La mordida

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Tome dos cucharas y las coloque en los boles de nuestro desayuno. Necesitaba mimar a papá antes lo más que podía antes de soltarle la gran bomba y esa era que había encontrado una manada con un nuevo beta lo increíblemente fuerte como para destrozar el cuello de cualquiera como si fuera una galleta. Me rehusé a que Stiles me trajera a casa por lo que termine viniendo en la bicicleta. Stiles, en verdad era un chico muy adorable, además de simpático, gracioso y muy atractivo se nota que se preocupa por Scott y a regañeses de Liam se me estaba dificultando la tarea de alejarme a él. Ahora de Liam no he tenido noticias pero si me lo llegara a encontrar más vale que sea antes que Scott, a pasado mucho por su culpa y a pesar de que lo quiera ayudar podría ahuyentarlo aún más.

Se escucharon unas pisadas demostrando a mi papa con su camisa blanca y pantalones negros. Se dirigió a la cocina para preparar café supongo.

- ¡Olivia, pero que rayos cocinaste!- Desvié la mirada de mi plato para observar el fregadero. En él se encontraba una pila de ollas sucias con platos y cubiertos. Era un total desastre, evite mirar el rostro enojado de papa.

-Solo quería hacerte el desayuno- Dirigí mi palma hacia su plato -Hice cereal- dije en un tono de inocencia.

-Hiciste cereal- Su tono era iluso como si aún no pudiera procesarlo.

- ¡Y todo este desastre!- Lleve una cucharada de mi cereal a la boca.

-Lo limpiare luego- tenía la boca llena de cereal y derrame un poco en la mesa, papá coloco su puño en la boca y lo abrió un par de veces.

-Sabes que...olvídalo, yo lo limpiare a lo mejor lo dejarías peor. Miro el reloj de la cocina. -Apresúrate llegaras tarde a la escuela-. Sonreí. Y el solo puso los ojos en blanco. Aunque vi una ligera sonrisa en sus labios. Mire hacia la puerta.

Tock tock Por favor hoy no

Papá se dirigió hacia la puerta con un poco de sorpresa. Y como no, no acostumbramos visitas. Casi no tendría problemas con las visitas pero el problema era lo que se encontraba en el otro lado de la puerta. Papá la abrió mostrando a él intranquilo Stiles Stilinski. Mierda.

- Señor Blair Buenos días- las cejas de papa se juntaron, mientras recarga su peso de un lado. Esa era la pose no te quiero aquí. -Stiles acaso te has golpeado la cabeza estos días- Stiles me miro confundido. Y aproveche para mover mis labios y decirle que mi papá no sabía nada.

Allí sus ojos se agrandaron en señal de comprensión -Ehh no señor. No que yo recuerde- Olía su miedo desde el mini comedor. -Porque recuerdo específicamente haberte dicho que te fueras de mi casa la última vez que viniste- El solo comenzó a mecerse con sus manos y pies. -Si eso fue exactamente lo que dijo- apunto su pecho con una de sus manos- pero creí que solo era por ese día...- Oh por Dios- Además no me dejo explicarme -dijo alzando sus cejas haciendo una mueca muy extraña. Mi papa me echo una rápida mirada y yo solo vi mi plato de cereales a la mitad.

-No es el momento para dar explicaciones Stiles tu deberías estar yendo a la escuela- Puso su mano en la puerta y Stiles la detuvo. Papa frunció el ceño. Y el corazón de Stiles se aceleró. - Lo se Señor... pero quería decirle a su hija si no tenía problemas en que fuéramos juntos a la escuela, ya que es la misma ruta usted sabe- Sentí mi corazón ir un poco rápido. Enserio estaba hablando con mi padre para llevarme a la Escuela.

-Eres muy amable pero yo puedo llevarla- aclaro papá. Decidí intervenir tomando mi mochila dejando el cereal así sin terminar. -No te molestes papá- dije con una sonrisa- hice una señal de saludo para Stiles y el sonrío por haberlo sacado de apuros o eso creía yo.

Pflichttreue: Teen WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora