CAPITULO 29: MARIPOSAS

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CAPITULO 29: MARIPOSAS

Sus palabras me abrieron un nuevo mundo, mis ojos se abrieron por completo, desde un principio supe que quería decir eso, pero ante la duda necesitaba que lo dijera de forma clara necesitaba saber que estaba enamorado de mí para que las mariposas de mi estómago afloraran con alguna razón aparente.

En estos segundos me encuentro como en una nube, estoy flotando en un mar de tranquilidad que me lleva hacía él. Ante tanta felicidad me quedan las dudas de temor, de ¿qué pasará? O ¿cómo debo actuar?

Ahora mismo sé que lo quiero, aparte de atraerme su físico, como es obvio ya que es un chico guapísimo sé cómo es por dentro, un niño pequeño disfrazado de mayor, la mayoría de sus actos son impulsivos, algo no demasiado bueno ya que le han metido en algún que otro problema pero adoro su espontaneidad, me rio muchísimo con él ya que es un poco payaso y para que engañarme, me ha tratado como una reina en estos días, bien fuera porque estaba prácticamente muerta o porque sea verdad todo lo que dice.

Me cuesta mucho fiarme de él, pero no es su culpa sino del imbécil de Isaac, este, también me lo pinto rosas en un lienzo oscuro cuando estábamos conociéndonos pero todos sabemos cómo acabó eso.

Me encuentro ensimismada ante su mirada, se encuentra realmente guapo, sus ojos completamente abiertos mirando a mis ojos intentando encontrarme ente mis pensamientos perdidos, es ligera sonrisa, su cara muestra alegría pero también desesperación, estoy tardando demasiado en hablar pero no encuentro las palabras correctas y sé que tengo que decírselo.

Quiero decirle que estoy empezando a quererle, que me encanta, que necesito un abrazo. Pero cada vez que intento hablar solo sale sonido, nada de palabras articuladas con la coherencia de formar una frase en condiciones. Mi cerebro funciona más rápido que mi voz y no soy capaz de hablar tan rápido asique decido actuar dejando de pensar, más tarde analizaría las repercusiones de mis actos.

-James-

-¿Si Aina?-

Y se quedó sin contestación, me arrime a él, puse mis manos por detrás de su nuca dándole un ligero abrazo y obligando a que bajara lentamente su cabeza una vez nuestras frentes se encuentran pegadas no hace falta ninguna palabra, mirándonos a los ojos los dos sabemos que es lo que necesitamos.

Y es así, como una milésima de segundo después, las mariposas de mi estómago pasaron al resto de mi cuerpo pues el roce de sus labios sobre los míos era lo más dulce que logre a recordar.

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Hola a tod@s, tengo que pediros perdon por tardar tanto pero ultimamente me cuesta muchisimo escribir no fluyen las ideas y me distraigo con facilidad, espero que sigais leyendo, tambien decir que no se cuando volveré a subir de nuevo, pero lo voy a hacer. Se que es un capitulo algo corto pero es a lo más que he dado hoy que tenia inspiración. Espero que os guste.

Haciendome autopropaganda decir que mi otra novela "Enamorandome de tí" ya está terminada, por si se os hace muy lento hasta que vuelva a subir y quereis leerla.

Como siempre os pido que si os gusta le deis a la estrellita y me encantan los comentarios. Muchas gracias de verdad a aquellos que sigais aqui.

Saludos Inma.

Sueños RotosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora