Laura

¿Nos casamos?

-------Narra Laura--------

- ¿Entonces le salvaste la vida?

- Solo lo protegí.

-Y que hay de tus padres, nunca me has contado sobre ellos..

- Ellos se conocieron muy jóvenes y se enamoraron casi a primera vista, pero mis abuelos son de diferentes clases sociales y no se llevan bien.

El día en el que hicieron publico sus planes para casarse se armo una buena, mi abuelo paterno amenazo a mi padre  con  desheredarlo si la boda se llevaba a cabo y por el otro lado mi abuelo materno la amenazo con el destierro de la familia.

- ¿y lo hicieron?

- Mas o menos..mi padre esta desheredado pero nunca mi abuelo le a enseñado ningún papel que lo corrobore..y mi madre sigue siendo una mas en la familia, pero eso no paso hasta que nací yo.

- ¿y eso?

- Por mas discusiones y diferencias que tengas con tus hijos no puedes ignorar a un bebe que no tiene culpa de nada y además lleva tu sangre.

- Entonces fuistes la mediadora po así llamarlo.

- Supongo que algo así..-Las dos guardamos silencio pero era agradable, estábamos cómodas.

Nunca pensé que me podría sentir tan bien con otra mujer que no fuese Bea. Me dolía pensar aun en ella y aun mas cuando sin querer la comparaba con Elia, no soy consciente muchas veces de que eso me destruye.

Nos quedamos dormidas en esa posición , el miedo a movernos y que todo se desvaneciera como un sueño era latente.

Al otro día le enseñe algunos lugares bonitos que le quedaban por conocer, sabia que ya llegaba el final, la hermosa burbuja en la que estaba viviendo se explotaría y la realidad me estaba esperando en forma de avión pero no fue hasta el domingo cuando me di cuenta de un pequeño detalle.

Siempre fui partidaria de vivir la vida sin necesidad de esclavizarme por poseer mas dinero o vienes y para ser sinceros yo tenia todo lo que deseaba, hasta un amor que cada día se hacia mas fuerte.

Fue ahí cuando lo decidí, dejaría la aerolínea y practicaría la mejor profesión..ser feliz..y me lo podía permitir durante un tiempo ya que el dinero no me faltaba.

El lunes llego y volvimos a casa, después de hablar con la empresa quede oficialmente libre.

Cuando se lo conté a mis amigas se alegraron mucho de poder tenerme allí.

La semana paso volando y ya el sábado amanecía, Elia apareció en casa con el desayuno.

- ¿No tendrías que estar trabajando?

- Para ver a mi princesa me puedo escapar, lo dice el manual.- Después de besarme se quedo en silencio.

- ¿Pasa algo?

- Yo quería preguntarte una cosa...

- Pregunta..-Estaba nerviosa, le sudaban las manos y empezaba a tartamudear, esto ya era grabe.

- Me estas asustando.- Me miro fijamente, tomo mi mano y abrió la boca después de cerrarla barias veces.

- Se que es muy precipitado pero.... ¿Te quieres casar con migo?- Me tendió una cajita de terciopelo rojo que en su interior descansaban un par de anillos idénticos de plata.

Nunca pensé en casarme, no entraba en mis planes por eso me pillo de sorpresa.

- Si quiero..-Se tiro encima mía y nos abrazamos, era una locura, apenas nos conocemos y nos vamos a casar.

Nos pusimos a llorar como tontas mientras permanecíamos unidas.

Los preparativos comenzaron esa misma tarde.

- ¿Quien serán los padrinos?

- Bueno yo no tengo a mis padres, lo mas cercano a familia que tengo son las chicas y Pablo.

- Pues esta decidido...madrina Lidia y padrino Rafa.

- ¿tu padre no querrá ser el padrino?

- El acepta que este con una mujer pero dice que sera una etapa y no se a tomado bien lo de la boda.

- Tranquila ya entrara en razón.

- Si te parece organizamos una cena mañana aquí para dar la noticia.

- Me parece perfecto.

Hablamos un rato mas sobre como nos gustaría que fuera todo.

Los chicos se tomaron la noticia de la cena con curiosidad.

Adorne mi pequeño patio con luces y algunas guirnaldas, la gran mesa que trajo Elia la coloque en medio y ya estaba todo listo.

Prepare pollo asado y poco a poco fueron llegando nuestros amigos.

- ¿Que a pasado?-Me dijo Lidia nada mas cruzar la puerta con el pequeño en brazos.

- Ya lo sabrás, no seas impaciente..

- Seguro que ya habéis.....se te nota en la cara.- Yo me reí y el pequeño Alberto nos miraba sin entender.

Me senté en la punta de la mesa, a mi derecha estaba Lidia seguida de Rocío y el pequeño Alberto; a mi izquierda estaba Elia y Rafa seguido de Pablo.

Elia apretó mi mano y decidí soltarlo ya.

- Bueno primero que nada gracias por venir, si estáis aquí es porque los considero mi familia.
Como ya sabéis Elia y yo estamos juntas y a pesar de conocernos hace poco mas de unas semanas nos hemos dado cuenta de que nos amamos por ello en breve habrá boda.- Quedo todo en silencio y derrepente Pablo empezó a aplaudir consiguiendo que todos salieran de la ensoñación en la que se habían sumido y lo acompañaran.