¿Cómo dices? [En Edición]

VIII

Draco Malfoy era muchas cosas, según su opinión; atractivo, sangre pura, Slytherin, sexy, rico, guapo, listo y extraordinariamente hermoso. Y tenía bien claro que no era como los idiotizados Gryffindors que eran maleducados y se quedaban con la boca abierta con las mínimas tonterías algo que haría a un Malfoy quedarse así sería justamente lo que estaba viendo en su casa cuando entró el día que volvía de Hogwarts.

Estaba su antiguo profesor de DCAO, Remus Lupin, recostado sobre su primo traidor a la sangre al lado del Lord Oscuro que abrazaba y besaba en la mejilla a Harry Potter mientras los chicos que cayeron en el GC diciendo ser los hijos de Potter miraban con una sonrisa y su propia madre parecía que iba a sangrar por la nariz de la ternura que le daban las parejas.

- ¡¿Qué Mierda?! -exclamo.

- ¡Draco! -espeto su padre- ¡Cuida esa lengua!

- ¡¿ME VOLVÍ LOCO O TÚ TAMBIÉN LO VES?! -gritó.

- Cállate, Draco -dijo Narcissa desviando su mirada hacia su hijo-. Interrumpes mi momento Fujoshi.

- ¿Tu qué?

- Una cosa del futuro que le gusta a Samantha y me lo ha pegado -contesto como si nada-. Cállate que no tendré Yaoi hasta dentro de tres días.

- ¿Me explicas? -murmuro hacia su padre.

- Vamos a mi estudio -susurro este-. No quieres ver a Narcissa y Samantha en modo Fujoshi enfadada sin Yaoi.

Los dos rubios salieron del salón dejando a los otros. Samantha miró a su "familia" con una sonrisa.

- Apuesto 25 galeones que se pone en plan diva.

- Se desmayará -repuso Sirius.

- El único tan dramático es papá -negaron los Riddle haciendo que Harry se sonrojara.

- Yo apuesto que grita -intervino Harry bajando la cabeza para que no noten su sonrojo.

- Yo digo que se queda en modo negación -terminó James.

Esperaron unos momentos hasta que oyeron un grito proveniente del sitio donde estaban los Malfoys <<¡¿EL LORD SE VOLVIÓ LOCO?!>>. Harry se levantó y comenzó a bailar diciendo:

- Me debéis 25 galeones cada uno. Son 75 para lo que me de la gana y nadie me podrá controlar. ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡YUJUUUUU!!!!!!!!!!!

- Papá es divergente -cantaron sus hijos bailando a su alrededor haciendo el idiota al igual que Harry-. Papá es divergente, Papá es divergente, diver-divergente, gente, gente...

- ¿Sabes que dementores hacen? -rio Remus.

Tom suspiro, camino hacia Harry y sus hijos, estos al verlo se sentaron y Harry paro de bailar. Tom abrazo a Harry con una sonrisa muy tierna.

- Me encanta el Harry Potter infantil -dijo-. Rara vez muestras esa faceta, casi parece que no la tengas.

- ¿No te gusta el serio y estratega? -pregunto retóricamente- Ya sabes, el que te dice que eres más impulsivo que un Gryffindor.

- No -hizo, aunque lo negara, un puchero-, ese Harry no es achuchable, cuando quieres abrazarle te mira con los ojos brillando como el Avada.

Harry se sonrojo y miro hacia otro lado murmurando cosas de lo idiotas que son los Señores Oscuros tremendamente guapos y sexys.

- ¡Aw, son muy tiernos! -exclamaron las únicas mujeres de la habitación.

- ¡Aw, me dais diabetes! -James imito la voz que pusieron estas.

- ¿Has intentado volverlo un Fundashi? -susurro Narcissa muy bajito para que sólo Samantha la escuchara.

- Fracase -respondio esta por su parte-. Solo conseguí que le tenga miedo al anime, la televisión, los calcetines largos y la mantequilla.

- ¿Calcetines largos? ¿Mantequilla?

- No preguntes.

- Es que Sammy se cree Sam Pucket -dijo James.

- Pero aún así todos me aman -pose diva y Flip hair.

Lucius salió para que llamaran a Severus, resulta que Draco en su momento de gritos acabo dándose contra las paredes y Lucius no conseguía despertarlo.

Al poco rato Snape entro, con simples movimientos de varita el hurón despertó y Snape se fue, no sin antes decirles:

- Aprended algo de Medimagia o incluso Primeros Auxilios Muggles pero no me llameis más.

- No es que no sepamos -le respondió Harry-. Es que nos da la gana molestarte llamándote todo el rato.

Los demás asientieron haciendo que el profesor les fulminara con al mirada y se fuera con su susurrante capa indignado a otra parte.

- Algún día nos matará -dijo Remus que estaba aprisionado en un abrazo sobreprotector por parte de su pareja-. Y tú, celoso de tres al cuarto, déjame en paz.

Salió en dirección a la cocina para robar chocolate, mermelada de frambuesa, Pringles de queso y huevos duros. Sirius murmuro algo sobre licantropos bipolares embarazados con antojos raros y le siguió para evitar que se intoxique.

- Cuando yo esté embarazado, dejadme comer lo que me dé la gana o sufrir es bastante -penso sin darse cuenta en voz alta,, Harry.

Al menos piensa en ello, vamos bien...pensoTom.

¿Conocéis a algún Fundashi?