El Mejor Amigo De Mi Hermano - Lucas & Maya [CANCELADA]

Capítulo XV

- PorqueRileymepidióquielohicierayaquequieroconocerlomas.

- Oh, - vi como Farkle bajaba la cabeza. - Se lo pediré luego, no te preocupes.

- Farkle, yo... - le dije algo arrepentida. - se que sientes algo por Riley y odio verte triste, pero ella me lo pidió y... y-yo lo siento.

- No tienes porqué disculparte, tonta. - fingió sonreír. - De todas formas, ella nunca se fijaría en mí.

- Hey, - lo tomé del mentón para hacer que me mirara. - no digas eso. Cualquier persona sería afortunada por estar a tu lado.

- Entonces, debes ser afortunada. - dijo con una sonrisa más sincera. - Nunca me iré de tu lado.

- Sabes a lo que me refiero, - le sonreí. - pero, sí, soy muy afortunada.

- No quiero sonar grosero, pero quisiera dormir un poco ahora.

- Tranquilo, - dije levantándome de la cama. - yo voy a salir un rato. Te mando un mensaje luego.

- Ok, - dijo tapándose hasta el cuello. - ve con cuidado.

- Descansa, hermanito. - le di un beso en la frente y salí de su habitación sin hacer mucho ruido.

Al salir me dirigí a la sala, me tiré al sofá y saqué mi celular de la chaqueta para enviarle un mensaje a Riley.

Odio estar en esta situación. - pensé mientras tecleaba el mensaje.

Hola cariño, tengo buenas noticias para ti. Estuve pensándolo bien y creo que sería divertido ir a la fiesta del viernes. Así que, ¿Aún sigue en pie la idea de ir de compras?
- Maya

Envié el mensaje, dejé mi celular en el sofá y prendí la televisión mientras esperaba que Riley contestara. Lo cual fue bastante rápido, ya que no pasaron ni 2 minutos antes de sentir mi celular vibrar.

* En llamada *

- Gracias, gracias, gracias, preciosa. - escuché  a Riley gritar. - Será divertido, lo prometo.

- No tienes porque agradecerme, estoy segura que será divertido. - respondí.

- ¡Bien, preciosa! - escuché. - Te veré en el centro comercial que está cerca de mi casa en 20 minutos. ¿De acuerdo?

- Te veré allí, honey. Nos vemos. - sonreí y corté la llamada.

Me levanté del sofá, tomé las llaves que estaban en la mesa de centro, me puse mi chaqueta y me dirigí a la cocina sin hacer mucho ruido para no perturbar el sueño de Farkle. Deje el tazón de Tom lleno por si tenía hambre más tarde y escribí una nota para mamá. Estando todo listo, partí rumbo al centro comercial.

El viaje fue bastante corto, pues en 15 minutos ya había llegado a mi destino. Por lo que sospechaba que Riley ya debería estar allí. Mientras me acercaba a la entrada pude divisar a Riley, que se encontraba comiendo un helado y conversaba con el que parecía ser un empleado de seguridad.

- Entonces, ¿Me dice que jamás ha comido el helado de menta granizada? - escuché cuando estaba lo suficientemente cerca. - ¡Pero si es el mejor helado del mundo!

- Señorita, por favor deje de interrumpir mi trabajo. - pude ver que el señor no estaba de humor para conversar, así que decidí intervenir.

- Cariño, deja tranquilo al hombre. - tomé a Riley del brazo y comenzamos a caminar. - Debe estar muy ocupado y no puede distraerse.