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Hoy me tocaba pelea en el club, lo malo esque era otra vez contra la misma... Contra Elena, y no me malinterpretéis, me encantaba pasar tiempo con Elena pero quería nuevos retos la verdad... Ya empezaba a ganarle aveces, no estaba a su nivel pero casi. Me prepare la bolsa con los guantes, la vendas y el protector bocal y salí corriendo literalmente para el gimnasio.

Al llegar lo primero que vi fue a Elena pegandole a un saco, vaya velocidad tenia con los puños. Me fui a cambiar, me puse mi camiseta de deporte, mis pantalones cortos, las vendas y los guantes y salí preparado para la pelea. Una vez allí, Elena me invitó a subir al ring, estábamos cada uno en su esquina. Sonó la campana y nos fuimos acercando lentamente, ella fue la primera en dar un golpe directo, me dio en la mandíbula, si no llevará el protector vocal me habría roto las muelas, fui rápido y le di un puñetazo con todas mis fuerzas en la nariz, quedo noqueada de un solo golpe peri yo no estaba feliz por haberle ganado. Me quite los guantes lo más rápido que pude y me agache a ver como estaba, estaba bien por suerte, me sentía super mal...

-Tu idiota, te as pasado - dijo cabreada.

- Tienes razón, lo siento de verdad- le dije preocupado

-Capullo - me respondió con una risilla

- Si quieres te doy otro beso haber si se te pasa - dije con risas
-Eres un puto idiota, te odio asqueroso. No te hablo hasta que no me des la revancha.

-Va relaja pequeña, ahora la hacemos - dije con risas

- ¿Pequeña? A mi cursiladas no eh chulo- me dijo con risas, yo en ese momento me sentía super avergonzado pero me reí para quitarle importancia.

Los dos nos levantemos rápido y nos fuimos a nuestro rincón, esta vez ella iba enserio, tardó medio minuto en dejarme la cara como un mapa, esta chica es increíble pensé. Yo estaba tan hecho polvo que no podía mantenerme alzado, me tenía que aguantar ella. En el momento en el que fue a cojerme Elena aproveche para abrazarle y darle un beso en el cuello, se noto que le gusto en la cara.

-!¿Que haces?!- me dijo toda roja

-Darte tu premio por ganar - dije entre risas, ella estaba super roja, parecía un tomate

-Puto chulo - me dio un golpe en el hombro.

Los dos nos fuimos a duchar y cuando salimos cada uno se fue a su casa. Al llegar a mi casa vi que no había nadie,me tocaba hacerme a mi la cena, una pena porque no tenia ni idea de cocinar así que opte por pedir un kebab aunque no me gustarán mucho... Después de cenar me senté, vi una película y me fui en la cama y me pare a pensar... Me gustaba Elena, me gustaba todo de ella, no era la típica chica. La típica chica no pasaría un gimnasio con objetivos serios en su vida, la típica chica no me hacía sentir así, ella simplemente era perfecta para mi, me estaba enamorando de quien no debía, debía distanciarme de ella. No quería perder mi relación con Josh por ella...

Amor Con Una Pizca De Rebeldía. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora