Siempre Tú

19

Charlie.

Estar con ella de esta manera, otra vez, teniendo su rostro tan cerca del mío hace que la adrenalina corra por todo mi cuerpo. Quiero que responda, quiero saber si puedo tener una oportunidad, sino simplemente dejarlo y que ambos estemos bien, pero el tener sus ojos en los míos hace que ruegue porque ella quiera lo mismo que yo.

Mueve su cabeza para quitar mi agarre de su cara y mi mano cae, sé que necesita analizar todo lo que le dije. Y lo que menos quiero es apresurarla.

—Yo necesito pensar esto Charlie. Hay razones por las que me fui de Dallas y no quiero regresar a ellas tan pronto ¿sabes? No tienes por qué disculparte conmigo por haberme besado, yo no me aparte, así que nos pone a ambos en la misma situación. Necesito pensar muy bien las cosas, y espero que lo entiendas. No quiero que tengamos mal entendidos ¿sí?

Creo que es algo que me esperaba. Pero no sé cómo pueda ser ahora nuestra relación de... ¿amigos?

—¿Entonces que somos Alex?

Suspiro girándose hacia mi casa. —Somos amigos, está bien. Lo que paso hace un rato...

—Y hace cinco días. —la interrumpí.

Soltó una pequeña risa para después mirarme.

—Lo que paso entre nosotros no debió pasar. No pasara de nuevo. Somos amigos, nos seguiremos viendo en la escuela así que hay que terminar esto bien, tenemos amigos en común y clases juntos. No queremos joderlos y jodernos también.

Y ante eso me maldije por mi jodido pensamiento de hombre por lo que acababa de decir.

Yo ya estoy más que jodido Alex.

Asiento, se aleja y observo como abre su puerta y camina dentro. No puedo apartar mis ojos de los suyos y ahora estoy desesperado por saber si en realidad si estamos bien.

Tomo su mano evitando que se aleje, me observa. Mi dedo está en la cima de su mano y la acaricio esperando que ella sienta lo mismo que yo. Escalofríos suben por sus brazos y sonrió internamente al saber que mi toque provoco eso. Sé que está intentando luchar con lo que está sintiendo justo ahora, por eso está evitándome como siempre lo hace después de lo que sucedió en mi casa, pero estoy intentando romper esas barreras que tiene construidas a su alrededor.

Y creo que estoy ganando.

—Está bien, nos veremos luego Alex, y espero poder experimentar otro beso de esos. Creo que la barra de la cocina es nuestro lugar favorito.

El rubor cubre todo su rostro y las comisuras de su boca se elevan poco a poco hasta que tiene una enorme sonrisa en el rostro, intenta ocultarla mordiendo su labio inferior pero falla miserablemente.

Sonrió triunfante.

—No creo que corras con tanta suerte. —susurra, pero sus ojos están observando mis labios.

—Ha podido suceder dos veces. Creo poder llegar a la tercera.

Sigue sonriendo y pone los ojos en blanco.

—Nos vemos el lunes Charlie.

—Absolutamente.

-

A las ocho con treinta estoy acostado en mi cama intentando ver una película. Mike y Rich se han ido hace unas pocas horas y yo intente distraerme con una película, pero me es imposible.

Sé que dije que aceptaría lo que Alex quisiera, pero recordar el beso que nos dimos hace un rato solo intensifica mis ganas de ir y tocar a su puerta solo para poder verla. He pensado mucho lo que me dijo, acerca de que se había ido de Dallas tratando de evitar lo que está sucediendo ahora. Y eso es ¿Qué?