Capitulo 20

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Es un nuevo día y escucho como los pajaritos cantan, abro un poco los ojos con dificultad por la luz que entra desde el exterior. Me percato de que estoy encima del pecho de Dak Ho, pero está tan cómodo, que me da flojera levantarme y me recuesto nuevamente. Dak Ho hace un movimiento rápido y me envuelve con sus brazos, dejando su mentón en mi frente, ante mi rostro sorprendido, incómodo y sonrojado. Sonrío, cierro nuevamente los ojos y continúo durmiendo. Pasados unos minutos, un ruido extraño, así como de una cámara, nos despierta a Dak Ho y a mí.

-¿Qué haces?-pregunté entreabriendo los ojos.

-Es que se veían tan tiernos que quise sacarles una fotografía-Explicó Ji Hae.

-¿Te han dicho lo extraña que eres?-preguntó Dak Ho frotándose los ojos.

-Sí, todo el tiempo-respondió sonriendo.

-A ver, quiero verla-le pedí.

-Toma mi celular.

-Omo, mira Dak Ho-mostrándole el celular-Ya hicimos la prueba de cámara-bromeé.

-Así es-sonrió alegremente-parecemos novios-bromeó.

-Así es y hacemos muy buena pareja-volví a bromear sonriendo.

De pronto algo apareció en la pantalla pero no entendía nada, pues estaba en hangul y no puedo leerlo. Apreté un par de cosas que aparecían en la pantalla pero no sabía que hacia asique de pronto le pregunté a Ji Hae que decía

-¡Unnie!, acabas de publicar la foto en mis redes sociales-espantada.

Volví mi rostro hacia Dak Ho que se encontraba de lo más relajado riendo a carcajadas.

-¡Chingu, reacciona!-dije tironeándolo-¿qué pensarán tus fans?-preocupada. (*Chingu: amigo)

-Tranquila, después del comercial creerán que fue una sesión fotográfica o ¿qué más da si piensan otra cosa?, ¿Te molesta?-dijo.

-No-dije perpleja.

-Entonces, no te preocupes.

-Prepararé el desayuno-anunció Ji Hae.

Dak Ho y yo nos levantamos de nuestro puesto y, mientras él se fue al baño, yo me fui a cambiar de ropa y arreglarme un poco. Al bajar me percato de que ambos me esperan sentados en la mesa.

-Valla y hasta que resucita la señorita. Por fin te vistes niña-gritó alegre Ji Hae.

-Te ves bien-prosiguió Dak Ho.

-Muchas gracias-sonrojada.

Me senté junto a Dak Ho y comencé con mi muy generoso desayuno.

-¿Tanta comida?-sorprendida.

-Has comido muy mal estos días asique tu solo come. Además no has oído eso de “Desayuna como rey, almuerza como príncipe y cena como mendigo”-me instruyó Ji Hae.

-Que sabia eres-sarcástica y resignada.

Desayunamos tranquilamente, con una muy agradable conversación cuando de pronto tocan el timbre.

-Yo voy-anunció Ji Hae.

Dak Ho y yo continuamos desayunando hasta que, al comedor, ingresa Kim Shi junto a Ji Hae.

-¡Dak Ho!-dijo Kim Shi animado.

-¡Kim Shi, viejo amigo, tanto tiempo sin verte!-levantándose de su lugar para abrazarlo.

-Así es, mucho tiempo-abrazándolo-¡Araceli!, ¡resucitaste!-bromeó caminando en mi dirección.

-Ahá, como ves-respondí resignada.

Magia de un amor fugazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora