Angela •l.p• EN EDICIÓN

25. ¿Cómo Crees Que Me Siento Yo?

Hoy se cumplían 3 meses desde el funeral de Harry. Cada mes iba a visitarlo al cementerio, dejaba unas flores, le decía como habían estado los dias. Esperaba escuchar su voz una vez más, pero no podía.

Entre al cementerio y caminé hasta llegar a su tumba. Deposité las flores en frente de su lápida y me senté.

-Hola, Harry. Tengo que contarte algo muy importante.

No obtuve respuesta, ni la obtendría.

-He estado viendo a Liam. Se que te agradaba. Aunque sea un poco. He vuelto a ir a la clínica con él y de vez en cuando salimos por un helado o una malteada. Espero que eso no te moleste.

Suspiré. ¿Por qué las cosas tienen que ser así? ¿Por qué Harry no podía seguir aqui?

La voz se me quebró- Quiero que estés siempre conmigo, hice algo para que asi sea.

Extendí mi brazo izquierdo. La palabra Harry tatuada en una hermosa letra cursiva en la parte interna de mi antebrazo. Lo quería a él impregnado en mi piel como lo era antes.

-¿Te gusta? Lo hice hace 2 días

Miraba la lápida como su fuera una persona de verdad. Me veía tan idiota, pero Harry significa algo muy importante para mi.

-Liam me invitó a salir, le diré que si, quiero que tu seas el primero que lo sepa. -Lágrimas comenzaron a fluir- Fuiste mi primer amor y yo quería que fueras el último, pero creo que necesito seguir con mi vida, te amo, Harry, en serio, no tienes idea de cuanto, pero no puedo seguir viviendo asi.

Limpié mis lágrimas y me paré.

-Nos vemos en un mes, te amo.

Caminé a la salida y de ahi tomé el bus hasta la clínica. La señorita del escritorio me saludó amablemente al igual que siempre y me pasó con Liam.

-Hola -dije al entrar

-¿Cómo te fue?

-Bien

-¿Qué te dijo?

-Liam, sabes que Harry no puede decir nada

-Lo se y tu tambien lo sabes. ¿Por qué vas y le cuentas cosas entonces?

-Es diferente, tengo la esperanza de que me pueda escuchar donde sea que esté aun sin tener una respuesta

-Como sea. ¿Empezamos con la sesión?

-Aha

No presté mucha atención a lo que Liam me decía profesionalmente, estaba pensando mucho en lo que había dicho de Harry, no nos respondía, pero ¿Podía escucharme? Tal vez le he estado hablando a la nada, tal vez no, tal vez Liam quería que olvidara a Harry, tal vez solo había ido a su funeral por lástima o por algo, pero tal vez si le importó lo que yo sentía por él y fue para apoyarme y apoyar a Harry o no se.

Acabamos la sesión y me llevó a casa ya que estaba lloviendo. Su mirada estaba muy concentrada en el camino, de vez en cuando volteaba a verme para poder tener contacto visual mientras platicabamos, Apoyé mi brazo en la ventana y me recargué en mi mano. Liam rápidamente volteó pero no dijo nada, nada en todo el camino lo cual me extrañó.

Se estacionó frente a mi casa y yo desabroché mi cinturon de seguridad

-Gracias por traerme -dije

-Antes de que te vayas...

-¿Ocurre algo?

-Hace rato vi tu tatuaje

-Oh, si. Es lindo. ¿No?

Mostré mi tatuaje, Liam suspiró, no le gustaba.

-Si, muy lindo -dijo

-¿Que tiene de malo?

-Dije que era lindo

-Se que estás mintiendo.

-Angela. No podemos estar en una relación si no lo superas.

-No puedo hacerlo de un día a otro, toma bastante tiempo y sabes tú, más que nadie que yo amo a Harry

-Amabas, lo amabas

-Bien, amaba a Harry. Tiene un lugar muy especial en mi corazón y eso no cambiará. Si tu y yo salimos, tu tambien tendrás un lugar y lo sabes.

-No creo que tu puedas tomar en serio nuestra relación si tu tienes el jodido nombre de tu ex-novio en el brazo

-Si tengo su nombre, eso no es asunto tuyo, es mi brazo, es mi vida y esto representa todo lo que siento por él

-¿Asi que debo morir como él para que te tatúes mi nombre?

-No, Liam y si vas a compararte con él entonces hazlo con las cosas buenas que ha hecho por mi, te recuerdo que cuando yo te quería me invitaste a una obra para conocer a la maldita vieja bruja que dejó a Harry en el hospital, te recuerdo que me dijiste que la querías y te recuerdo que te besaste con ella en mi cara -dije con un hilo de voz mientras unas lágrimas caían

-No nena, no llores, me haces sentir como una mierda.

Su mano se iba a posicionar en mi mejilla para limpiar las lágrimas con su pulgar pero mi mano la alejó.

-¿Cómo crees que me siento yo? -pregunte

Baje de su coche y el llanto se apoderó de mi.