Se acerca el invierno

El Rey, sureños y un enano (II)

Jon

Estaba en mi cama tumbado junto a Fantasma, pensando que podría hacer esta noche mientras todos disfrutaban de la cena.
La puerta sonó y se abrió, esperaba ver a Lyssy, pero era mi padre.
- Señor- dije levantándome de golpe.
- Jon, por favor, que soy tu padre- dijo mientras cerraba la puerta y se situaba a mi lado, sentándose en la cama y haciendo ademán de que le acompañara.
- ¿que ocurre padre?
- quería hablar contigo Jon- hizo una pequeña pausa- el Rey quiere que me convierta en su mano. Quiere que abandone Invernalia para ir a Desembarco del Rey.
- eso es una gran oportunidad padre.
No sabia porque me contaba aquello.
- aun no he decidido nada, aunque no se si realmente puedo negarme.
Parecía cansado, como si todos los años que había vivido hicieran mella en el de golpe.
- pero realmente no vengo a hablarte de eso, venia a darte algo.
Me entrego un paquete envuelto con tela de color gris, parecía muy liviano, lo mire sin comprender.
- era de mi hermana Lyanna, era su vestido preferido, se lo ponía a todas horas, para cenas, incluso cuando salia a cabalgar.
Lo mire atónito, no sabia que significaba esto.
- vamos Jon- dijo con una estruendosa risa- soy tu padre, ¿de verdad creías que no me he dado cuenta de lo de Lyss?.
Ahora mi incredulidad crecía, y empecé a ponerme nervioso aunque intentaba no demostrarlo.
- es un regalo, para ella.
- Lyssy odia los vestidos...
- odia los vestidos porque cree que la veréis diferente, que parecerá débil, pero este le gustara. Esa muchacha siempre a admirado a mi hermana, seguro que le gusta y mas si se lo das tu.
- me lo tirara a la cara...
- no lo creo hijo- dijo poniéndome una mano en un hombro.- disfruta el tiempo con ella, y cree en lo que sientes, porque creeme el amor es mas poderoso que el acero y no se puede romper.
Sin mas se levanto y se marcho. Dejándome pensantivo con el vestido en las manos.

Lyss

Coji el paquete que se encontraba en mi cama. Había una nota que ponía Para Lyssy en una caligrafía que conocía demasiado bien. Sonreí y abrí la nota.
Mi querida Lyssy:
Se que lo primero que vas a hacer es leer la carta, pero te pido que abras el paquete y lo veas. Ahora te explico.
Con una sonrisa desate los cordeles que lo amarraban y quite la tela que lo cubría.
Cogi el contenido. Era un vestido, de color gris perla, con pequeños estampados. Volví a cojer la nota.
Ahora, antes de que entres en furia, tiene una explicación. Mi padre me lo ha entregado para que yo decidiera si te lo regalaba.
Se que los odias, pero perteneció a mi tía Lyanna, y pensé que te gustaría. Seguro que estas muy hermosa con el, siento no poder verte, si al final decides llevarlo esta noche.
Te suplicó por mi vida.
Con amor.
Jon.
Deje la nota con una sonrisa, y me fije mejor en el vestido. Los estampados eran pequeñas cabezas de lobo huargo, el emblema de los Stark. Decidí ponérmelo.
Cuando me mire en el espejo no pude evitar sonreír. No me veía débil, al contrario, me sentía bien. Quien iba a pensar que llegaría el día que al final cediera, y que iba a ser por él.