CAPITULO 24: ADIOS ISAAC

187 14 14
                                    

CAPITULO 24: ADIOS ISAAC

 Agarro fuertemente mis manos por la espalda y me acerco a él, pero esta vez no lo hizo con un movimiento brusco, lo hizo con suavidad acariciando mis manos con la yema de sus dedos.

-Suéltame ahora mismo Isaac-

-Princesa tenemos que hablar, no puedes seguir ignorándome- me miró fijamente a los ojos, sus ojos mostraban tristeza y acto seguido saco su famosa mirada, esa mirada que tanto me ha trasmitido siempre, tranquilidad, amor, amistad y últimamente mucho dolor, esa mirada que tanto me gustaba de él hizo que lentamente dejase de forcejear para que me soltara, con su mirada había conseguido lo que él quería, tenerme a su lado, a su merced, mirándolo como una autentica tonta.

Segundos después de quedarme embobada mirando sus ojos, su cara, esos labios que tanto amaba, mi cabeza volvió en sí para hacerme ver que no podía pensar en el de esa forma, sé que aún lo quiero, mejor dicho lo amo, si no hubiese ocurrido lo de hace unos días daría mi vida por él si el me lo pidiera, pero ahora no, siendo egoísta me quiero a mí muchísimo más  y tengo que hacerme respetar y mi vida ha de ser feliz y sé que con él no lo sería nunca.

-Me acabas de llamar guarra, no me digas ni princesa ni nada, te pedí que ni me miraras- como unos segundo atrás deje de forcejear para que me soltase relajo su agarre y yo aproveche esa debilidad suya para soltarme y dar un par de pasos hacia atrás.

-Isaac vete de aquí no tenemos nada que hablar todo está dicho-

-Ya la has odio Isaac, estamos entre amigos y nadie te ha invitado-

Cuando Isaac llego a nuestra mesa Sarah salió corriendo hacia el mostrador donde los chicos pedían los helados y James vino en mi busca desesperado.

-Mira niñato deja de meterte en mis asuntos, si quiero hablar con Ainara hablare con ella cuando me dé la gana y nadie me lo va impedir- tras terminar esa frase me agarro de la muñeca y comenzó a tirar de mí para sacarme de la heladería.

-¿Cuántas veces te he dicho que no la toques en contra de su voluntad?-

Y acto seguido Isaac tiene que tocarse su mandíbula por el fuerte golpe que James le ha dado. Cuando recobra la noción del tiempo ambos se tiran hacia el otro pero los chicos consiguen pararlos, hubiera sido una batalla campal dentro de la heladería y si la pelea se llega a dar nos fueran vetado la entrada de por vida.

-¡Parad!, James tranquilízate por favor, ¿y tú quieres hablar hazlo, tienes diez minutos? Después me vas a dejar tranquila y como intentes volver a acercarte a mí te pienso pegar una patada en los cojones-

Todos se quedan callados esperando lo que este tiene que decir pero él me coge de la muñeca y me saca fuera del lugar.

-No voy  a tardar diez minutos pero deja que te lo diga todo y después hablas ¿vale?-

-Como te dé la gana pero desde que te he dado el tiempo hasta que me has sacado aquí han pasado dos minutos asique tienes ocho, bueno siete ya, asique ya puedes darte prisa-

-Quiero pedirte perdón, me he comportado como un auténtico cabrón y no debería haber hecho lo que hice y mucho menos restregártelo así, me he dado cuenta que lo que paso con Pilar fue un error  y yo a quién amo es a ti, necesito tenerte cerca, sentir tu amor y tu cariño, con Pilar solo ha sido sexo, todo sin amor, quiero tenerte con migo, discúlpame por todo, sé que no merezco tu perdón pero lo necesito, necesito quedarme tranquilo sé que siento por ti es real y  necesito saber que tú también me quieres, todo ha sido mi culpa pero por favor perdóname-

-¿Puedo hablar ya?-

El no dijo nada solo asintió con su cabeza.

-Me parece estupendo que admitas tu culpa, porque como comprenderás tú solito te has metido ahí, yo no hice nada,  no sabes cuánto agradezco no haberme acostado contigo, soy feliz siendo una monja sabes, ya que así podré entregarme por completo al que sea amor de mi vida, que por si acaso no lo notas en la sutileza de mi expresión no vas a ser tú, tú necesitas que te perdone, pues te perdono si con eso consigo que te alejes de mí, Isaac, no quiero saber absolutamente nada de ti, me traicionaste de la forma más cruel y rastrera que hay, y para colmo con esa, y si Isaac, sigo enamorada de ti, han pasado tres días, no me olvido tan rápido pero me has hecho mucho daño y no pienso olvidarlo te amo como ni tú te imaginas pero de la misma forma que te amo te odio y no voy a parar hasta olvidarte por completo, has sido lo mejor que me ha pasado no te lo voy a negar pero igual eres una mancha en mi pasado, alguien del que no pienso volver a hablar, para mí nuestra relación nunca ha existido y si te jode que te lo diga tan claro más me jodió a mi leer eso, que no fuiste ni por decirlo a la cara. Ya tienes lo que querías ¿no?, hemos hablado te perdono si con eso eres feliz y si te amo, te amo con locura pero tú y yo no somos ya nada ni lo seremos nunca quiero y necesito olvidarte-

-Aina no-

-Aina sí, no vuelvas a hablarme, no vuelvas a acercarte a mí y mucho más importante ni me insultes a mí ni a mis amigos porque entonces no respondo y me va a dar igual quererte que si me obligas a acerté sufrir no parare hasta verte destruido por completo, lloraras hasta que se te sequen los ojos igual que tú has hecho con migo-

-¿Esto es él fin entonces? Así vas a acabar nuestra gran relación-

-Isaac no te engañes ¿qué relación?, ¿la mentira que yo tenía en la cabeza mientras tú te corrías dentro de esa?, pues sí Isaac, adiós y para siempre-

Me zafe de su sutil agarre y me encamine hacia dentro del local pero mi cuerpo no daba más de sí, no sé cómo he sido capaz de decir todo eso, con cada palabra que salía de mi boca mi corazón daba vuelcos dentro de mí pero al fin y al cabo tenía que hacerlo y ahora me encuentro mucho más despejada, no puedo entrar ahí con todos esperándome ya que serán muchas preguntas, desde la puerta me despedí de mis amigos y me comencé a andar sin ningún rumbo fijo mis piernas decidirían el camino, sumida completamente en mis pensamientos y con mis ojos nublados por las lágrimas que brotaban de su interior escuche una suave petición de detrás de mí

-Aina espera-

Y de repente la calidez se apodero de mi cuerpo cuando él aun en mi espalda de dio un gran abrazo reconfortante.

________________________

Hola aquí os dejo un nuevo capitulo espero que os guste mucho ya que me ha costado bastante escribirlo no tenía muchas ideas y he tenido que sacarlas sin mucha fluidez. Una vez más agradecer los votos que le dedicais y el tiempo en leerla si no fuera por vosotros ya la habría eliminado ya que no siento que sea del todo buena, pero mientras alguien la lea seguiré escribiendo.

Muchas gracias a todos

Saludos Inma

os dejo en multimedia a Pilar

Sueños RotosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora