Capítulo 44

10 2 0
                                    

Helen había ingresado al segundo piso junto con otros agentes de policía, tenían indicios de que ese lugar era el refugio de uno de los delincuentes más buscados por varios delitos pero gracias a las fotos que Nick les había proporcionado fue posible dar con la información exacta de su ubicación.

Al llegar al edificio de seis plantas tuvieron que protegerse porque comenzaron a dispararles, de pronto todo se convirtió en un alboroto, algunos bandidos de poca monta resguardaban el lugar haciendo de seguridad protegiendo a su jefe, se defendían atacando a los uniformados sin embargo un grupo de efectivos había logrado entrar y tomarían el edificio piso por piso.

Aunque estaba atenta a todo lo que ocurría a su alrededor no dejaba de pensar que tal vez sus compañeros ya supiesen que ocultaba a Nick en su casa, tendría que dar muchas explicaciones a sus superiores por eso, deseaba hablar con Carter para saber qué había sucedido.

Los diferentes grupos de agentes subían progresivamente avanzando tanto como les permitían los delincuentes que estaban dando la lucha disparando a diestra y siniestra, su equipo en el segundo piso encontró algo de resistencia fueron tumbando puerta por puerta y se enfrascaron en enfrentamientos cerrados.

Ella había quedado sola frente a una puerta entre abierta, con sumo cuidado se asomó por la rendija y no observó movimiento sin embargo esperó antes de entrar para verificar si escuchaba a alguien, nada todo estaba en silencio sólo se oían los sonidos del otro extremo del pasillo donde estaban los demás agentes.

Con el pie terminó de abrir la puerta que chirrió al pegar contra la pared, entró con su arma en la mano caminando despacio, el departamento no lucía mal estaba ordenado y limpio contrario a lo que se imaginó, notó que sobre una mesa había un trago servido a medio tomar y un cenicero con algunas colillas de cigarro, podía oler en el aire que hacía poco habían estado fumando allí.

Recorrió la pequeña cocina donde notó comida fresca, los habitantes de ese departamento acababan de salir, sea quien fuese debía tener un alto rango en la organización porque todo era de calidad en ese lugar.

Había dos puertas frente a ella una debía ser un baño y la otra la habitación, ambas estaban cerradas por debajo no se veía luz ni movimiento de nadie, abrió la primera con cuidado y retrocedió un poco esperando alguna reacción, entró apuntando a un lado y a otro, en efecto era un baño al igual que el resto de la casa estaba limpio y ordenado.

Solo le quedaba una puerta por inspeccionar repitió el procedimiento y no hubo ningún ataque, entro apuntando al lado derecho cuando se giró para ver el lado izquierdo lo único que pudo ver fue como la culata de un rifle de alto calibre le daba justo en la cara, todo le dio vueltas en un segundo suficiente para que su atacante le diera otro golpe y le tumbara el arma de las manos, esta vez sintió como las piernas le fallaban y se le doblaban cayendo al suelo perdiendo el conocimiento.

El hombre que la atacó tomó el arma de Helen, se la colocó en la cintura y se colgó el rifle de alto calibre sobre el hombro, se agachó y la giró para verle la cara.

-¿A quién tenemos aquí? Vaya, vaya... que sorpresa tan inesperada, agente Wood-sonrió con malicia, tocó su cuello para sentir el pulso, estaba desmayada aunque de su nariz y pómulo brotaba sangre por el golpe del rifle, se acercó a un cajón y sacó una cinta plateada que le colocó en la boca para evitar que gritara cuando despertara, juntó sus manos rodeándoselas con la cinta por las muñecas.

Miraba en dirección a la puerta sabía que habían muchos agentes allí y era cuestión de minutos que entraran otros a ese departamento, se asomó por la ventana que daba a la parte trasera del edificio justo al lado pasaba la escalera de emergencia, todavía no habían agentes allí así que sopesó la idea de escapar no sin antes llevarse su salvo conducto.

Debajo de la ventana habían unos contenedores de basura medio llenos si lanzaba a Helen caería justo encima de las bolsas el bajaría por la escalera de emergencia y la sacaría para luego huir por otro callejón oscuro y estrecho que no se veía porque estaba entre ese edificio y el otro.

Eso fue lo que hizo tomó a Helen por los brazos llevándola hasta la ventana había un rellano donde se apoyó para halarla cuando tuvo la mitad del cuerpo fuera miró a un lado y otro se escuchaban las voces de los agentes agitados al frente y al final de la calle, todo estaba despejado, la dejó caer y su peso fue amortiguado por las bolsas de basura, seguía inconsciente, bajó rápidamente y se subió al contenedor para sacarla, pero escuchó unas voces acercarse escarbó entre las bolsas y se hundió en ellas tapándolos a ambos lo más posible.

El olor era nauseabundo y tuvo que aguantar la respiración para evitar las náuseas, por suerte el golpe había sido lo bastante fuerte para mantenerla desmayada un rato, las voces se acercaron cada vez más y pudo sentir los pasos afuera del contenedor, los agentes corrieron de repente hasta el final del callejón gritándole a alguien que escapaba, se oyeron disparos y luego todo fue silencio.

Tendría que quedarse allí un buen rato hasta estar seguro de que podría salir, tenía otra vía de escape prevista en caso de emergencias pero no era mejor idea que donde estaba en ese momento, esperó unos minutos más y sintió como empezaba a removerse Helen a su lado, tendría que desmayarla nuevamente o lo delataría si no lograba hacerlo tendría que matarla y escapar sin nada que intercambiar como había sido su plan inicial.

No sólo la quería para intercambiarla en caso de que lo atraparan sino por una venganza personal, esa agente había metido preso a su hermano hacía varios años atrás y en la cárcel estaban algunos enemigos que aprovecharon de cobrársela y lo asesinaron, había muerto por su culpa y ahora tenía la oportunidad de vengarse de quien lo encerró.

Helen empezó a removerse inquieta y abrió los ojos confundida, el terror se apoderó de su rostro e intentó gritar pero la cinta le impedía hacer ruido, su corazón bombeó rápidamente a cada movimiento se hundía más en la basura y la desesperación la invadió, de repente se topó con el rostro de quien habían ido a buscar a pocos centímetros del suyo.

Con pánico intentó moverse hacia atrás pero sólo lograba ahogarse más con las bolsas, no había luz sólo la poca que entraba entre un paquete y otro, el hombre junto a ella sonrió malicioso al ver lo asustada que estaba y acercó la boca a su oído.

-Vas a morir aquí agente Wood y nadie podrá salvarte-colocó las manos alrededor de su cuello y empezó a apretar, la cara de Helen se puso roja por el esfuerzo que hacía para respirar, las venas de sus ojos se tornaron rojas y las lágrimas rodaron por sus mejillas, el último pensamiento que pasó por su mente fue el rostro de Carter sonriéndole, cerró los ojos y dejó de luchar.

ndo eZ'.

Un pasado un futuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora