Capítulo XIII

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- ¡Mierda! ¡Farkle! - grité.- ¿Qué rayos te pasó?

- Tranquila Maya, estoy bien. - dijo Farkle intentando incorporarse.

- ¿Cómo quieres que esté tranquila? - ayude a sentar a Farkle. - ¡Tienes demasiados moretones y tu labio está partido! ¿Quién te hizo esto? - grité.

- No lo sé... - escuché un suspiro de su parte. - yo... te mentí. En realidad no tenía que hacer ningún proyecto, fui a una fiesta del equipo de basket y parece que no soy de su agrado.

- ¡Oh! ¿En serio? - pregunté con tono de sarcasmo. - ¡Sabes que son unos idiotas! ¿Cómo siquiera se te ocurrió ir?

- Bueno... yo-o eh, - empezó a decir.

- ¡Espera! - lo callé - ¿Fue Lucas, cierto? ¿Él te obligó, verdad?

- No Maya, él no... - intentó hablar.

- ¡No intentes defenderlo! - le grité - No sabe con quién se metió. - salí de la habitación ignorando los gritos de Farkle.
- ¡Lucas! - lo busqué en la sala.

- ¡Estoy en la cocina! - escuché y me dirigí hacia donde provenía su voz.

Lucas se encontraba preparando algo de comer, estaba de espaldas así que no podía ver que estaba allí. Por un momento, me sentí mal y pensé que lo que había sucedido con Farkle no era tan grave como para pelear con él. Sin embargo, recordé los moretones en su cara y como no podía siquiera sentarse en la cama y cualquier rastro de sensibilidad se esfumó de mi sistema.

- ¡Eres un idiota! - grité y tomé a Lucas por el cuello de su camisa haciendo que arrojará la cuchara que tenía en sus manos.

- ¿Qué es lo que te pasa, rubia? - preguntó sin entender la situación. - ¿Pasó algo malo allá dentro?

- ¿Cómo te atreves a obligar a Farkle a ir a esa maldita fiesta? - lo acerqué más a mi rostro para intentar intimidarlo. - ¡Pudo salir muerto de ese lugar! ¿Qué es lo que pensabas?

- Rubia... - sentí su mirada fija en mis labios. - No es lo que parece...

- ¿Ah no? Entonces explícame, imbécil. - me sentía muy incómoda con su cercanía, tal vez no debería haberlo tomado de su camisa.

- Yo nunca quise ir a esa fiesta, Farkle si... - estaba susurrando y no dejaba de mirarme. - Lo acompañé para que no estuviera solo con esos cavernícolas.

- Oh... - me sentí muy avergonzada y me quise alejar. - Lo siento mucho, vaquero.

- No tienes que disculparte, Maya. - sentí que tomo mi cintura impidiendo que me aleje. - Sólo defendías a tu hermano...

- No debí gritarte así... - no podía dejar de mirar sus ojos, estábamos muy cerca.

¡Mierda! ¿Desde cuándo Maya Hart se disculpa con alguien? - pensé.

- Deja de disculparte ahora. - dijo firme.

- ¿Y si no quiero, qué? - lo rete acercándome más a su rostro.

Sentía su respiración cada vez más cerca, sus ojos estaban fijos en los míos y poco a poco iba acercando su rostro. No sabía que me pasaba, mi mente me decía que esto estaba mal, que debía alejarme ahora porque no podía traicionar de esta manera a Riley, pero mi cuerpo no reaccionaba.

- Lucas... - susurré casi rozando sus labios.

- Déjame hacer esto, por favor. - cerró sus ojos y sabía que pasaría.

- ¿Maya? - escuché la voz de Farkle que venía desde el pasillo y reaccioné empujando lejos de mi a Lucas.

Corrí al pasillo que estaba fuera de la habitación de Lucas y Farkle estaba allí sosteniendose de la pared para no caer al suelo.

El Mejor Amigo De Mi Hermano - Lucas & Maya [CANCELADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora