Amor entre edades

Capítulo 17

-Me referia a que por eso me dijeron que no me acercara.- habló apresurado.

-Te juro que entendí otra cosa. -le sonreí desconcertada.

-¿Qué puede ser tan importante para dejar solo a este sexi hombre?

Venus se metió la mano a la voca haciendo un gesto de asco.

-¿Tú sexi? Dejame decirte hermanito que tú persepción de sexi es completamente distinta a la mía.

-Es cosa de ver a tú pololo para saber.

-Te pasaste, con eso no se juego, andate de mí local.

Venus se enojo comenzó a empujar a su hermano fuera del local y le cerro la puerta en la cara.

-¡No vuelvas nunca más!

Me quede muda y la miré.

-Tranqui, no estoy enojada, me encanta peliar con él.

-Toma. -me pasó una bolsa y abrió la puerta, y salí.

- Chao. -me despedí mientras cerraba la puerta a mis espaldas.

-okey, tú hermana está loca. -mire su cara.

-Es la segunda vez que me lo dices. -me miró sonriente.

- ¿De verdad? -lo miré con espanto.

-Sí. -dijo caminando hacia la salida.

Camime inconsientemente a sus espaldas.

-Cristina, te presento a mi hermanita.

Tenía al frente a una joven de veintitantos años muy hermosa, de cabellera castaño claro ojos azules y alta, me pasaba por mas de una cabeza, vestia unos jens ajustados y una polera sin hombros pegada al cuerpo en la parte de abajo y sandalias bajas, mostraba mucha seguridad.

- Hola. -salude.

Me miró de piez a cabeza sería y dejo su mirada en mis ojos.

- ¿Por ella estas dispuesto a perder todo?

-Perdería mucho más que todo. -habló seguro.

Lo tomó del brazo y lo saco de la sala cerrando con un portazo, quedamos las dos solas en la casa, comense a preocuparme y no sabía que decir, luego me miró sería y sonrió  .

-Me llamo Venus, soy la hermana mayor de tú estúpido pololo. -me abrazó euforicamente, se lo devolvi sin pensar.

-Me llamo Cristina.

- Lo sé mi hermanito no para de hablar de ti, me tiene loca, si te hubiera visto antes por la calle sabría que eres la polola de mi hermana, eres tal y como te describió.

-¿Habla de mí?

-No sabes cuanto...

-¿Cristi me estas escuchando?

- ¿A que te refieres con que darias mucho más que todo por mí?

- ¿Como?

- Se lo dijiste a tú hermana cuando nos conocimos.

Se paro brusco y me miró con cara de asombró.

-¿Te acuerdas de eso?

-Me acorde mientras venía caminando. -levanté los hombros.

-¿Quieres ir a la playa?

-¿Por qué el cambio brusco?

-¿Quieres ir o no?

-¿Este fin de semana?

-Sí.

-No lo sé, eres mi profesor, se supone que no debemos tener algún tipo de relación.

- Solo vayamos como viejos conocidos, podemos ir  con mi hermana.

-Esta bien.

Nos subimos a su auto y me llevo a mí casa entre risas y anécdotas, estaciono frente a mi casa y me baje despidiendome con un beso en la mejilla.

-El viernes después del colegio nos vamos. -me gritó.

-Esta bien, nos vemos mañana Cedric.

-Nos vemos Cristina.

En la noche tomé once con mi familia y me fui a mi pieza, saqué mi pijama me lo puse y sonó mi celular.

- Buenas noches.
                          Cedric

-Buenas noches profesor.
                            Cristina.

-Nos vemos mañana, sueña conmigo.

No le respondí y me acoste a dormir.

-Hola Et. -salude por el celular.

-Hola kim. - me apoye en la muralla.

-¿Vamos a juntarnos donde siempre?

-Sí, necesitó hablar algo contigo. -sonaba preocupado.

-¿Es algo malo?

La alarma comenzó a sonar y desperté asustada callendome de la cama y pegando un gritó.

-¿Cristina... Estas bien? -gritó mi madre preocupada.

-Sí, solo me caí de la cama.

Se abrió la puerta de mi pieza y apareció mi madre toda despeinada.

-¿Otra vez te caíste?, se te está haciendo costumbre.

-Tengo sueños extraños y despierto asustada, todo se ve tan real.

- ¿Qué tipo de cosas?

-Estaba hablando con un tal Et, es la segunda vez.

Mi madre se tensó y me miró angustiada.

- ¿Quién es?

-Solo fue un sueño, sabes que el doctor Fernandez dijo que ignoraras esos sueños.

-Mamá te acabas de tensar, no fue solo un sueño, estas asustada, dime quién es Et...

¡Capítulo dedicado a una lectora de Dinamarca que tengo...!