Siempre Tú

31

           

Alex

—La verdad es que no creo que sea necesario Sky. Solo vamos a ir a comer y después me voy a tatuar. ¿Para qué tanta cosa?

Ella negó con la cabeza mirándome por el reflejo del espejo.

—Es como si fuéramos al baile. Nos arreglaremos y eso, solo que nuestro plan es mucho mejor. —susurro regresando su atención al espejo y enchinándose las pestañas.

—¿Pero no será mala onda que nosotras nos vayamos arregladas y Cassie no? ¿No tendríamos que avisarle o algo?

Sky detuvo su ritual de belleza y después se giró hacia mí estirando todo su cuello hacia mi, que estaba sentada en mi cama aún con la toalla de baño en mi cabeza.

—Es cierto, no lo había pensado. Deja le mando un mensaje a Rich.

Asentí levantándome de mi cama y después quitándome mi toalla para volver a secar mi cabello. No entendía por qué Sky quería que nos arregláramos, la verdad no íbamos a hacer algo interesante, así que no le veía el caso.
Pero es muy difícil discutir con ella si ya tiene la idea en mente.
Mire mi teléfono de nuevo para verificar la hora. Las 10 de la mañana. Sky llego aquí a las 9 cuando estaba bañándome.

››¿Hola?

›› Hola Cassie, soy Sky. Le mande mensaje a Rich para pedirle tu número, espero no te moleste. —Susurro ella al teléfono que había puesto la llamada en alta voz.

››Oh Hola Sky, no, no hay ningún problema. ¿Qué pasa?

››Bueno, Alex y yo tenemos la idea de...

—No fue mi idea Sky.

Ella rodo los ojos. ››Bueno tuve la idea de que podríamos arreglarnos hoy, a lo mejor no ponernos un vestido ni eso, pero ponernos bonitas para nuestros chicos como si fuéramos al baile. ¿Qué opinas? ¿Te gusta la idea?

La risa de Cassie sonó en la otra línea.

Yo rodé los ojos.

››Oh claro estaría bien. ¿Y cómo irían vestidas y eso? ¿Se van a planchar el cabello, el maquillaje muy extravagante o...

››Mejor ven a mi casa y aquí nos ponemos de acuerdo. —grite para que pudiera escucharme.

El otro lado de la línea se quedó en silencio. Sky y yo nos miramos sabiendo muy bien el porqué Cassie no quisiera venir.

››Mi prima no está. Se fue desde temprano con Bethany y otra porrista para arreglarse en el salón. Llegaran aquí hasta en la tarde. Para esa hora nosotros ya no estaremos aquí.

El suspiro de ella se escuchó por la bocina del celular de mi rubia amiga.

››Está bien, voy para allá.

››Ok, con cuidado.—aviso Sky con una sonrisa.

››Está bien, las veo en un rato.

El ruidoso bip de la llamada terminó llenando el silencio de mi habitación. Sky sonrió y conecto su teléfono en las bocinas que estaban en mi tocador.

—Esto será increíble. —Pude leer en los labios de Sky, ya que había subido todo el volumen de la música, y por supuesto, una canción de Martin Garrix sonó por toda mi habitación.

-

Las tentonas manos de Sky se encontraban en mi primer cajón de mi tocador. Ella fue la primera en arreglarse, después me maquillo a mí, y ahora Cassie estaba planchándose su largo cabello rubio frente a mi enorme espejo. Yo estaba debatiéndome en si usar el dramático labial que Sky había sacado para mí o ponerme uno más claro, ni siquiera me acuerdo quien me lo había regalado, porque yo no me hubiera comprado algo de ese color.