y salvarnos a todos o... porque realmente la amaba.