Hyukjae llegó al casino con la intención de hablar con Donghae. Donghae llegó al casino con la intención de hablar con Hyukjae. Pero antes, debía aclarar la situación con Sehun. Entrada la noche, lo encontró sentado en una mesa apartada, jugando una partida de poker. Sehun al verlo, lo saludó cortesmente. Donghae se acercó y solicitó hablarle a solas. La partida fue interrumpida. Cuando se alejaron del bullicio, Donghae intentó comenzar a hablar.
- No te preocupes - acotó Sehun - se lo que vas a decirme.
- ¿Lo sabes? - preguntó intrigado.
- Soy responsable. No debí haberte besado ni confundido.
- Pero... yo también te he besado...
- No, Donghae - dijo Sehun amablemente - el otro día en el bar, me di cuenta de algo. Tu nunca podrías corresponderme porque estás enamorado de otra persona.
Hae permaneció callado y sorprendido.
- Lee Hyukjae. - prosiguió Sehun - Cuando se acercó a ti para ver cómo estabas, lo entendí todo. Ustedes tienen una historia y no como amigos. Asique... ¿Qué esperas? Ve por él y se feliz, mi querido Donghae.
Sehun le dio un abrazo y tras separarse, el menor expresó:
- De hecho, es lo que tengo pensado hacer. Gracias. Siempre tendrás en mi a un buen amigo.
Ambos sonrieron y Donghae, más decidido que nunca, fue a la búsqueda de su "Hyukkie". Ingresó al bar. Él estaba detrás de la barra.
- Hyuk. - dijo aproximándose - Necesito hablar contigo, por favor.
El pelinegro escuchó y contestó:
- Por supuesto, yo también tengo algo que decirte.
- Entonces, acompáñame a la oficina de Donghwa.
Sin mediar más palabras, se dirigieron al elevador. Una vez en el cuarto piso, entraron al despacho que se encontraba vacío. Se sentaron en los sillones.
- Aquí fue donde nos volvimos a ver... - dijo Hyukjae pensativo.
- Como sabes, tengo algo que decirte pero primero dime de qué querías hablar - expresó Donghae intentando ir al grano.
- ¿De veras? ¿No quieres empezar tú?
- Insisto, por favor.
- Bien, - comenzó Hyuk - tengo pensado irme del Blue Sky. Pierde cuidado que te indemnizaré por no cumplir la cláusula que obligué a los abogados a incluir... - hizo silencio y continuó - Creí que luego de diez años todo iba a ser como antes. Te lastimé entonces y lo sigo haciendo. Sungmin me pidió que te hiciera feliz pero no puedo evitar celarte. Cada vez que hablas con alguien o una persona se te acerca demasiado, mi cabeza se descontrola. Yo te amo y quiero tu bienestar, no quiero perturbarte... Intenté, Dios sabe que intenté... Quizás es el precio que debo pagar por haberte despreciado aquella noche.
Donghae lo miraba congelado en su lugar. No podía comprender cómo su "Hyukkie", decidía abandonar todo... abandonarlo a él. Pese a eso, no iba a permitir que se fuera sin antes jugar su última carta y si eso incluía contar lo que tan cuidadosamente guardó dentro suyo todo ese tiempo, lo haría.
- Oh... - exclamó intentando cubrir su dolor - La verdad, no esperaba esto... De hecho, yo no soportaría no verte más. Pasaron diez años pero aún sigo amándote, Lee Hyukjae. Te amo con cada parte de mi ser - declaró tomándole ambas manos entre las suyas. Hizo un silencio y prosiguió - Al fin estoy listo para esto. ¿Quieres saber cómo conocí a Siwon? Bien, - dijo levantándose y dirigiéndose hacia la ventana que se encontraba a sus espaldas - Como sabes, fue mi director en la secundaria. En un intento de aliviar las cuentas a pagar de Donghwa yo decidí llegar a un acuerdo con Siwon para evitar el pago de la colegiatura y... me entregué a él, no una sino muchas veces que el simple hecho de recordarlo me asquea. Lo hice durante un año y medio. Él fue quien se llevó mi virginidad. Al final de cuentas, soy lo que tanto te cansaste de decirme, una puta.
Tras escucharlo, Hyukjae lejos de despreciarlo y enojarse, corrió hacia él y lo abrazó por detrás, meciendo ambos cuerpos al compás de una melodía imaginaria.
- Hae, mi ángel... De haberlo sabido jamás me hubiera comportado de la manera en la que lo hice. Creí que me enojaría al descubrir que había pasado algo entre ustedes pero lejos de eso, te digo que te entiendo. Hiciste lo que pudiste y creíste conveniente, precioso mío, si pudiera tomar todo tu dolor para hacerte olvidar, lo haría - dijo llorando, provocando lágrimas en Donghae también.
