Capítulo I- mi segundo amor.

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Te lo juro que aunque duela

Y se desangren hoy mis venas.

Te voy a olvidar

Te voy a olvidar - Malú

Voy a explicaros un poco sobre mi segundo amor.

A mediados de 4º curso empecé a sentir algo por Nico. Era la segunda vez que me enamoraba y la verdad, es que, no me hacía mucha gracia. La primera fue hace tanto tiempo que no hace falta explicarla. En fin, Nico era un amigo de clase con quien tenía algo de trato, pero no mucho, simplemente el justo y necesario. Habíamos tenido nuestras charlas, pero normalmente solo nos decíamos un 'hola, ¿cómo va?' y poco más, pero era tan amable siempre, que, no sé, me enamoré como una tonta. Tenía que acercarme a él de alguna forma y lo único que se me ocurrió, fue pedirle su número de teléfono a mi amiga Gyal, sabía que ella lo tendría, seguro.

Gyal era una buena amiga desde hacía unos meses. Habíamos tratado alguna vez en primero de la ESO, pero no mucho, hasta que en este curso al coincidir en algunas clases, empezamos a tratar más y, desde entonces, somos grandes amigas. La verdad es que ella también me ha ayudado mucho con todos mis problemas, con Nico, con una fase de mi vida de la cual no me gusta hablar y muchas más, y eso es lo que me gusta de ella, y es que, siempre que puede está ahí para ayudarme y muchas veces no sé qué haría sin ella.

Abrí por Whatsapp a Gyal y le puse una excusa muy tonta, que sinceramente, aún me pregunto cómo se la tragó, para que me diese su número. Pero ahí estaba yo, con el número de Nico y unas ganas locas de hablarle, pero a la vez temía hacerlo porque no sabía que iba a ponerle. Le escribí un simple 'Hola, soy Alice, Gyal me ha pasado tu número'. Respiré profundo, cerré los ojos, y le di a la tecla de enviar. ¡Lo había hecho! Aun no podía creerlo. Le había enviado un mensaje, y no sabía si reír, llorar o saltar. Dejé el móvil en la mesa y fui a hacer mis cosas, pero cuando escuche el tono de notificación corrí a por el móvil. Él había puesto un simple 'hola', pero me alegró igualmente, estuvimos hablando un rato y esos minutos fueron una delicia para mí.

Con el paso del tiempo nuestra amistad crecía, pero no como a mí me gustaría, así que después de unos meses decidí que tenía que olvidarle. No me gustaba ser la niña tonta que era, siempre poniéndose nerviosa cuando estaba él o cuando hablábamos, incluso si estaba él solo en clase antes de que empezase y a mí me tocaba en ella, salía fuera para no estar a solas con él. Pensaba que se daría cuenta de cómo actuaba, que ingenua era, no se enteraba de nada y solo me hacía daño por tenerlo tan cerca, así que tomé una decisión, me olvidaría de él, se lo comenté a Gyal y a Cassie, para tener alguna opinión.

Cassie era otra de mis grandes amigas. En realidad era más que eso, era como una hermana. Nos conocíamos desde hacía algo más de un año, pero conocía todo lo que me ocurría y siempre me ayudaba con todo. Era la única que sabía todo lo de mi vida, y al igual que me pasaba con Gyal, sin ella no sé qué haría con mi vida. Ellas dos eran las que más me apoyaban con mis cosas.

Cassie me dijo que si era lo que yo creía mejor lo hiciese, pero en cambio Gyal dijo que no tenía porque, pero que me ayudaría con lo que finalmente decidiese. Coincidió que me iba de fin de semana a un balneario y decidí desconectar el móvil, no pensaba hablar ni pensar en él, tenía que volver a ser la Alice que no sé preocupaba por si le vería bien o si sería lo suficiente amable como para caerle bien. Y así lo hice y creí que lo había conseguido, pero no fue así. Al volver del viaje nos equivocamos de camino y nos perdimos en un pueblecito en medio de la montaña, y se llamaba como él. Ahí me di cuenta, que no había conseguido nada, simplemente había intentado autoconvencerme, pero, si me hubiese olvidado, al leer el nombre del pueblo, no hubiese pensado en él, y eso fue lo que pasó, al leerlo me entraron unas ganas irrefutables de hablarle, pero no lo hice, tenía que ser fuerte.

