Larry ABCedario. [l.s]

C: Cocinar.

Louis no es un chef, ni siquiera se acerca a una persona promedio cuando se trata de cocinar. Con decir que hasta el cereal se le quema.

¡Sin embargo eso no lo va a detener en ese momento! Es el cumpleaños de su chico y esta decidido a hacerle algo especial con sus propias manos. ¿Y qué mejor que una comida preparada por la persona que más te quiere? Sólo espera no envenenar al rizado y que todo salga bien, así que ¿Qué tan difícil es hacer un pastel? No debe serlo teniendo Youtube.

[...]

Louis descubrió en pocas horas, que es más difícil de lo que esos estúpidos vídeos "Fácil, paso a paso" lo hacen ver. ¿Recuerdan cuando dijo que hasta se le quemaba el cereal? Imaginense un pastel.

Lo pudo salvar antes de que fuera carbón y Santa viniera por el para guardarlo y entregarlo como regalo a los niños malos; aunque Louis pensaba que ni Santa sería tan malo para dárselos. Así de quemado estaba.

Pero no se rendiría ¡Aún podía salvarlo! Sólo debía quitar las partes más feas y agregar algo de crema ¿Eso era muy difícil?

[...]

Si, si que era difícil. El pastel había quedado como una montaña deforme, con desniveles por aquí y por allá de tanta parte quemada que le había quitado. Por suerte estarían solo él y Harry, porque no alcanzaría para más.

La crema también había sido difícil, sobre todo para darle forma y textura... Lo que resultó al primer intento como un estallido cuando agregó la azúcar, teniendo la batidora al máximo ¡Nadie le dijo que no debía estar tan rápida! Para su defensa, pensó que así terminaría antes. Ya saben, "más rápido".

Cuando "terminó" la cocina era un desastre y Tomlinson sólo quería acabar llorando en la esquina de la cocina...

—¡Pero qué paso aquí! —gritó Harry entrando en la cocina y viendo tanto desastre. Era como si un tornado hubiera pasado por allí.

—Sólo quería hacerte algo especial —Louis se levantó del piso, donde había estado sentado viendo el desastre de "pastel" (¿Se le podía decir así?) que había hecho.

—Oh, Lou —dijo Harry, viendo el... pastel y luego la cara de perrito triste que tenía Louis —¿Lo hiciste para mi? —el chico frente a él asintió —Esta... —el rizado dudó, pero paso su dedo por la crema que cubría el postre —...esta sorpresivamente delicioso.

—No tienes que mentir, sé que quedo... mal —Harry quito el  pastel de las manos de Louis y lo puso sobre la mesa.

—Lou —Harry acuno las mejillas del chico de ojos azules —Primero, no es mentira. Segundo, todo lo que hagas para mi, me va a encantar porque lo has hecho tú  —Louis sonrió de lado, porque siempre unas simples palabras de Harry lo hacían sentir mejor de nuevo. El rizado también sonrió y se inclinó un poco para besar la nariz del chico frente a él.

—Feliz cumpleaños, Harry.

—Gracias, Louis.