Jaehyo estaba feliz por ver a sus padres y a su mejor amigo luego de ya casi un mes estando separados, eso no lo podía negar pero al mismo tiempo estaba nervioso porque ya había decidido contarles la verdad y no sabía cómo hacerlo para que no lo tomaran tan mal. Sabía que tendría que afrontar las consecuencias que era el regaño que le iba a dar sobre todo su madre a pesar de que ya es un adulto pero como el hombre hecho y derecho que es se mantendría firme en la decisión que tomó a pesar de que no les gustara.
Cuando llegó el fin de semana en que sus padres y Taeil lo visitarían, fue a recibirlos a la estación de autobuses y de allí fueron hasta el hotel donde se quedarían. En ese primer tiempo en que estuvieron juntos no salió a flote el tema de su trabajo pero después de que se instalaron y salieron para almorzar, era el momento de la verdad, aunque Jaehyo intentaba hablar de otras cosas para no llegar a lo más importante tan pronto y así poder prepararse mejor.
-Me gustaría conocer muchos sitios de la ciudad pero en un sólo fin de semana no hay mucho que hacer- Taeil expresó su deseo un tanto decepcionado.
-Yo no conozco casi nada teniendo tanto tiempo aquí así que estamos igual-dijo Jaehyo.
-El trabajo debe consumir mucho de tu tiempo, si es demasiado vuelve a casa- le dijo su madre no tanto porque estuviese preocupada por su ocupado trabajo sino porque lo quiere de vuelta en casa.
-No, estoy bien, soy yo que no he querido salir a conocer la ciudad.
-Por cierto Jaehyo, tu madre me dijo que tenías algo que decirnos-le recordó su padre y Jaehyo se lamentó por dentro pero debía hacerlo.
-Así es y es algo que quizás no tomen muy bien.
Sus padres y Taeil se miraron preocupados por lo que iba a decir. Jaehyo entonces respiró profundo, mientras escribía dentro de su cabeza el discurso que iba a dar y estando ya listo, prosiguió a hablar.
-Lo que quiero decirles es que yo...Yo...-la pierna le temblaba y tenía un nudo en el estómago, estaba muy nervioso-...Yo no he sido del todo honesto con ustedes. La razón por la que vine aquí fue de hecho a trabajar pero...-aclaró su garganta y bajó la mirada-...Yo no estoy trabajando en ninguna empresa farmacéutica, ningún amigo me llamó para el trabajo.
-¿Cómo dices?-preguntó su madre confundida igual que lo estaban todos.
-No entiendo ¿Cómo que mentiste? ¿Por qué habrías de hacerlo?-preguntó Taeil.
-Porque sabía que a mis padres no les gustaría lo que iba a hacer. Deben saber que no fue idea mía inicialmente, me lo ofreció un muchacho que fue a Busan y como no soy profesional creí que con mi físico tendría oportunidad de hacer algo y podría hacer un buen dinero para ayudarlos. Al principio no estaba muy seguro pero ahora me gusta y quiero seguir haciéndolo.
-¿Qué es ese trabajo del que hablas?-preguntó su madre asustada porque se le había metido una idea nada bonita a la cabeza.
-Modelaje-respondió Jaehyo y su madre respiró aliviada pero enseguida peló los ojos.
-¡¿Cómo?!-alzó la voz la mujer.
-Mamá, sé que eso no te gusta pero no es tan malo como creías y de verdad me está gustando.
-Eso es una industria muy superficial ¿Acaso te volviste loco? ¿Quién fue ese chico que te ofreció tal cosa? Dime que lo busco y lo pongo en su lugar.
-Mamá, no te alteres ¿Sí? Sé que les mentí y eso estuvo mal pero el trabajo es bueno. Estoy en una buena empresa donde me están apoyando para arrancar con la carrera y sé que con mucho esfuerzo conseguiré hacer mucho dinero y podremos tener una gran casa propia, sin deudas y sin ninguna otra preocupación monetaria.
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Devil's Gift
FanfictionUna buena pose y una hermosa sonrisa no es suficiente para tener éxito en el mundo del modelaje, parece algo fácil lo que se ve en fotos y pasarelas pero es algo más complejo que requiere de esfuerzos y sacrificios, agregando la competencia, envidi...