Laura

Guardian

- Gracias por la copa, tenía sed.

- De nada!-Sonreí como una tonta.

Copas en mano fuimos hacia una mesa alta que había en una esquina, esa típica mesa que las personas utilizan de perchero. pero para nuestra suerte no había mas que un par de vasos en ella.

Hablamos sobre nuestras vidas un rato, resulta que ella es policía. Nunca me lo hubiese imaginado, con lo dulce que se le ve.

Se notaba que había atracción entre nosotras y después de unas cuantas copas mas nos pusimos a bailar, sus movimientos me provocaban devorarla, coqueteaba con migo y yo ya estaba desesperada.

Me acerque mas a ella para besarla y en ese momento apareció un chico de no más de 19 años.

- ¿Donde estabas Elia?¿Estas borracha?-Elia se puso a hablar con el, yo me había apartado un poco.

Después de una especie de discusión entre ellos ella volvió a mi lado.

- Lo siento Laura..me tengo que ir, pero quisiera que mañana quedásemos, este es mi numero.-Me tendió un papel y me dio un beso en la mejilla.

Ahí  parada me quede hasta que la perdí de vista,
uff que mujer.. ya iba borracha así que fui a por agua.

- Agua ¡¡por favor!!

- ¿Ya te as quedado sola?

- Lamentablemente si.

- Es bonita Elia..- Asenti con la cabeza, realmente bonita.-¿ Te gusta?

Hasta el momento tenia la cara entre mis manos, pero por su ultima pregunta me izo levantar mi cabeza..

- Tengo claro que contra esa chica no puedo competir pero si me necesitas estaré aquí..

- ...No es que seas feo ni nada..

- Pero...

- No busco una relación ni mucho menos..

- No buscas una relación o ¿Lo que no buscas en un tío?- Este chico parece mi subconsciente, me cuestiona cada cosa que digo..

- La verdad, no lo se..me da que me voy a dormirla..

- ¿Has venido en coche?

- No, en taxi..

- Muy bien, no es bueno conducir borracho..- Me despedí de el y me fui, al salir ya tenia un taxi en la puerta el cual había llamado Pablo.

Llegue a casa y nada mas meter la llave en la cerradura el pequeño cachorro comenzó a ladrar.

- Hola pequeño, soy yo..

Llegue al sofá y ahí me quede , mi cabeza daba vueltas y mi mente no quería desconectar. Mantuve una charla con migo misma..

- ¿Que te pasa?¿ Ya te as olvidado de lo que es sufrir? Liate con ella si quieres pero no te enamores, eso nunca, nunca... y así discutiendo con migo misma me dormí..

A mi lado sentía algo calentito que me invitaba a acurrucarme y seguir durmiendo pero savia que seria tarde y decidí levantarme.

Bueno mas que nada lo intente porque nada mas abrir los ojos la cabeza casi me estalla, sin duda la noche anterior me pase bebiendo; El cachorro estaba a mi lado mirándome.

- Ya es hora de levantarse..

Cuando mi cuerpo decidió coordinar en los movimientos pude ponerme de pie, decidí tomarme lo que quedaba de día tranquilamente.

El pequeño cachorro me daba compañía, y me estaba encariñando con el.

- Creo que te llamare Guardián, ¿Tu seras el guardián de mi vida te gusta?- Guardián comenzó  a saltar así que lo tome por un si.

Ya por la noche abrí mi libreta y escribí un rato.

Los días siguientes a la operación todo el mundo fue a mi casa a verme.

Bea no se separaba de mi lado y mi madre estaba mas cariñosa que nunca.
uno de esos días fue a verme Alex junto a Lidia.

- ¿Cómo los llevas?

- Mucho mejor Alex, me están cuidando bien..

- ¿Pero ya puedes follar?

- Lidia por favor...- Ella le pego una colleja a Alex.

- Eee... no te pases que aun estoy creciendo.- Todos nos reímos, siempre sabia como animarnos o mas bien sacarnos de quicio.

Les conté que le había dado una carta a mi madre en la cual le explicaba que tenia novia.

- ¿Enserio?- Pregunto Lidia.

- Ya te digo, ahora mi tía no para de preguntarme quien es esa chica...

- Ostia, diselo así no tendréis que esconderos mas..- Alex siempre diciendo tonterías.

- Tu estas loco o que, como se lo vamos a decir. Si se entera no nos dejara dormir juntas y además se montaría una grande..

-Eso, prefiero que no lo sepan...- Me apoyó Bea.