Introducción

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En este mundo hay muchas cosas que desconozco. Casi todo se cuenta con historias o mitos, pero otros buscan la verdad como tú o como yo.

Ya que no sabemos el origen de nuestro mundo, solemos usar esta leyenda... Como sea, solo léela pero no la tomes al pie de la letra, joven aprendiz. Hay más de lo que se cuenta en ella a primera vista.

"En un tiempo en que La Oscuridad y La Luz estaban enfrentadas en una guerra eterna por el control de absolutamente todo... Solo hubo una forma de vencer a La Oscuridad, La Luz reunió sus tres guerreros más hábiles en el combate para que lucharan a su lado; logrando vencerla tras una ardua batalla sin comparación alguna. Pudieron haberla matado de una vez, pero La Luz se apiadó de su enemigo, y en agradecimiento por su compasión, les otorgó un deseo a cada uno de los guerreros... lo que sea que su corazón anhelaba podría ser creado practicamente de la nada.
Por su parte, La Luz, debido a su lealtad y compromiso en la batalla, les mostró un lugar donde reinar como se les plazca: la Tierra.
Los tres guerreros con sus deseos llegaron a sus dominios... El mayor, Ishtar, reclamó la zona terrestre. El del medio, Adzor, pidió la zona celestial. Mientras que el último, Ukun, sin poder elegir se fue a la zona infernal del planeta. Cada uno lo eligió como una oportunidad para descansar y ser venerados como los nuevos dioses.

Ishtar, el mayor, divisó que en sus dominios ya existían poblaciones; algunas aceptaron que él sería su nuevo gobernante, mientras que en las de gran poder militar no se dejarían dominar por un autodenominado "Dios". Ante la negativa de la gente, Ishtar decidió tomar su lugar mediante su deseo, pidiendo a La Oscuridad un arma capaz de aniquilar a todo aquel que se interpusiera en su camino. En ese momento una misteriosa luz apareció, y en un instante se materializó en una espada de un brillante azul platinado; al cogerla, sintió como su fuerza incrementaba en gran medida y con ella su ambición de expandir su imperio en la Tierra. Y así fue como gobernó sobre la faz de la Tierra sin ninguna oposición.

Por otro lado Adzor, el del medio, al llegar al dominio celestial, notó que todo su nuevo territorio no era más que un cúmulo de nubes blandas y sin base, donde la vida no prosperaría, al menos sin que alguien hiciera algo al respecto. Así que usó su deseo, pidiéndole a La Oscuridad un objeto con el cual pudiera sustentar la vida que tanto anhelaba. Tras la aparición de un luz intensa, se materializó un pequeño artefacto dorado que posó sobre sus manos. Lo colocó sobre una nube con temor a que cayera al infinito, pero en cambio, todas las nubes se solidificaron y cimentaron las bases de su reino, al cual llamó "Los Elisios"... La vida dependía únicamente de su mente y del artefacto, solo limitada por su imaginación: todo fue creado con el mimo de crear a personas que disfrutaran sus nuevas tierras. Y así fue como gobernó sobre Los Elisios con la admiración de su gente.

Y por último Ukun. el menor, llegó a una zona carente de vida donde lava y fuego incandescente prevalecían y el cielo era reemplazado por una cúpula de roca. Antes de pensar en usar su deseo, rogó por ayuda a sus hermanos para lograr que la vida creciera tan bien como lo hacía en sus reinos. Ishtar simplemente lo ignoró mientras que su hermano Adzor, mandó a su gente en su auxilio, creando así el Núcleo del Infraverno: una inmensa máquina que creaba energía a partir de la lava, con ello trayendo con ella la vida de sus nuevos habitantes creados con el mismo cariño por Ukun. Así fue como gobernó sobre El Infraverno con el amor de su pueblo.

La paz nunca se había visto tras próspera en los tres reinos por más de tres cientos años, tras el gobierno de los tres hermanos; sin embargo, un antiguo prisionero decidió intervenir en esa dichosa alegría; carcomiendo la mente de Adzor y Ukun, y comenzando una guerra contra el único hermano que no pudo controlar, Ishtar. 

El mayor, al enterarse los planes de las pobres almas de sus hermanos, tuvo la fuerza de voluntad de iniciar una batalla con un gran ejército a sus espaldas contra cada uno de ellos . Atacando primero los dominios de Adzor, donde su gran batallón, sin mucho esfuerzo, logró derrotar al de su hermano, y por terminar con el sufrimiento de este. Pese a su muerte no logró evitar que Adzor enviara un mensaje de advertencia para el rey del Infraverno.

El Árbol de la Vida: Comienzo de una LeyendaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora