XVII

6.9K 495 121
                                    

No olviden dejar su voto y comentario que me alegran el día literal.
Disfruten!














 Disfruten!

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


























¡Sentimientos! A la cancha

Scott

¿Recuerdan ese momento, dónde las cosas parecen llegar al momento culminante en el que se decidía el final de algo, y que ese final podría ser bueno o malo pero no tenías miedo, sino que eras invadido de pies a cabeza por la ansiedad, pensando, dios, que pase lo que tenga que pasar pero que termine ya? Bien, Scott se sintió así aquella noche, donde creyó que el problema del kanima iba a terminarse de una buena vez por todas, sin embargo, no contó con que los Argent moverían rápidamente sus piezas y él sólo tuvo que actuar para intentar salvar a todos.

Sus acciones, lo llevaron a este momento, aquel donde su cabeza dolía al igual que toda su espalda debido a la tensión permanente. Allison no contestaba sus llamadas y luego de enterarse que había luchado contra Phoenix lo supó, la cazadora se enteró lo de su madre y ya eligió un bando, por su parte, tampoco sabía mucho de la platinada, tuvieron una sola llamada la noche posterior a lo ocurrido en la comisaría, los Ainswort se negaban a responder en esta absurda disputa, según ellos, así que simplemente estaban en su hogar, Scott sintió que había algo más pero no quiso indagar mucho. Por su parte Stiles insistia en ir a verlo reclamando de manera muy alterada que los Ainswort tampoco le permitían pasar a ver a su mejor amiga debido a un resfrío que parece que agarró, así que por lo menos deseaba ver a su mejor amigo pero Scott se  negaba firmemente.

Su casa se volvió un lugar de absoluto silencio, Scott tenía una rutina nueva luego de que el primer día descubrió que su madre huía de él no sólo temor, sino por el gran shock que aún tenía, negándose incluso a escucharlo, por lo que Scott se quedaba todo el día en su habitación hasta que tenía que ir al trabajo, ni siquiera se preocupaba de la escuela estos días, sabiendo que no habría manera de que remontara sus notas, otra razón más para su desánimo y un peso más de problemas.

Esa mañana, días después, todo empeoró. Había terminado de bañarse, pasó su mano por el vidrio empañado y junto a un suspiro, acomodó su cabello. Lo último que deseó oír, fue el ya conocido siseo de una serpiente en su habitación, salió dando un portazo y la escena que vió lo aterró por completo, ahí, en el medio de su habitación, el kanima sujetaba contra la pared a Melissa quien intentaba soltarse del agarre en su cuello que le estaba impidiendo respirar.

—Como puedes ver, Scott, —su rostro se devolvió a la persona que habló, Gerard Argent estaba sentado cómodamente en el pequeño sillón de la habitación. —hubo cambios interesantes últimamente y creo que hay que ponernos al día.

𝘽𝘼𝙏𝙄𝘾𝙊𝙍 || TEEN WOLF²Donde viven las historias. Descúbrelo ahora