17. Ya Te Superé

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Fuimos a la heladería. Nos sentamos en una mesa a comer pues, helado.

Ambos acabamos pero nos quedamos un poco a platicar. Eramos bastante normales y él decidió entrelazar su mano con la mia.

-¿Qué haces? -pregunté quitando mi mano

-Tomo el valor de decirte las cosas que no te pude decir cuando tenía la oportunidad.

-Está bien... -dije no tan convencida

-El primer dia que te vi, no se, sentí algo. Te mentiría si te dijera que no siento nada por ti ahora. Yo... no sé, me estoy enamorando de ti.

Mi corazón comenzó a latir fuertemente. No sabía como contestarle. Fue un cretino, lo esperé, supongo que Alex lo rechazó y llega y me dice eso.

-Por favor di algo -suplicó

-....Gracias

-¿Gracias?

-¿Qué quieres que te diga? ¿Qué yo tambien?

-Sería bonito. Yo creo que tú también sientes lo mismo

-Tú crees, pero no es así. No soy la misma de antes.

-No te entiendo

-Tengo novio, lo sabes y te pido que lo respetes. Tambien lo tenía cuando me besé contigo y lo engañé. ¿Sabes cómo eso me hizo sentir? Como una real basura. Fui una mierda de persona y no volveré a serlo. Antes te quería, ahora solo eres mi psicólogo, un amigo si acaso.

-Pero puedes amarme. Nada te lo impide, puedes terminar con él y estaremos juntos, justo como tu querías. Fui un tonto, no sabía que lo que estaba buscando siempre estuvo frente a mi.

-No, Liam. No lo haré. No terminaré con él.

-¿Por qué no?

-Porque ya te superé ¿sí? ¿Por qué no puedes entenderlo?

Salí del lugar y caminé hacia mi casa. Un brazo me paró.

-Sueltame, Liam -dije

-No soy Liam -dijo una voz muy familiar

-¿Qué quieres ahora, William?

-Quiero pedirle perdón a tu amiga

-Suerte con eso, campeón.

-Llamé hace rato. En realidad fue Alex. Creo que la conoces.

-Claro que la conozco, además dile que si vuelve a llamar a mi teléfono le parto todo lo que de llama cara.

-¿Por qué no me dejas verla? Déjame pedirle perdón.

-No puede darse el gusto de ver tu estúpida cara.

-Lo siento, pero quiero arreglar las cosas.

-Arreglarlas y una mierda. Ella no te necesita y no la volverás a lastimar.

-Genial, genial. Pero, verás que en cuanto tenga tiempo para hablarme, me volverá a querer y se va a olvidar de lo que le hice. ¿Sabes por qué? Porque es igual que tú.

-Si, si. Di lo que quieras. No me importa.

-Pero hay algo que las diferencia. ¿Sabes que es? Que tu eres una zo...

Golpee su mejilla antes de que acabara de decirlo. No soy una zorra. No lo soy.

-La próxima vez que quieras decir eso. Asegurate de que la chica a la se lo digas no tenga ni un poquito de dignidad -añadí.

Seguí mi rumbo y llegué a la casa. En la sala me esperaban Rachel y mi mamá.

-¿Qué ocurre aquí? -pregunté

-Siéntate -dijo mi madre

Obedecí. Sentía sus miradas posarse en mi.

-Rachel también sabe lo que pasó ayer entre tú y Harry -dijo Louise

-¿Qué piensas? -pregunté

Rachel se quedó un tiempo viendome y me guiño haciendo una mequeña mueca muy parecida a una sonrisa. Sonreí ante su respuesta

-Creo que estuvo muy mal lo que hiciste ayer -mintió

-Rachel sabe de lo que habla. Ella tiene tu edad y no ha tenido relaciones con nadie porque es algo muy importante -dijo Louise

-Tienes toda la razón -Rachel dio una pequeña carcajada

Wow, Rachel riendo, después de cuánto.

-Bueno, gracias. Madre, Rachel. Su opinion me ha servido bastante. Cuando quiera tener algun novio o relaciones con el actual, lo pensaré 2 veces. -mentí

Mi madre se paró y me abrazó.

-Que bueno que lo entiendas.

Mi mamá se dirigió a su cuarto y Rachel y yo al mío

-Yo solo quiero saber qué hizo mi mamá para que salieras de tu cuarto. -dije

-No tengo ni idea. -dije- Ya, no importa. Cuéntame. ¿Cómo fue?

-No te lo diré. Ahora que lo pienso... Ew-imité un escalofrío

-Eres increible. Yo arruiné una parte muy importante de mi vida por no elegir a la persona correcta. Pero creo que...

El celular de Rachel interrumpió nuestra plática. Alguien la estaba llamando y si es William juró por la colección de imanes de refrigerador de mi mamá que le va a ir muy mal.

Angela •l.p•  EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora