Capítulo 15:

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No me lo podía creer, estaba tan emocionada que cuando lo vi de rodillas mirándome con una sonrisa de oreja a oreja sosteniendo una pequeña caja abierta con un anillo pequeño de oro blanco y diamantes casi me muero.
-Este es el factor sorpresa-dijo- era de mi madre.
-Lo recuerdo bien-dije mirándole- pero no entiendo si vives en EEUU como vino tan rápido.
-Tenía la esperanza de verte en cualquier ciudad y por fin te encontré- me dijo y yo sonreí- aun no has respondido a mi pregunta.
-Claro que me casaré contigo- dije sonriendo mientras le miro y él me puso el anillo en el dedo anular con una sonrisa.
-Me moriría por ti-dijo con una pequeña sonrisa.
-Y yo por ti-admití mirándole mientras juntaba sus labios con los míos.
Un ruido nos sacó de nuestro extasis, el sonido de mi teléfono. Al descorgarlo una voz nos hizo reirnos.
-Casi destrozas la sorpresa enana.
- No me gusta que me oculten cosas aunque sea algo bueno- dije con una pequeña sonrisa-pero gracias rev.
Un leve roce en mi cadera y varios besos en mi cuello sirvieron para que diera un pequeño gemido y la risotada de Jimmy no se hizo esperar mucho.
-Te corté el royo ¿verdad?-dijo sin dejar de reirse.
-Si tío-dijo Matt cogiendome el teléfono de las manos-ahora voy a darle a mi prometida lo que necesita.
Acto seguido me acarició todo el torso y me besó con dulzura pero, a la vez con pasión mientras me desvestía.
Mis manos no se hicieron de rogar y empecé a desnudarlo acariciando su plano abdomen lleno de tatuajes.
-Eres mi vida-dijo con una sonrisa.
-Te amo nene-dije mirándole y volví a besarlo con desesperación.
-Vamos a la habitación-dijo y me cogió en brazos.
Primero Jimmy y ahora él, la cuestión estaba en no andar.
Cuando llegamos a la habitación me dejó en la cama y cogió una botella de aceite corporal.
-Date la vuelta-susurró provocativo mientras se echaba aceite en las manos y empezaba a darme un pequeño masaje por la espalda-necesito que la madre de mi bebe esté bien-dijo y me dio un par de besitos por el cuello mientras yo sucumbía a la tentación de pegarme a él con necesidad.
-Aun no se sabe nada-dije mirándole mientras notaba como me daba levemente la vuelta y me miraba a los ojos.
-Cierto, pero yo cuento con un positivo-dijo besándome con desesperación acariciándome la cadera suavemente.
Me tenía a su merced y, la verdad es que eso me encantaba.
Le terminé de desnudar y él me miró con dulzura.
-Te amo-dijo con una sonrisa-he esperando 10 putos años para poder mirarte de nuevo y esta vez no te dejaré ir.
-Ni yo, antes muerta que dejarte-dije besándolo y nos fundimos en uno mientras nuestros besos se bebían nuestros gemidos. Cuando llegamos los dos al climax nos sonreímos y se apartó de encima mio poniendose a mi lado para descansar un poco antes de irnos.
-La botella de champange no la hemos usado-dije.
-Tú no vas a beber, ya lo tengo decidido-dijo con una sonrisa.
-Entonces tú tampoco-dije con una sonrisa mientras le daba un pequeño besito en la punta de la nariz.
-Vamos que hemos quedado con estos para cenar y es tardísimo-dijo mirándome.

Mi mejor amigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora