- Yo lo invité. - dijo Farkle apareciendo atrás de mi.
¿Es en serio Farkle? Solo lo quiero lejos de mi. ¿Es mucho pedir? - pensé.
- No importa si lo invitaste o no lo hiciste, debió tener más cuidado ¿No crees? - le respondí.
- Sólo fue un accidente, no deberías ponerte así Maya. - me dijo Farkle.
- ¿Te imaginas si mamá hubiera estado aquí? ¡Le pudo haber pasar algo Farkle! - grité.
- ¡Pero ella nunca está en casa! - me gritó Farkle.Eso dolió... - pensé.
- ¿Maya? - escuché decir a Farkle con un tono de culpa.
- No digas nada más Farkle. - dije empezando a caminar hacia mi habitación pasando al costado de Lucas, que se había mantenido callado durante toda la pelea.
- Maya... - dijo Lucas tomando mi brazo. - Tienes razón, debí tener mas cuidado. Lo lamento, no quería provocar esto.
- Disculpas aceptadas. ¿Podrías soltarme ahora? - le pedí.
- Ohhh si, lo siento. - me soltó.No dije más y me dirigí a mi habitación, necesitaba dormir después ese largo día.
* * *
No sabia cómo ni porque estaba en ese lugar, pero, me encontraba caminando por un parque, estaba por anochecer y se podía sentir una brisa helada, a lo lejos divisé un árbol muy grande con una persona sentada bajo él. Sentía que debía ir, y, en un acto inconsciente ya estaba cerca de allí cuando pude escuchar a esa persona hablar con la voz quebrada...
¿Por qué no fue por mí?
¿Por qué los chicos que quiero nunca me quieren?
Soy inapropiada, siempre digo algo malo y Riley siempre dice lo correcto.
Ella ni siquiera lo intenta, y él la escoge.¿Esa era mi voz? Me acerqué más y definitivamente pude asegurar que era yo la que estaba sentada bajo ese árbol. Me sentí palidecer.
Ella es siempre la que todo el mundo elige.
Para todo.
Y lo intento con tanta fuerza y yo nunca seré como ella.Quise decir algo pero escuche unos pasos acercarse y volví a esconderme.
Eres mejor que eso, mucho más. Quiero que seas feliz Maya, es lo único que siempre querré. - escuché decir a una voz masculina.
Sali detrás del árbol para ver de quien se trataba, pero él se iba. Grité y grité pero cada vez se alejaba más. Era como si no pudiera escucharme.
¡No me dejes! ¡Te necesito!
* * *
- ¡Vuelve! - me levanté gritando en medio de mi habitación. Toqué mi rostro y sentí mi cara húmeda, había llorado.
- Sólo fue un sueño. - dije para mi.
Pero... ¿Quién era él? - pensé.
Tomé mi celular que se encontraba en la mesita de noche, marcaba las 4:15 de la madrugada, no quería volver a dormir así que salí de mi habitación para tomar un vaso con agua.
- ¿Maya? - escuché que me llamó Farkle. - ¿Que haces despierta?
- ¿Tu que crees, genio? - le pregunté. - No puedo dormir y por lo visto tu tampoco.
- Si, respecto a eso. Lo siento Maya, por lo de esta tarde. No quise... - quiso seguir hablando pero lo corté.
- Tranquilo Farkle, esta todo bien. - dije mientras me servía el vaso con agua. - De todas formas, solo dijiste la verdad.
- Lo sé, pero no debí gritarte así. - dijo arrepentido.- Tu sólo pensabas en mamá y yo desquité el mal día que tuve contigo.
- Eso es algo bueno. - dije.
- ¿Por qué sería bueno? - me miró incrédulo.
- Porque me tienes la confianza suficiente como para hacerlo, - dije y Farkle me miró como si no entendiera. - en pocas palabras confías en mi.
- Eres muy inteligente Maya, deberías dejar que los demás lo vean. - me dijo Farkle. - ¿Estamos bien?
- Respondiendo a tu pregunta... si, lo estamos, como si nunca hubiera pasado nada. - le dije con una sonrisa. - Y respecto a lo otro, sigue soñando hermanito. Nadie conocerá esa parte de mi, excepto tú.
- Ya extrañaba que me dijeras hermanito. - admitió. - Y espero que algún día le muestres a todos tu verdadera personalidad.
- Sabía que amabas que te dijera así. - le dije burlona.
- Nadie debe saberlo, tengo una reputación que mantener. - me dijo decidido.
- Ohhh, quieres jugar hermanito. - lo reté.
- No, no quiero. Por favor Maya, sabes como son los chicos. - suplicó.
- Está bien, pero con una condición. - le dije. - Me dirás porque tuviste un mal día.
- De acuerdo, pero será mañana. Ahora debemos dormir, es tarde. - me dijo. - Mañana vendrá Lucas para ir a la universidad, ¿Quieres venir con nosotros?
- No gracias, quedé con Riley para que vayamos juntas. Ella vendrá por mi. - mentí.
- Ella también puede venir con nosotros. - respondió Farkle. - Mañana salimos a la 7.
- Pero... - quise replicar.
- Pero nada, mañana a la 7. - se acercó y me dió un abrazo. - Descansa Maya.
- Ehh... tu igual. - respondí aturdida.Después de terminar mi bebida, regresé a mi cuarto y tome mi celular para enviarle un mensaje a Riley.
Hey Riles!
Se que es algo tarde pero, ¿Quieres venir mañana a casa para ir juntas a la escuela? Por favor, no digas que no.
Descansa.A los 5 minutos recibí un mensaje de Riley.
¿Qué haces despierta a esta hora Peaches?
¡Estaba soñando con muchos conejitos!
No te preocupes, iré. Ahora duerme ¿Ok?
Te quiero.Después de leer el mensaje, bloquee mi celular, lo deje en la mesita de noche y pensando en quien podría ser el chico que apareció en mi sueño, volví a dormir.
Nota de autora:
Perdón por demorarme en actualizar, realmente lo siento. Las clases absorben todo mi tiempo libre, estudio toda la semana sin descanso pero ¡Basta! no vine a contarles mis problemas, espero les guste este capítulo si se dan cuenta es un poco más largo que los escritos anteriormente. También quiero agradecer a las personas que comentan que quieren que siga escribiendo, realmente me motivan a no dejar la historia, además de mi gran amor por Lucaya.
#LucayaIsTheEndGame
Los quiero mis futuros lectores.
ESTÁS LEYENDO
El Mejor Amigo De Mi Hermano - Lucas & Maya [CANCELADA]
Random¡La esperanza es para tontos! - grité. Entonces, soy el mayor tonto del mundo. - dijo él. Empezó a acercarse a mi y cuando le quise responder, me besó. - Puesto #1 en Cowan [ 16/01/2020 ] - Puesto #1 en Peybrina [ 20/01/20...