Cap 5: El alma

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El día ha dejado paso a la noche. Sans y Frisk, cerca de la orilla del río, están junto a una pequeña hoguera. Las chispitas y los pequeños trozos de madera al rojo vivo ascienden al cielo.

-Frisk, como es que una chica humana como tú está viajando sola por el reino de los monstruos?

La chica se ríe por la pregunta que Sans le acaba de hacer.

-Que te hace tanta gracia? -pregunta Sans también riéndose.

-Es una larga historia...

-La noche también es muy larga... -dice mientras se acomoda en su "saco de dormir" hecho de pieles.

Tras un leve suspiro, Frisk empieza a hablar.

-Soy huérfana... Mis padres murieron cuando era un bebé. Unas monjas me criaron en un monasterio... Pasaron los años, 17 largos años... Hasta que estalló la guerra...

Sans, que empezó a escuchar la historia con una sonrisa, ahora tiene la cara más seria.

-No podía soportar ver a monstruos y humanos pelear. Es por eso que me fui del monasterio, para intentar convencer a ambos de que podemos vivir en paz... Pero ya viste que empecé con mal pié...

Los dos se quedan en silencio.

-Y... Como es que tú también estás viajando? -pregunta Frisk, intentado romper ese silencio incómodo.

Muy lejos de aquí, cerca de la capital

Las cosas no han ido muy bien para el reino de los monstruos. Sin ejército, Asgore se ha visto obligado a usar a sus mejores soldados, la Guardia Real.

Los humanos están demasiado cerca de la ciudad. Si la toman, los monstruos estarán perdidos.

Asgore se fue a dirigir su pequeño ejército, mientras que la capital está siendo gobernada provisionalmente por su hijo, Asriel, de 18 años.

Mientras tanto, en el campo de batalla, la lucha ya ha empezado.

Mientras tanto, en el campo de batalla, la lucha ya ha empezado

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La Guardia Real pelea con fiereza. Parece que están aguantando a los humanos. Un poco más atrás, Asgore está dando las órdenes a sus hombres.

Pero, de pronto, alguien se abre paso a través de los soldados del rey. Intentan coger a ese humano que se aproxima hacia Asgore, pero no son capaces.

Asgore se prepara para pelear. Agarra bien su tridente rojo y espera a que ese humano llegue.

Sin detenerse, el humano esquiva el arma de Asgore, con un movimiento rápido hacia un lado. Sin darle tiempo a reaccionar, el atacante le da una fuerte patada en el pecho, tumbándolo en el suelo.

Cuando el rey abre los ojos, ve al humano encapuchado encima de él, con las tres puntas de su tridente rozándole la garganta.

-Así que este es el poder del rey de los monstruos...? Que decepción... -dice mientras se quita la capucha.

El humano es una chica joven de ojos color carmesí

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El humano es una chica joven de ojos color carmesí.

-M- Me has vencido... Puedes matarme... -susurra Asgore.

-Si te quisiera ver muerto, ya lo hubieses estado hace mucho tiempo-dice entre risas la chica-. Solo estoy aquí para proponerte un trato...

-Un t- trato? -pregunta sorprendido.

La humana, con una mano y sin separar el tridente del cuello de Asgore, saca de su bolsillo una especie de colgante de oro. Aprieta un pequeño botón y el colgante se abre en dos mitades, dejando salir algo brillante.

-Es eso una...!? -tartamudea Asgore.

-Un alma humana? Si. El monstruo que la absorba tendrá el suficiente poder para destruir a un ejército entero...

Sobre la mano de la humana flota un alma de color azul celeste.

-Q- Qué es lo que quieres de mi? -dice Asgore mientras mira la brillante alma.

-Por ahora... Retira a tus soldados... Parece que no están pasando un muy buen rato...

La confusión reina en mitad de la lucha. Los monstruos ven a su rey en peligro de muerte e intentan ir a socorrerlo, pero los humanos les atacan.

-Ya hablaremos en ... Más te vale que vayas solo...

La chica deja el tridente en el suelo y se va.

-Espera! No me dirás tu nombre?! -grita Asgore para que la humana le escuche.

-Me conocen por muchos nombres... Pero puedes llamarme... Chara.

CONTINUARÁ...

Un ángel en tiempos de guerra (Frisk x Sans) (Frans)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora