Por lo lejos alcanzo a distinguir mi casa. Lo se por mi toque elegante en la pintura, sabia que un café chocolate combinaría perfecto con el color beige. De niño siempre quise tener una casa diferente a las demás, cuando iba caminando por la calle miraba todas las casas y ninguna estaba como yo la desearía tener, en mi imaginación siempre tuve la idea de mi «casa perfecta» y en cuanto se vio la oportunidad de hacer mi casa, no lo dude dos veces y le agregue y decore justo como lo quería. Ahora es una de las casas mas envidiadas en el vecindario.
Cada vez noto mas cerca mi hogar. Estoy ansioso por llegar pues ya extraño a mi único e infaltable compañero «Darky» un perro salchicha de color café. Lamentablemente no puedo llevar a Darky conmigo al trabajo, así que lo dejo a cargo de mi asistente personal: Yerali.
Confió demasiado en ella, obviamente estoy en contra del maltrato animal, y no dejaría a mi mejor amigo con cualquier persona, a Yerali la conozco hace ya mucho tiempo.
Saco las llaves de mi bolsillo y abro la puerta, inmediatamente Darky viene a darme la bienvenida a casa con unos ladridos mimosos mientras su cola se menea de lado a lado con alegría.–¡Hola Darky! ¿Que tal te la has pasado muchacho?–digo mientras me agacho a acariciar su suave cabeza– ¡me alegra que estés bien!.
Tomo a mi salchichita en mis brazos, mientras me adentro al interior de la casa.
–¿Hola?, Buenas tardes Yerali. ¿Estas aquí?– saludo mientras miro en todas las direcciones para encontrarla– ¡Yerali!– repito sin escuchar respuesta–.
Escucho risas en el segundo piso, al percatarme bajo a Darky al piso, no dudo dos veces y subo con pasos rápidos pero silenciosos.
–¿¡Harry!?–escucho que dicen mi nombre desde el otro lado de la tercer puerta del pasillo, es decir donde esta mi despacho.
Meto mi mano por dentro de mi saco, donde tengo un arma y enseguida abro la puerta de golpe.
–¿¡Eva!?, ¿Que haces aquí? – digo con asombro sacando mi mano de el saco– .
–tengo miedo, pensaba en llamarte, porque recibí una llamada diciendo que te tenían aquí encerrado, me dieron esta dirección y me dijeron que aquí en la tercer puerta del pasillo te tenían encerrado, después comenzaron a decirme que te habían agarrado por estar investigando cosas que no debias.– la miro a los ojos directamente sin saber que contestar–.
–vale, ¿tienes el número?
–No, después de colgar la llamada, el número ya no apareció en el registro.
–mmmm, ¿y Yerali?
–no se, ni la conozco, cuando llegue la puerta estaba entreabierta y no había nadie. Harry, lo que te digo es verdad, tenia miedo de que te hicieran daño.–responde mientras se acerca a abrazarme–.
Correspondo a su abrazo con confusión, Yerali nunca sale sin avisarme antes– tranquila, todo esta bien, yo estoy bien– contesto con una voz suave.
Aun había algo que no cuadraba, y eran las risas que escuche en este lugar hace rato, si Eva estaba asustada ¿porque reiría? O posiblemente solo fue parte de otro juego de mi imaginación.
Me aparto de Eva y tomo mi celular, en mis contactos busco a Yerali y le doy a marcar. El teléfono esta sonando en la planta de abajo. Yerali olvido su celular, no se donde diablos esta y no hay manera de contactarla.
Bajamos a la segunda planta, el celular de Yerali esta en un sofá del living, lo tomo y lo pongo en la mesa de decoración con el ceño fruncido. Mi salchicha sube a uno de los sofás y lanza un ladrido para llamar mi atención, al ver que no respondo se pone a lado de mi y recarga su cabeza en mi pierna, como acto-reflejo comienzo a rascarle su cabecita, aun algo atónito por lo sucedido.
Eva se sienta por el otro lado mio y me observa con cuidado
–Creo que debería irme, por dios, que vergüenzas te hago pasar. Creo que me precipite mucho con o de la llamada– sus mejillas se tornan de un suave color rojo–.
–No te preocupes Eva, hubiera echo lo mismo si me hubieran hablado a mi. ¿Quieres que te acompañe?.
Mentira, yo hubiera utilizado un poquito mas mis neuronas y primero le hubiera marcado a ella.
–No, debo pasar a comprar un par de cosas, mejor luego salimos los dos y ammm....el perro.
Me levanto para despedirme de ella, ella se acerca y me abraza para luego posar un dulce y tierno beso en mis labios.
–¡adios Harry!.
–Nos vemos Eva, me avisas cuando llegues– le sonrió mientras veo como se aleja con paso apresurado.
Para lo poco que llevamos conociéndonos confió demasiado en ella, por lo que no me preocupa que entre a mi casa. Quien sabe, posiblemente si el destino lo quiere, también sea su casa en un futuro.
Me volteo a ver a Darky, quien al notar que lo estoy mirando comienza a mover su cola.
Levanto el maletín que deje tirado en el piso al entrar, aquí es donde tengo todo; el diario, lo de Drake y de mas. Darky, al verme agachado comienza a lamer mi cara con entusiasmo, me volteo en su dirección y lo abrazo, luego le agarro su larga y delgada trompa con alegría.
–te extrañe muchacho, pero por ahora debo ducharme y ¿que te parece si después damos un paseo por el vecindario?.
Como si me entendiera comienza a mover la cola y dar vueltecitas.
Y así fue como paso, después de dar un largo y placentero paseo que nos sirvió de distracción a ambos, llegamos agotados a la casa por lo que nos recostamos en el sofa-cama y nos quedamos dormidos juntos.
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¿y ustedes son o no son animalistas?
Yo personalmente amo a todos los animales ♥…
Gracias por leer, espero y les este gustando la historia.Besitos :D.
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Ultima Ilusión (Diario De Una Adolescente) #PGP2018
Misterio / SuspensoSoy detective, me llamo Harry Brown, llevo mas de 6 años de experiencia. Hasta que encontré un caso en el cual, una adolescente estaba muerta en su habitación, en sus manos sujetaba lo que parecía ser su diario. Después de inspeccionar a la chica de...