Pflichttreue: Teen Wolf

Debilidades y perdidas

Estaba casa de Scott. Le conté sobre como habíamos ido a Eichen House para conseguir información de la nueva lista que conseguimos, como el conserje que trabajaba en ese lugar trato de asesinarnos y de la resurrección de Meredith. El me conto que Kira, Liam, Malia y él también fueron salvados al igual que nosotros por Derek y Sutton, quienes impidieron que él y el resto fueran incendiados. De allí el olor a gasolina que percibí en la Casa Eichen, mis poderes eran muchos más fuertes como beta. De repente se creó como una especie de conexión entre Scott y yo, era difícil de explicar pero esa conexión era lo que hacía que pudiera seguirle el paso estos últimos días.

Scott había estado en problemas y simplemente había percibido el olor a gasolina. Pero ¿Podría haber hecho algo más? Esa pregunta me estaba rondando en la cabeza y necesitaba respuestas. Solo, que ahora no era tiempo para platicar con nadie sobre esto. Al rato también, llego Liam.

-Kira encontró a Brett, debemos irnos...-salí de mi pequeño trance, ante la orden de mi alfa. Deje la silla y me coloque junto a él con una pequeña sonrisa. Scott me había dado las gracias en una conversación que ambos teníamos pendiente, me agradeció por haberle salvado la vida en aquella ocasión en que había un virus en la escuela. El confeso que fue Stiles quien salvo mi vida, y eso me alegro un poco. Ya no dudaría de los sentimientos de Stiles después de esto. Ya no más.

-¿Mas asesinos?- pregunte.

-Puede que muchos más-

Ay no pensé.

-¿Diferentes a los que trataron de prendernos fuego?-

-Algo así-

Mire a Liam, esta vez. Sus ojos estaban temerosos, sus pulsaciones eran aceleradas. Él no quería venir con nosotros. No podía hacer esto. Pero también me di cuenta de otra cosa, estaba avergonzado por no querer acompañarnos. Scott también se había dado cuenta ya que estaba debajo del marco de la puerta mirándolo, en cuanto nuestras miradas se cruzaron, solo le hice una seña para que hablara con él.

-¿Qué tal si te llevo a casa?- se ofreció Scott.

El azul de los ojos de Liam se enfocó en mí en un momento. Estaba pensándolo, estaba preocupado por nosotros.

-Yo no soy como ustedes- Recordaba pensar en eso cuando conocí a los muchachos, aunque Liam se refería a algo completamente distinto. Me alegraba saber de qué a medida de que conocí a los chicos me aceptaron por cómo era, me incluyeron en su manada sin importar mi pasado y me han protegido. Por eso los quiero, y entiendo que para a Liam todo esto resulte aun nuevo para él. No se ha adaptado como yo... lo hará pero aún necesita tiempo.

- Pronto lo serás- trate de darle confianza.

-No me refiero a ser más fuerte o que nunca voy a aprender a mantener el control, me refiero a todo lo demás- Desvió su vista a Scott – Tú, ustedes intentan proteger a todo el mundo ¿Han estado haciendo eso todo este tiempo? Quiero decir ¿Cómo es que están todos vivos aun?

-No todos lo estamos-

Me sorprendió escuchar esa confesión, para cuando lo mire. Ya me estaba sumergiendo en su recuerdo.

Estaba inundada en tristeza, se sentía como si eso jamás acabaría. Tenía a alguien entre mis brazos. De alguna manera alce mi mirada hacía la persona a quien sostenía. Estaba en shock, el charco de sangre bajo mis manos la sangre brotando de la herida que tenía en el estómago y los ojos cerrados de la chica. Su cara lucía angelical, lucía más bien que ella estaba durmiendo. Sus parpados se encontraban cerrados debajo de sus largas pestañas, y su cabello se extendía a ambos lados de su rostro.