A DE ANUNCIO

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(Antes de empezar,  me gustaría aclarar una cosa.  He visto varios fanfics sobre los Killjoys en los que aparecen escenas muy similares a las que suceden en esta novela. Y no me importa,  me encanta que la gente se inspire con mis escritos.  Pero tened en cuenta que todo lo que vais a leer -salvo los personajes originales de MCR- es totalmente original,  y que no he copiado a nadie. 

Un abrazo muy ruidoso.)

***

Desierto.

En pleno verano.

Es evidente que hace calor. Mucho calor.

Demasiado para hacer... cualquier cosa.

Respirar ya cuesta bastante de por sí.

Es por eso por lo que en este instante Jet Star y Fun Ghoul se encuentren tumbados sobre el montón de ropa por lavar -el cual aumenta cada semana un poco más-, mientras miran exhaustos la diminuta pantalla de una antigua televisión en blanco y negro.

"¿Qué coño hacéis viendo la televisión?" Espeta un sorprendido Party Poison en cuanto entra en el refugio.

Jet y Ghoul giran sus cabezas, para luego posarlas de nuevo sobre la tintineante pantalla, absorbiendo sus deliciosos rayos radiactivos. Ahora está sonando un anuncio de BL/ind sobre unas pastillas que te permiten mantenerte despierto más de veinticuatro horas seguidas.

Anuncios: eso es casi todo lo que se encuentra en los medios de comunicación.

"Hace mucho calor." Alega Ghoul en su defensa.

"¿Y qué?" Inquiere el pelirrojo cruzándose de brazos.

"No hay nada interesante que hacer." Añade el del afro, sin ganas de vivir.

"¿Qué me dices de comer algo?"

Jet Star señala un montón de latas vacías que reposan sobre una de las mesas.

"Hecho."

"Bien, ¿y practicar la puntería, o algo?"

"Imposible. Se nos agotaron las baterías de las pistolas hará unas dos horas." Afirma Ghoul con aires satisfechos.

"Kobra ha ido a por más." Explica Jet con indiferencia. "Bueno, en realidad lo hemos obligado, ya sabes..."

"¡Pues me da igual! ¡Levantad el culo y haced lo que sea, panda de vagos!"

"Vamos, no te pongas así, Poison. Que no eres nuestra madre."

"Mira, si te unes, te dejo que pongas el canal que quieras." Intenta tentarlo el de verde, tendiéndole el mando a distancia que él mismo ha diseñado.

Poison cruza los brazos a la altura del pecho, mirándoles fijamente, exhausto. Al final decide rendirse a la tentación y aceptar la petición de Ghoul con un sonoro suspiro. La verdad es que un poco de sugestión mental no le vendría mal...

Empieza a mirar en todos los canales en busca de algún programa interesante, pero sólo encuentra de dos tipos; o anuncios, o programas que en el fondo son anuncios. ¿Y la gente es capaz de tragarse toda esta basura todos los días? ¿Treinta anuncios para combatir el mal aliento? ¿En serio?

Cuando llega al canal sesenta y pico, hay un instante en el cual se les iluminan los rostros.

"¡Espera, espera, vuelve atrás!" Exclama Ghoul saltando sobre el asiento.

Poison vuelve al canal anterior, y apenas creen lo que ven. O más bien lo que escuchan.

"¿No os suena a Nirvana?" Pregunta sorprendido Jet, tratando de agudizar el oído.

"No nos suena, ¡es que lo es! ¿De dónde demonios lo han sacado?

Pero nada más empieza a hablar la presentadora del programa, una serie de distorsiones aparecen en pantalla. El rugir de la nieve televisiva retumba en los altavoces y, por el aspecto de sus miradas, los Killjoys no parecen entender nada. Al rato, mientras la nieve sigue acaparando la emisión, una serie de letras comienzan a aparecer.

"Esto no me da buena espina..." Confiesa Jet echándose un poco hacia atrás.

"K-E-E-P R-U... N-N" Lee Ghoul a medida que avanza el número de letras.

Oh mierda.

"¡Al suelo!" Exclama Poison al entender de qué va todo esto.

Y de un salto se plantan detrás del montón de la ropa sucia, mientras la televisión explota en un sonoro estallido, esparciendo sus pedazos en llamas por toda la habitación. Una rápida humareda negra se levanta en la sala, viéndose obligados a abrir las ventanas para no morir intoxicados.

"¡Rápido, rápido, hay que apagar el fuego!" Profiere Jet Star recogiendo un puñado de ropa para contrarrestar las llamas.

"¡No jodas!"

"¡No tenemos tiempo, tenemos que irnos de aquí!" Exclama Poison mientras se asoma por la ventana, contemplando la gran columna de humo negro que asciende hacia el cielo del desierto. "¡Nos han pillado! ¡Rápido, coged todo lo que podáis y vámonos!"

Los otros dos Killjoys asienten, cargando en ambos brazos con montones de cosas que encuentran a su paso, no saben si útiles o no. Poco importa, la verdad. Cuando ya no pueden más, salen de uno en uno por la ventana, alejándose de las llamas que están acabando con su preciado refugio. Por suerte, y gracias a su don de la oportunidad, Kobra Kid aparece rodando el neumático sobre el asfalto, con la boca completamente abierta.

"¿Pero qué coño ha pasado aquí?" Grita todo lo que puede, frenando a su lado en un llamativo derrape.

"¡No hables, pisa el acelerador!" Le indica Poison mientras se suben al coche.

Y quemando rueda, salen escopeteados de allí antes de que algún grupo de Draculoides les siga la pista, porque la humareda que se ha levantado tiene pinta de poder verse desde Battery City. Por los pelos... Lo peor es que ya no tienen lugar en el que esconderse; habrá que volver a vagar por el desierto en busca de un nuevo escondrijo oculto de la mirada de BL/ind durante un par de jodidos días.

Pero una cosa es segura: cuando lo encuentren, tirarán la puta televisión por la ventana.


KILLJOYS empieza por...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora