Siempre fuiste tu (Camren AU)

Capítulo 24

La canción termino y en el salón se instaló un silencio sepulcral tan grande que incluso se podían oír nuestra respiraciones.

-Eso fue extraño- dijo Dinah rompiendo el silencio.

-Fuera de lugar diría yo- Hablo Camila bastante molesta.

-Es en serio- le dijo Keana viéndola a los ojos.

-Bien pues esto también- y dicho eso me beso.

El beso fue completamente brusco y lastimero, trate de separarme inmediatamente de ella, pero tenía no me dejo, sino hasta que escuchamos la puerta de entrada azotarse.

-¿Qué te pasa?- le pregunte separándome de ella.

-Tenía que dejarle las cosas claras- me dijo seriamente.

-Tú no tenías que hacer nada- le dije molesta levantándome del sillón.

-Discúlpame por lastimar al amor de tu vida- me dijo sarcásticamente.

-Buenas noches- fue lo único que dije y subí a acostarme con Bella.

No tenía ganas de volver a pelear con Camila, eso era realmente desgastante, y después de esa canción y de esa noche en general era lo último que quería hacer.

El alcohol que había consumido ese día me ayudo bastante para poder conciliar el sueño, ya que de otra manera no hubiera dormido nada.

-Buenos días- salude entrando al comedor.

-Buenos días- respondieron Milika, Dinah y Bella.

-Acompáñame a la cocina- me dijo Milika, levantándose de la mesa.

-Ahora vuelvo- le dije a Bella.

Ella me sonrió y Dinah me regalo una mirada de compasión que me hizo preocuparme por lo que sucedería en la cocina.

-Te debo una enorme disculpa- me dijo apenas entre.

-No entiendo porque- le dije poniéndome a enfrente de ella.

-Por la noche que te hice pasar ayer- me dijo tomando una taza de la alacena.

-Supongo que eso debía de pasar- le dije tomando la taza de café que me ofrecía.

-Me la encontré en el centro comercial, y me pregunto si iba a hacer la cena de navidad, y se me hizo feo no invitarla después de que pasara con nosotros tres años, pero la verdad es que no pensé que viniera- me explico lentamente.

-No hay problema, en algún momento teníamos que volver a encontrarnos- le dije quitándole importancia a la situación.

-¿Que soy yo para ti?- me pregunto de la nada.

-Sabes que lejos de ser la madre de mi amiga eres parte de mi familia- le dije aun sin entender la pregunta.

-Bien, pues ocupando el poder que me da ser parte de tu familia, me permitiré hablar de esto contigo, ¿el anillo que tiene Camila en su mano es de compromiso?- me pregunto sentándose en el desayunador.