Mi primer y único amor

Capítulo 3

5:30 AM

La alarma de mi celular había empezado a sonar, estaba sonando Coldplay. Amaba las canciones de Coldplay y ponerlas como tono de alarma era muy mala idea ya que empezaba a odiarlas. —Empecemos con la rutina —pensé— me senté en la cama apagando la alarma del celular y me apoyé en el respaldo de la cama viendo hacia la pared. Escuchaba como Jhon le gritaba a Jasón para que saliera del baño rápido y así es como se comienza un lunes por la mañana en la casa de los Guzmán.

Me levante, fui hasta el armario y agarre mi uniforme —Solo tres meses más para dejar de usar este uniforme horrible— pensé quejándome. — Agarre mi ropa interior y mi toalla, deje el uniforme en mi cama. Me asomé para ver si los chicos aun peleaban por el baño y mi madre se detuvo en frente de mí.

—Buenos días mamá ¿Crees que pueda utilizar el baño de tu habitación? —le pregunte.

—Buen día cariño, por supuesto — dijo besando mi frente— Jasón ya sal del baño, tu hermano quiere entrar también —gritaba mi mamá.

Yo solo negué riendo y fui hasta la habitación de mis padres. Toqué antes de entrar por si mi papá estaba y la puerta se abrió. Mi papá estaba saliendo del cuarto y me dio un beso en la mejilla.

—Buenos días hermosa ¿Cómo dormiste? — me preguntó mi papá.

—Buen día —sonreí— bueno, creo que acostada — dije, y mi papá empezó a reír.

—Como siempre, amaneciendo de buen humor— dijo mi padre, entre risa — entras antes de que Jhon se te adelante —bromeó.

Y entre en seguida, pude oír cómo se reía y entre al baño, me desvestí y entre a la ducha, me cepille los dientes y termine de bañar. Me tarde alrededor de unos 30 minutos estar lista.

Fui hasta mi cuarto me aplique mi crema y me coloque mi pantalón azul oscuro, mis medias y mis zapatos negros. Busque mi franela de tiras negra, me la coloqué y me peine un poco. Deje mi camisa beis en la cama ya planchada y mi bolso listo, baje hasta la cocina para desayunar.

Mi mamá ya había hecho las arepas y el café para el desayuno y también había preparado el almuerzo el cual llevaríamos cada uno. Agarre mi plato, mi arepa y la rellene con jamón, me serví mi café y me dispuse a desayunar. Mi teléfono vibro en mi bolsillo, revise y era un mensaje de Ellie, diciéndome que venía en camino. Termine de desayunar rápido y deje el plato en el fregadero.

Subí hasta mi habitación, me puse mi camisa beis, la metí dentro de mi pantalón y sujeté mi cinturón. Me eche un poco más de acondicionador en espray, me maquille sencilla y me aplique mi perfumen. Guardé mi maquillaje en mi bolso y recibí una llamada de Ellie.

—Hola nena ¿Ya estás aquí? —pregunté.

—Hola cariñó, si ya llegué, puedes bajar tu trasero ya — dijo Ellie, bromeando.

—Dame un minuto y mi trasero estará fuera de la casa— dije riendo.

—Vale, apúrate o llegaremos tarde y no nos dejaran entrar a clase—comentó Ellie.

—Ok, ok cariñó ya bajo— dije, y colgué la llamada.

Me vi por última vez en el espejo para arreglar mi camisa, me coloque mi collar, mis zarcillos, me coloque mi reloj y mi anillo. Tome mi bolso y salí de mi habitación, cuando llegue a la sala Ellie estaba en la entrada hablando con Jasón y se reían de algo. Mi mamá estaba tomando sus llaves y los miraba con ternura, no pude evitar sentirme un poco celosa. Quería que mi madre me mirará así y me apoyará, pero eso era imposible.

—Hola cariño — dijo Ellie sonriéndome y le sonreí de vuelta.

— ¿Cómo estás? — pregunté abrazándola.