Capítulo veintidós.

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Feliz cumpleaños Ethan.

Después de recibir a Mery Ann y Phill, Matthew y yo comenzamos a jugar en la sala.
Después de todo la fiesta no podía comenzar sin mi nuevo mejor amigo.

-¿Cómo dices que se llama tu bff?- dijo Mery Ann enfatizando "bff".

-Damien.- dije.

-Damien qué.- dijo Phill entrando en la conversación.

Pensé por un momento, no recordaba si me había dicho su apellido.

-¿Es tu mejor amigo pero no sabes su nombre completo?- inquirió Mery Ann.

Me encogí de hombros.
-Bueno, las cosas pasaron muy rápido.- me excusé.

Matthew me miraba por el rabillo del ojo, podía sentir su mirada atravesar mi piel.

Decidí que mirarlo fijamente sería buena idea, pero al voltear la cara me encontré con un Matthew sin expresión.
Quizás no le gustaba Damien después de todo.

El timbre de la puerta me dejó helado, no quería que Matthew tuviera una mala impresión de mi amigo, al final Damien fue la única persona que me habló en la escuela y me había dado su confianza y aceptación.
Pero lo que más me preocupaba era ver a Matthew mostrando ese comportamiento tan hostil.

-Hablando del diablo.- dijo Mery Ann.

-Yo voy.- me levanté del sofá y me dirigí a la puerta principal.
Me encontré con un Damien cubierto de agua y con una bolsa de regalo en la mano.

-Hombre no creí que fuera a llover hoy, estaba seguro que por ser tú cumpleaños el sol nos daría un día perfecto como regalo.- dijo Damien de corrido.

Miré el cielo y divisé las nubes oscuras que adornaban el paisaje. No me hubiera dado cuenta de la lluvia de no ser por Damien quién llegaba tarde a mi casa.

-Bueno, pasa por favor, te traeré una toalla y algo de ropa.

-Gracias.- dijo él sonriendo ampliamente.

Damien se quedó en la entrada mientras yo iba a por la toalla y ropa.
Mi madre fue a recibirlo también pues hasta mi cuarto escuché como le decía que pasara hasta la sala.

-Gracias señora, pero no quiero mojar su casa así que esperaré a Ethan aquí.

-No hay problema hijo, ah, y llámame Rose.

¿Desde cuándo mi madre era tan amable con mis invitados?
Ah, sí, Damien es mi primer amigo después de mucho. Eso explica la excesiva amabilidad de mi madre y su buen humor.

Tomé unos jeans y una camiseta para Damien y una toalla limpia.
Bajé a toda velocidad, quería romper la atmósfera pesada lo antes posible.

-Aquí tienes Damien.- le extendí las cosas para que pudiera tomarlas.

-Gracias hombre, ¿dónde me cambio?

-Ah sí, por aquí.- lo llevé al pequeño baño que estaba debajo de la escalera.

Mientras esperaba a que Damien saliera del baño me senté en los escalones.
Comencé a recordar cómo se había comportado Matthew en Navidad cuando conoció a Phill. Tenía una expresión muy similar a la de ahora.

BOYS (PENDIENTE EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora