Invernalia

1.3K 59 0
                                    

Tres pequeños niños de unos seis años corrían como locos por todos lados, con unos palos golpeando como si fueran espadas, gritando y riendo, bajo las miradas y las sonrisas de dos hombres.
- Jory me parece que vas a tener problemas para que aprenda a coser.- dijo Eddar Stark, señor de invernalia a su jefe de la guardia, entre risas.
- si, me parece que esta mas interesada en la lucha que en las Costumbres de damas, mi señor.
El joven Jory admiraba como su pequeña y unica hija, Lyssa, jugaba con los dos hijos mayores de su señor, Robb y Jon, el pequeño bastardo.
Se la veía tan feliz con su palo dando estocadas al aire.
- tal vez deberías dejarla que aprendiera Jory, en algún momento el invierno volverá, y no esta de mas que una joven sepa defenderse.

- Lyss eso no vale.
- vamos Robb no seas un llorica- le dice su hermano.
- ahora veras-dice el joven Robb levantándose del suelo y volviendo a cojer su palo del suelo.
Roob comenzó a correr detrás de la joven que corría entre risas intentando huir de su perseguidor.
- Jon, ayudame que me atrapa- dice la joven entre risas corriendo en círculos al rededor de un grueso tronco.
- ya voy a salvarla noble dama- dice Jon con voz solemne como si fuera un autentico caballero.
Jon y Robb se enfrentan en un duelo entre risas mientras Lyss aprovecha para salir corriendo con ventaja.
- ¡eh, cobardes!- grita la niña- atraparme si podéis.
Los chicos se miran y comienzan a correr.
Se van alejando mas y mas de la zona del castillo sin escuchar a sus padres que les llamaban.
Lyssa mira hacia atrás y ve que los chicos cada vez están mas cerca, sobre todo Jon que es el mas rápido de los dos.
Sin darse cuenta tropieza.
-¡Lyss!- grita Jon al ver como la niña se desploma en un pozo.- ¡Lyssy, me oyes!- vuelve a decir al situarse en el borde del agujero.
No obtiene respuesta.
Jon mira a su hermano que se a quedado parado a escasos metros de el.
- vamos Robb no te quedes ahí, ve a buscar ayuda, yo bajare a por ella.
Robb asiente y sale corriendo hacia donde se encontraba su padre, seguro que el sabría que hacer.
Mientras tanto el joven Jon consigue bajar al pozo y llega junto a la niña, que esta con los ojos cerrados llena de barro y con un fino hilillo de sangre que le cae de la sien.
- Vamos Lyssy, despierta porfavor- suplica mientras coloca la cabeza de la niña sobre sus rodillas y le aparta el pelo color fuego de la cara.
Jon esta pensando como puede sacar a Lyss del pozo. La verdad es que no es muy profundo pero no sabe si podrá con ella en brazos poder subir hasta arriba.
Oye un leve gemido y baja la vista, ve como unos hermosos ojos grisáceos con motitas verdes se abren podo a poco.
-hola Jon- dice con un leve susurro.
- hola- le responde con una sonrisa.
- ummm creo que he perdido mi espada- le dice la niña con cara de disgusto intentando levantarse.
Jon se lo impide dejándola con la cabeza en sus piernas.
- eres increíble Lyss- le dice el niño riendo- te acabas de caer a un pozo, te has golpeado la cabeza y te preocupa un palo.
- no es un palo Jon, era mi espada- le dice molesta- un buen guerrero no pierde su espada.
Jon iba a replicar pero empezó a escuchae a su hermano que le llamaba, escuchaba mas pasos, pasos de adultos.
- ¡Jon, Lyssa!- oía gritar a Lord Stark
- ¡Aqui!- grita Jon- estate quieta- le dice a su amiga que intenta levantarse.
- estoy bien Jon
- no no lo estas, te has golpeado la cabeza.
Jory Cassel asoma la cabeza por el pozo.
- ¡por los dioses! Están aquí mi señor.
Baja al encuentro de los jóvenes. Lord Stark le ayuda a cojer a la pequeña Lyssa que no deja de repetir que esta bien y la saca del pozo y ayuda a salir a Jon de allí.
La vuelta al castillo es silenciosa. Jory lleva a su hija en brazos al lado de Ned mientras los dos niños van detrás en silencio.
Jon no puede dejar de pensar cuando la vio en ese agujero tirada, la preocupación que lo invadió y la alegría cuando ella abrió los ojos.
Llevaron a la joven junto con el maestre Luwin, quien aseguro que la niña estaba bien, que había sido un golpe sin importancia y un tobillo un poco hinchado a causa de la caída pero nada grabe.
- vamos chicos, dejemos que descanse- le dijo Ned a sus hijos.
- mi señor- comenzó a decir Jon- puedo quedarme con ella, por favor.
Ned miro a Jory quien asintió.
- esta bien Jon.- le dijo a su hijo cogiéndole del hombro- pero nada de escaparos, ni luchas, solo cuida la que este quieta.
- claro- dijo mientras entraba en la habitación. Cuando Lyss le vio se le puso una gran sonrisa en el rostro.
Ned los observó y sonrió, aunque sabia que aun eran muy jóvenes podía ver entre ellos un cariño especial, tal vez cuando fueran mas grandes podría casar a su hijo con la joven Cassel, ya que Jon no portaba su apellido no tenia la obligación de casarse con una gran señora, así que podría ser.

Se acerca el inviernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora