La pareja perfecta

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Pase por mi casa a encender las luces, darme un baño y comer. Luego me dirigí a la casa de Stiles pensando en si debía tocar la puerta o no. Pasar la noche en su casa no parecía una buena opción para evitar que no tener sentimientos tan fuertes hacia él, de hecho era una pésima idea. Me detuve de seco en la puerta un rato, Stiles debía estar ahora con Lydia. Quizás no era una buena opción que los interrumpa. Así que solo me di la vuelta, pero al dar unos pasos la puerta se abrió.

-Olivia- Me detuve en seco y me di vuelta. Lydia se encontraba junto a Stiles en la puerta. Si estuviera transformada sus esencias estarían entrelazadas unas con otras formando ese nudo que las mantenía unidas.

-Solo vine a preguntar si te encontrabas bien- dije en tono ronco. –Si ambos, se encontraban bien- sentí mis mejillas teñirse, esto estaba yendo terrible.

Ambos se miraron confundidos y luego Lydia respondió- Tranquila, me encuentro bien- dijo dedicándome una sonrisa. –De hecho, ya me iba. Asentí y ella paso junto a mí, pero antes de eso coloco su mano en mi hombro.

-Deberías dejar la timidez Liv- Abrí los ojos, sorprendida, ella se marchó sonriendo de la casa de Stiles.

-¿Quieres pasar?- Me dirigí hacia él y asentí pasando junto a él.

Subimos a su habitación. Estaba algo desordenada, tenía una especie de tabla con las pistas sobre el benefactor y todo lo que hemos descubierto hasta ahora. Estaba maravillada viendo las líneas rojas uniéndose unas con otras y luego observe a Stiles, quien sin darme cuenta ya me estaba observando.

Escuchada sus latidos acelerarse. Él estaba nervioso.

-Stiles yo...-

-Liv...-Ambos callamos- Me hizo una seña para que hablara primero.

- Fui a ver a tu padre, pero estaba sedado- dije en un murmuro. Notaba a Stiles tenso, como si estuviera preocupado por algo.

-Ya le quitaron la bala del hombro. El estará mejor- Esa buena noticia no llego a su ojos. Seguía igual de serio.

-¿Ocurre algo?- Verlo así me estaba desconcentrando. Aparto la vista y miro alrededor, luego pareció que no había nada más interesante así que volvió a fijar su mirada en la mía. Sus nervios hacían que los míos aumentaran.

Solo negó y se sentó en la cama- No ocurre nada. Solo...-

Tome asiento junto a él y luego, coloque mi mano en su hombro para alentarlo a contarme. El sujeto mi mano y le dio un apretón, sonreí un poco ante ese gesto.

-Se trata de mi papá- lo mire preocupada y luego él se volvió a mirarme. –El seguro no podrá cubrir toda su hospitalización y estoy preocupado por el dinero. Aunque él me dijo que eso era asunto suyo, que el adulto era el.- su voz era apagada y triste.

-Lo siento mucho Stiles- el no estaría pasando por esto de no ser por mi culpa.

-No te sientas culpable con esto Liv. Lo que menos quiero es que te sientas así- coloco su mano en mi mejilla y la sostuve. En el momento en que nuestros ojos se conectaron, me di cuenta que jamás podría de sentirme en la manera en que me sentía respecto a Stiles, era tan divertido, sarcástico, hiperactivo, dulce y podría enumerar muchas cosas más, pero aun así. Mirarlo me dolía mucho más de lo que cualquiera se podría imaginar, y lo peor es que no podría sanarme como quisiera.

-Stiles, hay algo que debo decirte- temblaba, todo mi cuerpo temblaba a su tacto. Ladee la cabeza y me acerque más a él. Ahora nuestros rostros se encontraban a centímetros. Mire sus ojos marrones, cabello castaño, cada lunar de su rostro. Solo tenía que decirlo

Pflichttreue: Teen WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora