04.- Sueños y pesadillas.

38 6 0
                                    

04.- Sueños y pesadillas.

- Calisay-

Nos encontrábamos sentados uno frente al otro, Whis se habia marchado por una razón que desconocía, dejándome a solas con Beerus, ambos estábamos en silencio, con una copa de helado para cada uno, sentía la mirada de Beerus sobre mi pero cuando yo lo miraba él la desviaba...por lo que intenté hablar...pero él habló primero, soltando un breve suspiro.-...realmente viniste porque estabas preocupada, ¿cierto?...- suspire para asentir...-está situación me desagrada totalmente, cómo si...no fuese la primera vez que la viviera.- lo último lo dije en voz muy baja...esperando que Beerus no me hubiese oído, ya que temía que pensara qué en éstos últimos años me había vuelto paranoica, comencé nuevamente a comer de mi copa de helado mientras miraba de reojo a Beerus, él también habia comido poco de su helado, mientras recargaba su mejilla en su mano izquierda y giraba la cucharilla con sus dedos pensativo, para después mirarme y en un tono de voz tranquilo decir...- no eres la única que siente eso Chibi-say...- al escuchar sus palabras lo miré fijamente, a lo que el continuo.- yo también lo eh sentido, que no es la primera vez que esto pasa y al igual que a ti me desagrada toda esta situación.- me levanté de golpe derramando el helado sobre mi, pero por extraño que parezca aquella mezcla que debería ser fría se sentía caliente y con aroma metálico por lo que la observe mejor descubriendo que era sangre, mis manos estaban cubiertas de está miré mi alrededor el cuál era completamente diferente era un lugar devastado, y había cuerpos esparcidos en el suelo, caminé unos cuantos pasos cuando me detuve quedándome completamente inmóvil por lo que vi, los cadáveres de mis hijos yacían en el suelo pero lo que mas llamo mi atención era la figura la cual traia una capucha que se movia con el soplar del frio viento, éste que se encontraba delante de ellos, las gotas de sangre caían de sus manos, ése ser era su asesino, pero no podía apreciarlo, los sentimientos que me produjo aquel suceso me hicieron despertar agitada...por lo que me sente en la cama, la primera parte fue lo que sucedió hace poco pero de nuevo esa pesadilla se hacía presente, me lleve la mano al rostro notando las lágrimas que brotaban sin parar de mis ojos, ya que esta vez la pesadilla se sintió mas real, me levanté de la cama y salí a la terraza en busca de un poco de aire fresco, recordando donde me encontraba, miré el cielo aun faltaban pocas horas para el amanecer en la tierra, suspire mientras me removia el cabello el cuál traía suelto, las imágenes de aquella pesadilla pasaron por mi mente, y aunque no sabía quién era el asesino, ya que nunca lo eh apreciado con claridad sentía muchísimo dolor por lo qué me abracé a mi misma tratando de reconfortarme, cuándo un par de brazos me rodean en un cálido abrazó y la voz de Beerus susurró en mi oído.- ¿Tuviste de nuevo ésa pesadilla?.- me giré a verlo y lo abracé fuertemente comenzando a llorar...

- Beerus-

Me encontraba en la terraza sentado recargado en la pared observando el cielo de la tierra ya que estaba cerca de amanecer, mientras pensaba en la conversación con Calisay de hace unas horas atrás...

Me encontraba pensativo después de escuchar sus palabras, sobre todo el hecho de qué también sintiera lo mismo que yo con respecto a que no era la primera vez que esta situación pasara, por lo que decidí responderle de forma honesta.-
no eres la única que siente eso Chibi-say...- al escuchar mis palabras me miro fijamente, a lo que continúe.- yo también lo eh sentido, que no es la primera vez que esto pasa y al igual que a ti me desagrada toda esta situación...- ella se levantó de golpe derramando un poco del helado sobre si misma, su mirada era inquisitiva por lo que también me levanté...quedando justo frente a ella para hablar en un susurró.- no quería que te preocuparas nuevamente por mí y mas que ambos hemos tenido la misma pesadilla...- antes de que alguno de los dos dijera algo, las puertas del jardín se abrieron y por ellas aparecieron nuestros hijos...

Las puertas de la terraza se abrieron y Calisay salió de la habitación en silencio acercándose al barandal, no notó que me encontraba ahí, y por lo que observé ella estaba llorando al parecer había tenido aquella pesadilla nuevamente pero en está ocasión al parecer la había afectado más que nunca por lo que me acerqué con cuidado a ella la cual se abrazo asi misma intentando calmarse por lo que la abracé para luego preguntarle si habia tenido aquella pesadilla a lo que simplemente ella se giró a verme para inmediatamente abrazarme fuertemente mientras lloraba, lo cuál me extraño bastante ya que ella nunca se había puesto tan alterada por una pesadilla pero también me dolía por lo que la rodeé con suavidad mientras le acariciaba su cabello, tratando de que se tranquilizara, cuando ella dijo en un susurró que apenas alcancé a escuchar...- ...¡se sentía tan real, Beerus!...- ella levantó su rostro por lo que suavemente deslice mis dedos para secar sus lágrimas, para después acercarla de nuevo a mí en un tierno abrazo, para hablarle al oído suavemente.- te juró que no permitiré que éso ocurra cariño, así que por favor tranquilizate, me lástima realmente verte así...- estuvimos así un largo rato a lo que ella poco a poco se fue tranquilizando hasta quedarse dormida por lo que la levanté cargandola entré mis brazos para después recostarla en la cama, y cubrirla con las sabanas para después acariciar suavemente su rostro, me recoste junto a ella a la vez que retiré unos mechones de su rostro, yo también había tenido la misma pesadilla que ella pero en está había una variante, y era que yo si sabía quién era el asesino, me cubrí con el antebrazo cerrando los ojos para soltar una risa irónica mientras hablé en un tono sumamente bajo.-...lo siento Chibisay...pero si te dijera la verdad...cometerias una locura con tal de evitarlo...pero...yo evitare a toda costa que eso ocurra.- retiré mi brazo para observarla dormir un momento antes de quedarme dormido a su lado...

Continuará...

El Futuro que creamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora