-Lo sé Zayn. Pero es que me cuesta tanto, empezar una nueva vida, es difícil, es difícil darte cuenta que ayer eras una jovencita alocada e inmadura y que hoy ya eres una mujer responsable de un bebé, simplemente todavía no me lo creo- suspire.
-Sí ____, pero ya es hora de hacer algo, sí tienes razón es difícil darte cuenta de la realidad, pero eso ya lo superamos, oh al menos a estas alturas.
-Déjame pensarlo por favor- dije tomando un rollo de sushi.
-Es demasiado tarde para pensar las cosas _____, es hora de actuar.- se limpió la boca con la servilleta y tomo mi mano.
-De acuerdo, sólo déjame terminar mis estudios aquí.
-Pero... _____ mi casa es segura, antes y después de que nazca en bebé. Mi casa... Mejor dicho nuestra casa, tiene jardines, una piscina, muchos cuartos, es espaciosa, tiene juegos, ahí estará Teressa...
-¡Basta!- hablaba como un tipo presumido.- ¿Qué estará Teressa? ¡Eso no me importa!, no quiero que mi hijo sea criado por una ama de llaves, ¿Okay? Quiero que tenga a su madre, quiero que estemos juntos, Zayn las cosas no son como antes, que las niñeras eran las sirvientas mientras que las madres se reunían con las amigas a fumar, tomas y jugar Póker, ¡Ya no es así!- Reclame.
Vi que Zayn apago la mirada, Oh dios... ¡____! ¿Qué has hecho?, Él te ofrece, casa, lujos, el sol, el cielo y las estrellas y yo hiero sus sentimientos ¡Perfecto, que gran persona eres!-Me regaño mi subconsciente-.
-Zayn yo... lo siento, no quise decir eso, yo... no creí que eso pudiera salir de mi boca. Lo siento- susurre.
-Yo no creo eso. ¿Cómo puedo esperar que cuides de mi hijo, si sigues siendo la misma inmadura de siempre?- se levantó bruscamente de la mesa arrojando la servilleta a la mesa.
-¡Hay por favor Malik!- reproche- No quieras ahora sacar trapitos al sol, porque si de Inmaduros estamos hablando ¡Eres tú!- le escupí las palabras siguiéndolo mientras él se daba la vuela. Me miro con los ojos negros y por un momento me sentí vulnerable a su lado. No deje que la idea me opacara y, me pare derecha y con la mirada e alto.
-¿Inmaduro?- me tomo las dos manos con fuerza mientras que me miraba ¿Con odio?- ¡Contéstame!- grito empujándome- ¡Inmaduro yo!- dejo escapar una sínica carcajada mientras se desabrochaba la corbata.
Lo miraba aterrada desde una esquina de la sala, con las manos juntas a la altura del pecho.
-¡Tú eres la inmadura maldita estúpida!- grito.
Las inmensas ganas de llorar me asechaban algo que no quería. Cerré los ojos con fuerza imaginando que este momento es sólo una pesadilla y que él hombre que está parado frente a mi gritándome estupideces no es Zayn.
-¡Claro!, era de esperarse si tú madre es una puta que siempre te maltrato y te trato como si no fueras NADA y eso, eso es lo que tú eres ____ nada a comparación con todas las chicas que conocí en las vegas- sonrió.
Lo mire sorprendida y él una vez más río.
-¿Enserio te creíste eso de "el viaje de negocios"? ¡Por favor!, sólo quería estar solo, y alejarme de ti.- Sonrió- Tú no eres nadie ____, Nadie, tu maldito padre es un narco de dónde saca el dinero y dice ser un gran productor de películas- grito.
Cada palabra, cada gesto, cada respirar, me estaba matando por dentro. Como si me encajaran algo en el estómago.
-Tú no Eres...
-¡Cállate!- grite con las manos en los oídos y los ojos llenos de lágrimas.- Cállate- susurre.
Me miro con rabia y me tomo de los brazos haciéndome elevar, me tiro al sofá, alzó su mano. Cerré los ojos para recibir su puñetazo, pero no sentí nada. Los abrí lentamente y vi que él me observaba con miedo.
Se dejó caer al suelo y comenzó a llorar, se hizo bolita y se acurruco en una esquina, temblaba y yo lo observaba con lástima.
-Maldito seas, maldito seas...- susurraba entre sollozos. Me miro enternecidos- ¿_____?- se acercó un poco a mí y yo me hice chiquita en el sofá. Él se detuvo asintiendo.
Abracé mis piernas y baje la cabeza, deje que todo eso que traía en el pecho, saliera. Lloraba, lloraba y lloraba, mientras él tenía la mirada perdida. Los dos hechos un desastre.
El sol se coló, por las cortinas haciéndome despertar, el sonido del tocino cocinándose en la sartén y su buen olor me despertaron.
Abrí los ojos despacio y me di cuenta que estaba en el sofá, alcé la vista por el respaldo y mire a Zayn de espaldas, poniendo huevos revueltos, tocino, y pan tostado en uno de los platos.
Me levanté sin hacer mucho ruido y, camine a la cocina, Zayn me miro y sonrió.
-Buenos días- me beso en la mejilla.
Okay, ¿Era yo o lo que paso anoche fue una simple pesadilla?
-¿Quieres huevos? Lo que quieras hare, hot cake's, wafles, lo que sea.
-Huevo está bien, gracias- susurre.
Me senté en uno de los banquitos de la barra y vi como él ponía dos platos, uno en mi dirección y dejo el mío justo en frente de mí.
-¿Cómo dormiste?- Bien. No más rodeos.
-¿Qué fue lo que sucedió anoche?- pregunte soltando el tenedor bruscamente.
Zayn suspiro y dejo el tenedor pero con delicadeza.