Se acerca el invierno

El Bosque Susurrante

- ¿Cuantos hombres hay?- preguntó Robb a los exploradores.
- unos dos mil, mi señor.
-Podemos hacerlo Robb.- le dije.- tenemos que dividirlos, así ganaremos.
- Vamos a hacer mas que dividirlos- dijo Robb- vamos a capturar a su comandante.

~~~

Sangre y barro, eso era todo lo que había a mi alrededor.
Estaba cansada y cubierta de mugre, pero no podía parar, no me podía dar por vencida.
Un lancero Lannister venia corriendo hacia mi.
Me eche a un lado esquivando la lanza por poco e inserte mi espada en su nuca. La sangre salia a borbotones cubriéndome la mano al sacar la espada.
Y así una y otra vez, debía seguir aguantando, debía seguir al lado de Robb.
Me quite del medio a otros cuantos soldados cuando le vi. A adentrándose mas en el Bosque Susurrante, allí estaba nuestro objetivo. Jaime Lannister.
Sin dudarlo ni un segundo corrí tras el, en mi camino un soldado cargo su espada contra mi, pretendía cortarme la cabeza. Pero yo fui mas rápida, me agache por lo que solo recibí un corte en la mejilla y el quedarse sin piernas.
- ¡Tu , Lannister!- le grite-¡detente!
El hombre se quedó parado observándome con aire de superioridad.
-¿que piensas hacer, niña?- me dijo- ¿acaso crees que puedes vencerme?
Empezó a caminar hacia mi. No retrocedí.
Su espada empezó a asestarme golpes que iba bloqueando y esquivando, algunos con mas facilidad que otros.
- Tu cara me suena- dijo mientras intentaba darme- No eres la hija del jefe de la guardia de Eddar Stark.
- No menciones a mi padre- le dije comenzando a ponerme furiosa.
- ¡Oh! Perdona, pero no te preocupes- bajo la espada a la altura del suelo al intentar esquivarla me caí de espaldas- sois valiente joven, pero me temo que vuestro padre no os enseño a que las damas no deben jugar a las batallas.- me miro- no os matare, no acostumbro a matar niñas, aunque si os matara querría decir que acabe con Cassel y su descendencia.
Ese mal nacido acababa de admitir que había matado a mi padre. La furia entro en mi, me levante y al ver que el se alejaba coji una piedra y se la lance, dándole en el yermo.
- Vos no me matareis, pero yo si lo are- le dije poniendome en guardia.
- Niña estúpida.
Se avalanzo sobre mi pero yo llevaba ventaja, la rabia que sentía me hacia asestarle golpes mas fuertes, aunque los esquivaba, yo le ganaba posición.
Conseguí llevarle cerca de un árbol de grandes raíces y al esquivar un golpe mía bajo callo, justo lo que el había echo conmigo antes.
- Creo que me equivocaba contigo.- dijo con esa estúpida sonrisa que tenia.
-si te metes con el Norte, será lo ultimo que hagáis ser Jaime
S

e río.
- Y vos vais a acabar conmigo.
- No- le conteste- yo no, eres cosa del Rey en el Norte.
Rápidamente coji la piedra que tenia en el suelo y le golpee la cabeza para dejarlo insconciente.
- ¡Cassel!
- Lord Karstark- le dije sin dejar de observar al león desmayado.
- Vaya...¿has atrapado al Lannister tu sola?
Asentí.
- No sin esfuerzo mi señor- le dije sonriendo.
lord Karstark dio una voz y dos hombres vinieron a por Jaime Lannister.
- ¿que hacemos con el señor?
- no me preguntéis a mi, preguntadle a ella que fue quien lo abatió.
Me miraron con asombro.
-llevarlo ante Robb.
Salimos del bosque, y la imagen que vi me dejo estupefacta.
Miles de cuerpos llacian en el suelo, tanto amigos como enemigos, era horrible.
Comencé a recorrer los cuerpos con la mirada. A lo lejos vi a Jeyne, que empezaba a atender a los heridos. A ella le daba igual si eran enemigos o amigos, y yo compartía su idea. Todos eran hombres al fin de cuentas.
Seguí caminando hasta que note unos brazos que me giraban, para encontrarme frente a su dueño.
- Lyss- me dijo Robb abrazándose fuertemente- Gracias a los dioses que estas bien.
- Lo mismo digo Robb- le dije correspondiendo su abrazo.
Ambos estábamos llenos de barro y sangre, pero después de todo lo sucedido ese abrazo fue lo mas reconfortante del mundo.
-¿Estas herida?- me preguntó notando el corte de mi mejilla.
- solo son rasguños- le dije quitándole importancia.
- Lord Stark- dijo Karstark a su espalda.- os hemos traído algo que os interesa.
Robb se giro y vio a un sucio Jaime Lannister, desarmado y maniatado.
- Le habéis capturado, Bien- dijo Robb.
- Lady Cassel le ha capturado, para ser honestos.
Robb se giro hacia mi son poder contener su cara de asombro a lo que yo Sonreí ligeramente.
- Bien, volvamos al campamento- dijo a sus hombres que empezaban a acercarse a nuestra posicion- coged a los heridos, tanto de nuestro bando, como del suyo.