Mi primer y único amor

Capítulo 4

— Nena, porque no faltamos a las dos últimas clases — dije, mientras comía.

— ¿Faltar? Estas loca —dijo Ellie casi gritando.

—Tan poco es para que grites —dije riendo.

— Es el primer día hermosa, no podemos faltar. — dijo Ellie, dejando de comer —Solo imagina la cantidad de tarea que ya nos mandaron, podrían mandarnos más y no sabríamos si faltamos.

— Hay por favor, es como si no fuéramos hecho esto antes — dije mirándola y agarre sus manos— por favor, di que si —le suplique haciendo puchero.

—No es justo, si colocas esa cara — dijo Ellie sonriendo — de acuerdo, vamos a divertirnos.

No sabía a donde iríamos, no creí a que Ellie accediera tan rápido, mayormente siempre me cuesta mucho a que acepte alguna idea que tenga que ver con faltar a clases. No había muchos sitios que visitar cerca del liceo, los lugares cercanos mayormente eran hoteles y restaurantes. Luego recordé la chocolatería que estaba no muy lejos de aquí, La Praliné Chocolatier, Ellie en navidad me decía para ir, pero nunca llegábamos a la hora que estaba abierto.

Pensé en otro lugar para ir luego de que fuéramos a la chocolatería y se me vino a la mente el Cinesa que estaba en la Av. Sta. Eduvigis de Caracas o también estaba el Parque del este. Estaba tan concentrada pensado que no me percate que Ana se había sentado con nosotras y me estaba haciendo señas.

—Jul, Julie — repetía Ana— me escuchaste.

— ¿Ah? —dije aun distraída.

—Por Dios, sí que estabas distraída Jul— dijo riendo— ¿Pensando en algún chico? —preguntó Ana y la mire soltando una risa leve.

—Nada que ver querida —dije mirándola.

—Entonces, en que pensabas tan concentrada, que ni te percataste de mi presencia —dijo Ana, curiosa.

—Eh, pues estaba pensado en algo —dije mirando a Ellie y luego me dispuse a terminar de comer.

— ¿En algo o en alguien? —Pregunto divertida —Ellie tú debes saber, eres su mejor amiga— dijo Ana mirándola.

— No lo sé Ana, quizás pensaba en que iba a comer esta noche — dijo riendo un poco y la mire encarnado una ceja divertida.

—Si fuera posible te comiera a ti —pensé divertida y negué riendo por lo bajo.

—Vaya, vaya, esa sonrisa es de una persona enamorada— dijo Ana emocionada— te digo que yo lo sé.

—Tienes razón, estoy locamente enamorada— dije mirando a Ana y vi la curiosidad crecer en su rostro— pero no sabrás de quien, al menos no ahora— dije riendo sutilmente.

—Qué mala — dijo Ana, haciendo puchero— yo quería saber, apuesto a que Ellie también quiere saber ¿cierto Ellie? —preguntó.

—Si Jul dice que no sabremos ahora, es por algo, no es así cariño—dijo Ellie sonriendo nerviosa.

Ver a Ellie ponerse nerviosa, no tiene precio, su rostro empieza a ponerse ligeramente rojo, sus manos empiezan a temblar un poco, para luego pasar a morder su labio inferior —Dios, amo tanto a esta chica —pensé— y la forma en que pasa las manos por su cabello nerviosa era sin duda maravilloso. Pude ver a Ana observarme y sus ojos se ampliaron como si, se fuera percatado de lo que estaba ocultando.

Se llevó la mano rápidamente a la boca y empezó a gritar por lo bajo, causando que algunos se voltearan a mirar hacia nosotras. Oculte mi rostro con mis manos y empecé a reír nerviosa —Que no vaya a empezar a gritar, por favor —pensé nerviosa— Ana aún seguía gritando, o más bien chillando y se veía que era de la emoción. Vi de reojo a Ellie y sus mejillas estaban levemente rojas, fulmine con la mirada a Ana y dejo de gritar.

—Ana — dije entre dientes, mientras la fulminaba con la mirada.

—Vale, vale, lo siento Jul —dijo calmándose— es que, Dios tu mirada me lo dijo todo y no lo pude evitar linda— dijo Ana emocionada.

—Solo te pedimos que no digas nada Anie — dijo Ellie mirándola.

—Ok, no diré nada chicas, saben que pueden confiar en mi palabra— dijo Ana sonriendo — no saben lo feliz que me hace verlas juntas—murmuro para nosotras.

Nos habíamos decidido ir al parque del este, a caminar el resto de la tarde, Ana dijo que nos cubriría y nos avisaría si llegaran a mandar alguna tarea en las clases restantes. Fuimos hasta la estación del metro y nos bajamos en Miranda, para entrar luego al parque del este.

Íbamos conversando sobre cosas triviales mientras caminábamos por todo el parque, habíamos recorrido casi la mayor parte cuando decidimos entrar al planetario y ver las constelaciones y el sistema solar. A Ellie le gustaba mucho observar las estrellas al igual que a mí, se nos había ido el tiempo en el planetario cuando vi la hora ya casi eran las cinco de la tarde.

—Ha sido una buena idea faltar a clase cariño —dijo Ellie tomando mi mano.

—Sabía que no te arrepentirías — la mire sonriendo— nena ya es hora de ir nos, o si no se darán cuenta que nos estamos tardando demasiado—comente.

— La hora pasó demasiado rápido — dijo Ellie mirándome— pero disfrute demasiado cariño, hay que volver hacerlo.

— Hay Dios, que he hecho, ahora querrás faltar a clases — dije y Ellie empezó a reír.

—No es para tanto Jul — dijo Ellie entre risas— es mejor que nos vayamos, antes de que se nos haga tarde.

Íbamos caminando hasta la entrada, he iba haciéndole bromas a Ellie su rostro estaba muy sonrojado y no pude evitar robarle un beso por lo tierna que se veía. Se me quedo mirando un poco sorprendida por el gesto, ella pensaba que no la besaría en público, pero no me importaba si nos ven yo quiero hacerla feliz sin importar lo que piensen los demás.

Sonreí y ladea un poco mi cabeza, le di un beso en la nariz y ella se volvió a sonrojar.

—Te quiero mi pequeña tomatita —dije riendo sutilmente.

— ¿Tomatita? —pregunto Ellie divertida.

—Sí, tomatita — dije mirándola y tome sus mejillas — es que te pones roja, como un tomatico y es tierno verte así sonrojada.

—Julie, ya para — exclamo Ellie ocultando su rostro.

—Como digas, tomatita —dije dándole un beso en la mejilla.

Holaa ternuritaas :3

Espero que les guste este capítulo,  cada día ne emociono más para culminar este libro este año y si ustedes me apoyan más.
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