- Hyuk - acotó dándose vuelta y quedando frente a él - ya no tengo secretos contigo. Puedes irte, si quieres. - dijo cabizbajo.
Hyukjae se debatió entre irse y agarrarlo fuerte para no dejarlo ir jamás.
- ¡TE AMO JUNG DONGHAE! - expresó acunando su rostro con sus manos - Te amo, ángel mío. Te elijo y te volvería a elegir mil vidas. No se como hacerte feliz pero el hecho de que me hayas abierto tu corazón y saber que me amas como yo a ti, me da la esperanza de hacerlo bien. Enséñame bebé, enséñame a hacerte feliz - susurraba Hyuk ahora acariciando los cortos cabellos de su "ángel" - Enséñame a colocar sólo risas en tu boca. Enséñame a amarte de la manera que tú quieras ser amado.
Diciendo ésto, lo besó como si fueran los personajes principales de una novela romántica.
- Donghae - dijo Hyuk cuando el beso acabó - ¿Me dejarías hacerte el amor esta noche?
- ¿Como si fuera la primera vez? - preguntó el castaño dulcemente.
- Como si fuera la primera de muchas porque planeo estar contigo toda la vida y las que vendrán.
Se besaron nuevamente pero ambos debían regresar al trabajo, por lo que debieron posponer el encuentro.
Al finalizar sus tareas, Donghae subió al coche de Hyukjae y partieron rumbo a su mansión.
- Hace diez años hacíamos lo mismo - dijo Donghae risueño.
- Hace diez años te amaba como ahora - respondió Hyukjae.
Cuando llegaron, Hyuk tomó a Hae de la mano y lo condujo escaleras arriba hasta su habitación. Lentamente, comenzaron a quitarse la ropa mientras repartían besos el uno sobre el otro, incansablemente, tratando de memorizar sus cuerpos por medio de sus labios, hasta que ya desnudos, cayeron sobre la cama. Hyuk fue tierno y cuidadoso con su ángel como si fuera virgen. Cuando lo penetró, Donghae sólo gimió de placer y lloró. Lloró porque Hyukjae le estaba haciendo el amor como debió haberlo hecho hacía diez años. El tiempo se detuvo entre ellos y lo que flotaba en el aire era amor en estado puro.
Posteriormente, Donghae se recostó sobre el abdomen de Hyuk.
- Tú fuiste el último en tocarme. - confesó.
- ¿De veras? ¿Después de todos estos años nunca...?
- No. Nunca pude dejar que nadie volviera a hacerlo. Ya estabas en mi corazón y dentro de mi ser. No había vuelta atrás.
- Yo, en cambio... estuve comprometido.
Donghae se incorporó en la cama y quedó mirándolo esperando conocer la historia.
- Era una mujer muy hermosa y buena. Creí que sería la indicada para olvidarte. Estuvimos juntos cuatro años pero cuando comenzamos con los preparativos de la boda, simplemente no pude. No podía renunciar a ti, no iba a renunciar a ti. Tuve que decírselo. Ella muy a su pesar, lo entendió.
- Lo siento, Hyukkie - dijo Donghae dándole un dulce beso en los labios.
- No lo sientas. Hice lo que me dictó el corazón y tuvo razón porque el destino te ha devuelto a mis brazos y créeme que no te dejaré ir jamás.
Esta vez fue Hyuk quien besó a Donghae y posteriormente, agregó riendo:
- Vamos a tener que dejarle en claro a todo tu público que eres mi pareja. No quiero que se pasen de listos.
- No te preocupes. De eso me encargo yo. - contestó el menor, feliz.
Esa noche, Donghae durmió en brazos de su "Hyukkie" por primera vez, con una genuina sonrisa de amor. Lo mejor, estaba por comenzar. Al fin y al cabo, sólo fueron diez años. Por delante, la eternidad.
FIN.
Kary, Anto, Sil... Gracias por acompañarme en este primer fic que escribí con mucho amor.
Ahora, los dejo con @@SilvanaHellsing y "Las dos almas de un todo". Es excelenteeeeeee :)
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Te amo, pero el sexo es mi arma [+18] EUNHAE
FanfictionJung Donghae es un joven de 26 años cuyo hermano mayor, Donghwa, es el flamante dueño de la cadena más importante de casinos de Las Vegas: el Imperial Casino. Pero no todo fue color de rosa para estos hermanos. ¿Cómo llegaron a obtener este imperio...