Fue pasando el tiempo y en clases hablaba con él, en el intermedio entre clases últimamente había cogido la costumbre de hacerme cosquillas para sonsacarme cosas o simplemente por molestarme y es que él sabía que me fastidia muchísimo que me hagan cosquillas y con tal de que parase diría o haría lo que fuese. Yo seguía queriendo tener una simple amistad con él. Cuando volvía a clases después de esos intermedios, Gyal siempre me decía que me veía más feliz y no entendía por qué quería desenamorarme, pero me apoyaba igualmente, y yo, se lo agradecía.

Llegó el último día de instituto y con ello, la última vez que nos veríamos todos. Cada uno seguiría su camino, unos iríamos a bachillerato, otros cogerían un ciclo, y otros simplemente, dejarían de estudiar.

Yo había escogido ir a bachillerato, mientras que Nico había escogido un ciclo. Por una parte me alegraba porque podría conseguir mi propuesta de olvidarme, pero por otro lado, me entristecía dejar de verle. Si una cosa tenía clara era que no volvería a verlo, quizás algún día por la calle, o en momentos espontáneos, pero nada más.

Gyal había empezado a salir con un chico. Antes eran grandes amigos y ahora habían intentado mantener una relación. Se veían muy felices y eso me alegraba. Ella estaba empeñada en quedar algún día los cuatro, ella, su pareja, Nico y yo. Yo no quería, pero al final le dije que sí aunque sabía que eso no ocurriría.

Me arreglé más de lo normal porque teníamos la despedida y fui al instituto.

Cuando tuvimos que bajar a la sala de actos lo vi de lejos y recé porque no me tocase sentarme cerca  suyo pero no sirvió de nada, y es que, me tocó sentarme a su lado, cosa que por una parte me hacía ilusión ya que podría pasar este último día junto a él, pero por la otra, eso no me hacía bien.

Y así pasó el día, hicimos la despedida y cuando tocó irse a casa una pena se apoderó de mí. Todo llegaba a su fin, pero ocurrió algo que no me esperaba, mientras esperaba a unas compañeras para irnos a casa, Nico estaba a mi lado, y de pronto me abrazó y me dijo ''¿Sabes, Alice? Te voy a echar de menos, ahora no tendré a quien chinchar con las cosquillas'' me quedé petrificada, ¡me acaba de decir que me echaría de menos! Como pude le contesté que yo también le echaría en falta, pero que al menos teníamos el Whatsapp.

Finalmente conseguí olvidarme de él. Fue difícil, ya que tardé muchísimo más de lo que yo había esperado, pero todo cuesta en esta vida. Decidí no hablarle durante un tiempo y no dejaba que Cassie ni Gyal me hablasen de él. Si quería conseguirlo tenía que desconectar del todo, pero en primero tenía que bajar mucho al edificio de la ESO y allí era donde Nico hacía su ciclo y me lo encontraba muchísimas semanas, así que hasta finales de primero no lo conseguí. Ahora es un buen amigo, y la verdad es que soy muchísimo más feliz así. Ahora puedo hablar con él sin preocuparme por el típico, 'qué pensara de mí' o 'qué dirá si le digo esto'. Sabe mis cosas más íntimas, aunque la verdad es que hay veces que nuestras conversaciones me dan miedo, y no sé cómo acabamos hablando de temas un poco subidos de tono, pero en el fondo, me divierto mucho.

Y diréis... ¿y qué pasa con Javier?

Pues me empecé a fijar en Javier ya por aquel entonces, pero sólo pensaba que era un hombre bastante guapo. Nadie lo sabía, excepto mi amiga Paula, pero en la excursión de final de curso, mi amiga Bianca se enteró porque no me molestaba en ocultarlo. Suficiente tenía con ocultar lo de Nico. A Bianca no pareció importarle mucho que me fijase en un hombre 20 años mayor que yo y se lo agradezco.

Bianca y Paula son dos amigas que saben algunas cosillas mías. Por aquel entonces aun no sabían nada, al cabo de unos meses empezamos a ser más amigas. En aquellos tiempos solo hablábamos un poco de las típicas cosas, pero ahora nuestra amistad ha crecido, y podría decir que las tres juntas somos un pelín peligrosas.

En fin...con Javier, en aquel momento, no sentía nada, todavía. Mi corazón ya estaba ocupado por otra persona a la que estaba intentando desalojar. 

Aquí tenéis el primer capítulo de mi historia, espero que os haya gustado y queráis continuar leyéndola, no tengo mucho más que decir simplemente daros las gracias a aquellas personas que se agreguen la historia a su biblioteca y nada más, simplemente decir que agradecería que votaseis, comentaseis y compartieses la historia con vuestros amigos, me encantaría saber vuestra opinión de la historia, un besazo y hasta el próximo capitulo

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