•IBALLA GONZÁLEZ•
Me visto sin prisas y bajo la cocina, seguidamente cojo una manzana para el camino.-¿Ya te vas? -pregunta mi padre
-Mucha suerte -dice mi madre-
Me despido de cada uno de ellos con un abrazo y justo al salir de casa, allí está él, mi Jesús Oviedo. Me acerco, me agarra de la cintura y nos besamos apasionadamente.
-Hola reina -muerde mi labio
-Buenos días amor -sonríe
-¿Vamos? -asiento
Me abre la puerta del coche y entro, la cierra, y se sube por el lado del conductor. Nos dirigimos a la Facultad, estaciona en el aparcamiento y me acompaña a recoger las notas.
-Señorita González, que gusto verla -articula el profesor
-Buenos días -digo con una amplia sonrisa
-Antes de darle las notas me gustaría hacer hincapié en su gran esfuerzo, por tanto, he de decir que merece las notas que tiene y espero que el próximo año vaya a mejor -sonrío, extiende su mano y las estrechamos- mi más sincera enhorabuena
Me da las notas y comienzo a gritar de la emoción.
-Será un placer tenerla en mi clase el próximo año -dice orgulloso
-Muchísimas gracias -sonrío emocionada- sin usted no habría sido posible
-El empeño lo ha puesto usted jovencita, no yo - sonríe
Tras hablar unos minutos más, me despido de él agradeciéndole que haya realizado correctamente su trabajo, y junto a Jesús nos dirigimos al aparcamiento.
-Antes de nada, enhorabuena princesa - une nuestros labios-Gracias -musito tímidamente
-Quiero que cierres los ojos y no los abras hasta que te avise -asiento con una amplia sonrisa
Escucho el abrir y cerrar de la puerta del coche. Su mano sujeta la mía y la acaricia dulcemente. Sus besos recorren mi rostro y pasan delicadamente a mi cuello e inconscientemente me muerdo el labio.
-Ya puedes abrirlos -me besa
Veo un gran ramo de rosas rojas y me tapo la boca como sinónimo de sorpresa y emoción. Veo en la esquina una pequeña carta y la cojo abriéndola mientras sonrío.
-Siempre supe que el amor de mi vida ibas a ser tú. Estoy muy orgulloso de ti y quiero darte lo que nadie te ha dado, amor, cariño y comprensión. Poor eso quiero pedirte que me concedas una noche, solamente una para demostrarte que valgo la pena, ¿aceptas? Te quiere, Jesús Oviedo -leo en voz alta
-¿Aceptas? -sonreímos al unísono
Se muerde el labio inferior mostrando su nerviosismo y finalmente asiento.
-Mi pequeña -une nuestros lablos en un cálido beso
Siento todas las miradas puestas en nosotros, pero no me importa, con él no tengo miedo, me siento protegida. Seguidamente nos subimos al coche y me lleva casa.
Al entrar me sorprendo al ver a Rocío, Daniel, mis padres y a una mujer a la que ni siquiera conozco. Todos me dan la enhorabuena por las notas incluyendo esa mujer, ¿quién será?
Se acerca a mí y me da dos besos, hago lo mismo cordialmente y ella sonríe. Me tensa desconocer su identidad, ¿por qué tanto misterio?
Miro a mi alrededor y no veo a ninguno de los gemelos, ¿qué ocurre? De repente, apagan las luces dejando la habitación totalmente a oscuras. Veo una sombra bajar la escalera y una balada comienza a sonar.
Escucho una voz un tanto conocida y mis ojos se llenan de lágrimas, ahí está él, mi Jesús, un día más pero esta vez junto a su gemelo.
-Sabes que soy yo, el que cura las heridas de tu corazón, el que seca cada lágrima, soy la luz de tu vida, el tic-tac de tu reloj -cantan al unísono y las lágrimas descienden por mis mejillas
Se acerca a mí, sujeta mi mano y se arrodila ante mí mientras canta pero oculto mi rostro de la timidez.
-Pequeña, ¿aceptarías irte de vacaciones con este loco enamorado a un lugar inigualable en el que sólo estemos tú y yo? -me quedo perpleja
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Dulce introducción al caos. [Jesús Oviedo]
Short Story¿Eres un/a apasionado/a de las historias de amor? ¿Te gustaría descubrir el transcurso abarrotado de la historia de Jesús Oviedo e Iballa González? ¿Te atreves a sumergirte en una historia inigualable con numerosos detalles? Pues bien, comencemos...✏