La menor de los Cullen

Tan viejo y tan joven

Al día siguiente me arregle y Alec me esperaba fuera de mi puerta con una gran sonrisa y unos lentes oscuros

–¿Lista?

–Si ¿Cómo llegaremos a Milán?

–A veces parece que crees que somos incivilizados joven yankee, tenemos autos, bastante decentes la verdad, no podemos estar llamando la atención si tenemos que salir de la ciudad por alguna razón

–No te imaginaba conduciendo

–No es mi actividad favorita a decir verdad

–Yo podría hacerlo si me lo permitieras

–No es una mala idea, te vez mayor que yo, y pasas por turista

Caminamos hasta un Rolls Royce Phantom que me dejo boquiabierta, enserio que tenían buen gusto

–Usualmente es Félix quien maneja, pero no usamos mucho los autos, aunque Renata insiste en que deben ser elegantes, a la altura de la guardia, ¿Tú que conduce es en tu casa? –Un Audi, no es tan elegante como este, pero es perfecto para mí

–Te gustan los autos, los gatos, los libros y la música entonces

–Me has estado prestando atención, a ti te gustan las estrellas

–Sí, me gustan las estrellas, así como me gusta el dorado de tus ojos –vaya que eso no me lo esperaba, últimamente me sorprendía constantemente con los italianos.

–Gracias

–Aunque eso no quiere decir que comprenda como mantienes esa asquerosa dieta

La mayor parte del viaje no la pasamos conversando de cosas triviales, de cómo era ir al instituto, o pretender llevar una vida normal, de la música que prefería, también me contó un poco de él, de sus gustos, Alec era un viejo atrapado en un cuerpo muy joven, tan viejo y tan joven. Llegamos a Milán y la verdad es que no pude evitar sentirme un tanto embobada con la ciudad que sin importar que estuviera lloviendo mantenía esa elegancia italiana que tanto me gustaba, y aunque no necesitaba comprar nada me maraville observando escaparates, mi mirada se perdió en un vestido negro Armani, demasiado elegante talvez, pero hermoso

–¿Te gusta?

-Me encanta

–Entonces vamos por él

–No tendría donde usarlo

–Eso no importa, es algo bello y no podemos negarnos a la belleza, además, lo puedes usar en la torre, seguramente has notado que la ropa lujosa es bastante popular allí

–Bueno, solo me lo probare

El vestido parecía haber sido hecho para mí, me ajustaba perfecto y en realidad me sentía hermosa en él, Salí del vestidor y Alec me sonrió

–Ya lo decía yo, perfección, belleza elegancia, este vestido es perfecto para ti –Creo que me lo llevo

–Si no lo haces tú, lo llevare para ti, no podemos abandonarlo ustedes están hechos el uno para el otro –Si me lo llevo

No pretendía comprar nada y al final del día tenía el carro abarrotado de paquetes con más ropa sombreros zapatos y bolsos, y Alec y yo nos encontrábamos caminando junto a la fontana de la Piazza Gae Aulenti, ya no llovía, pero la lluvia había ahuyentado a la gente y el lugar estaba bastante solo y el solo se ocultaba tras las nubes oscuras

–Alec ¿para qué me trajiste aquí?

– Porque quería hablar contigo lejos de los oídos de la guardia Effie, hace unos días me preguntaste si le simpatizabas a Jane, y la respuesta es un tanto obvia, no, pero me preocupa el hecho de que no solo no le simpatizas a mi hermano, tu cercanía con el maestro Marcus y los cambios que ha habido en él últimamente tiene en alerta a toda la torre, incluso Cayo está empezando a molestarse por la cantidad de tiempo que él te dedica –He notado que muchos no me quieren ahí, y de ser necesario me podría marchar, pero ¿Tú crees que me encuentre en peligro? –No realmente, no aún, pero te lo cuento para que tengas cuidado, mantén tu relación con él como alumno y maestro, no dejes que crean que hay algo más y no habrá problemas

–Entiendo

–De cualquier manera, su relación es de maestro pupilo ¿verdad?

–Claro –no estaba segura de porqué pero esa palabra me supo amarga como la más grande de las mentiras –Me alegra escuchar eso, no me gustaría verte en algún aprieto- dicho esto me tomo la mano y la llevo a sus labios para un suave roce y la soltó –Valoro tú presencia en Volterra –Gracias Alec, a mí también me gusta tenerte en Volterra

El camino de regreso fue similar, pero constantemente me acosaba la idea de la guardia molesta por mi cercanía con Marcus, y no podía para de pensar en el beso que Alec me había dado en la mano ni en cómo había sentido que le mentía cuando le dije que no había nada con Marcus, y peor aún, sentía que estaba engañando a Embry y que él merecía saber que dos sexys vampiros italianos estaban peligrosamente cerca de mí, pero luego recordaba que él muy probablemente se encontraba de lo mejor con su chica y se me sentía triste de nuevo, no podía creer que mi cabeza fuera un embrollo tan grande.

Llegamos a Volterra ya avanzada la noche y subí directo a mi habitación, empecé a guardar las compras en el armario, pero cuando toque la tela del vestido negro sentí el impulso de ponérmelo, estaba terminado cuando alguien llamo a la puerta, la voz de Marcus era inconfundible

–Pasa –y ahí estaba alto, apuesto, siempre bien vestido y con esa seriedad misteriosa que le caracterizaba

–Wow

– ¿Podrías ayudarme con el cierre por favor?

–Será un placer –se acercó sin hacer el menor ruido y puso sus suaves manos que cada vez tenían menos la apariencia de un Vulturi sobre mi espalda mientras subía lentamente el cierre, acerco sus rostro a mi cuello y aspiro, para luego mostrar una pequeña sonrisa en su rostro, fue realmente rápido, un momento estaba de espalda a él y al siguiente me había tomado por la cintura para girarme hacia él y nuestros rostros estaban a apenas centímetros, sus ojos rojos que ya no tenían el velo de la edad, su rostro simétrico por el que mataría cualquier modelo y la boca que nunca sonreía se acercó a la mía y me beso, había besado otros chicos, pero nunca nada como esto, el beso era lento, pero contenía una enorme cantidad de emoción, años de angustia que se derretían en un instante para dar paso al beso que hacía que olvidara donde me encontraba y lo peligroso que era, se separó de mi con cuidado con una sonrisa en el rostro y abrió los ojos lentamente

–Eres tan joven y yo tan viejo

Lo sé, soy la peor, duré un montón para actualizar pero no tiene una idea el embrollo personal que he tenido, además soy la peor porque enredo toda la historia, ¿Ahora con quién la shippean? Marfie, Effbry o Alffie? ¿Difícil verdad? Cuéntenme coméntenme cuéntenme lo que quieran, pero escriban y recomienden. Para los que preguntaron por la traducción de Lord of Shadows, no la hice yo pero ya está lista y si la quieren mándenme un privado con su correo y la envío, espero les guste el capítulo y que me escriban

XOXO

Ice